Mónica Rodríguez (Recovo): “Ser una ‘start up’ de moda no es un ‘trigger’ para el inversor”

Un marketplace que pone en contacto a empresas de moda para dar salida a su excedente textil. Esta es la propuesta de Recovo, la compañía que se alzó como ganadora de la segunda edición de Fashion StartUp Contest hace apenas dos semanas, un proyecto impulsado por Meta y Modaes, con el apoyo de EY, El Ganso y Kibo Ventures, para identificar a la start up más prometedora de la moda en España. Después de casi un año de actividad, Mónica Rodríguez, cofundadora y consejera delegada de la start up, señala que hay muchas empresas en la industria de la moda que están en búsqueda activa de partners que les ayuden a transformar su negocio en un modelo más circular. “La circularidad comienza en la fase de diseño y producir menos forma parte de la solución”, afirma Rodríguez.

Pregunta: ¿Es más difícil emprender ahora que antes de la pandemia?

Respuesta: En nuestro caso no. La pandemia nos sirvió para reflexionar sobre muchas cosas y para tener claro qué queríamos. Aprovechamos ese momento de reflexión como impulso para pasar a la acción. Al final, esto nos ha beneficiado porque pudimos definir bien el foco y nos ha permitido lograr muchas cosas en muy poco tiempo, yendo mucho más rápido. Por otro lado, gracias a que la pandemia acelerara la digitalización, hemos podido tener reuniones virtuales con empresas de gran tamaño, cuando esto, antes de la pandemia, no habría sido posible. Esto nos ha abierto mucho camino.

P.: ¿Es la moda un sector atractivo para los inversores?

R.: No como tal. Después de nuestra experiencia negociando la primera ronda de Recovo, presentarse como una start up de moda no es un trigger para el inversor, al revés. Siendo una start up de moda, a veces, es incluso más complicado. Sólo hay que contar el proyecto desde un punto de vista más innovador, explicando qué puedes aportar al sector de la moda, qué vas a reinventar y cómo vas a ayudar. Hay que darle la vuelta al discurso para aportar valor y cambio con el proyecto que estás construyendo.

P.: ¿Hay un boom de start ups de moda vinculadas a la sostenibilidad? ¿Cuál es la clave para diferenciarse?

R.: No todas las empresas nacen fundamentadas en la sostenibilidad, pero el sector está cambiando y esto hace que las nuevas start ups tengan la sostenibilidad muy presente, convirtiéndola en un pilar esencial. ¿Qué hacer para diferenciarse? La sostenibilidad son muchas cosas, no es sólo que el proceso de producción sea sostenible; no implica sólo incorporar materiales sostenibles, es un todo. Para tener éxito el modelo de negocio ha de ser sostenible y debe perdurar en el tiempo, por eso hay que estudiarlo muy bien antes.

“Ser sostenible no implica que únicamente el proceso de producción lo sea”, explica Rodríguez

P.: ¿Es más fácil emprender en moda viniendo de una empresa grande?

R.: Sí. Todo el equipo de Recovo procede de grandes empresas y eso te da tablas y bases de procesos importantes. También te da una visión mucho más global de todo lo que vas a poder necesitar para que el negocio funcione. En las grandes empresas hay departamentos de todo tipo, compras, operaciones, producto, ecommerce, diseño, márketing… en nuestro día a día, nosotros trabajábamos codo con codo con este tipo de departamentos y esto te da una perspectiva más completa.

P.: En un entorno tan cambiante, ¿cómo afectan las crisis sanitarias o económicas a la hora de emprender?

R.: Hay veces que afecta ralentizando procesos o posponiendo estrategias que se tenían previstas a corto plazo. Con la pandemia, por ejemplo, muchas empresas han paralizado su actividad en ciertos países y, al final, esto se extrapola a toda la cadena.

P.: Ahora, ser sostenible es un factor diferencial, cuando ser sostenible sea obligatorio por ley, ¿dejará de serlo?

R.: La idea es que todas las empresas sean sostenibles, por lo que no debería ser un factor diferencial, sino una forma de ser. En el futuro no lo será, directamente, si no lo eres, no serás. El cliente final no elegirá una empresa que no sea sostenible pudiendo elegir una que sí lo es, sobre todo con las nuevas generaciones, que cada vez son más conscientes y tienen las cosas más claras en este aspecto.

“A la hora de emprender no se trata de ser uno más, sino de ser diferente”, añade

P.: Respecto a colaboraciones, ¿les han tendido la mano las grandes empresas? ¿Y la industria de la moda en general?

R.: Sí. En nuestro caso, con lo complicado que es cuando eres una start up B2B, hemos tenido muy buena aceptación. Grandes empresas nos han escuchado y están interesadas en trabajar con nosotros. Se nota que las empresas quieren cambiar de un proceso lineal a uno más circular y las empresas están en búsqueda activa de partners que les ayudan en este proceso. Pensamos que la circularidad comienza en la fase de diseño; producir menos forma parte de la solución, pero hay otros grandes cambios necesarios para abordar el impacto medioambiental de la industria. Al final hay que implementar nuevos procesos para diseñar de forma diferente y justo es lo que estamos viendo en el sector. Hay compañías que han creado departamentos nuevos con personas que se encargan puramente de circularidad en todos los puntos de la cadena, desde gestión de retales, ecodiseño para aprovechar materiales, gestión de excedentes o crear cápsulas de producto circulares. Esto lo hemos visto dentro y fuera de España.

P.: ¿Qué consejo le daría a un emprendedor que comienza ahora en el sector de la moda?

R.: En primer lugar, que defina muy bien el foco hacia donde quiere ir y el propósito. A nosotros nos gusta mucho la frase if you believe in eventuallity, eventually it will happen, lo que se traduce en que, si quieres que pase algo, aunque no tengas claro cuándo, pero vas a por ello, al final acaba pasando. Hay que tener muy clara la dirección a la que se quiere llegar. Además, que busque aquello que aporte valor y lo explote; que no se quede en lo superficial o en lo que hacen los demás. No se trata de ser uno más sino de ser diferente. Se trata de mejorar lo que ya hay para ser diferencial. Lo diferencial no es la sostenibilidad, si no lo que puedes hacer para aportar valor con lo que ya hay, y para ello también es importante escuchar al consumidor para encajar en su búsqueda.

P: ¿Volvería a emprender en este sector?

R.: Sí. Es un sector con una parte creativa y estratégica muy fuerte, aunque también hay una parte emocional y de expresión. Todavía hay mucho espacio para aportar valor y para crear muchas cosas.