J. Caro (Tendam): “La IA ayuda a predecir, pero necesitamos comunicación con todas las áreas”
El director de logística del grupo propietario de Springfield, Women’secret y Cortefiel destaca la importancia de que el área sea “flexible y anticipe posibles disrupciones”. ¿Cómo? Anticipando situaciones de forma continua.


Aunque las inversiones que requiere y los proyectos que levanta sean enormes, la logística es el eslabón más invisible de la cadena de valor de la moda. Si todo funciona bien, nadie recae en él. Pero cuando hay problemas, se convierte en el foco de todas las miradas. Tras años de disrupciones en todo el mundo que han derivado en interrupciones del transporte y problemas de aprovisionamiento, la logística y las operaciones se han convertido en protagonistas. ¿Dónde instalar un centro logístico y hasta cuánto robotizarlo? ¿Dónde producir y cómo mover la mercancía? O, ¿cómo la Inteligencia Artificial ayudará a que la operativa sea más ágil y eficiente? La serie Logística, el Señor Lobo de la moda, impulsada por el operador logístico Logisfashion, trata de responder a estas y otras preguntas a través de la voz de expertos y directivos del sector.
Logística, el Señor Lobo de la moda
Toda la serie
Jaime Caro está al frente de la logística de Tendam. El ejecutivo señala que su área debe ser discreta y que si no se habla de ella es porque está funcionando bien. Sin embargo, advierte de la necesidad de planificar teniendo en cuenta la estructura logística que será necesaria. En Tendam, el área logística depende de operaciones, que también incluye sourcing, import-export y planificación. “Con todos los conflictos geopolíticos y desastres naturales que tenemos en algunos países donde estamos produciendo, lo que tienes que tener es cintura”, dice el ejecutivo, que agrega que los aranceles son, al fin y al cabo, un elemento más del contexto.
Pregunta: ¿La logística es óptima cuando no se habla de ella?
Respuesta: La logística no debe generar ruido en el día a día; si no genera ruido significa que funciona bien. Hay que aplicar eso de no news, good news, en este caso. La logística es óptima cuando cumple el nivel de servicio pactado con el cliente y el coste es adecuado. Para eso hay que ser flexibles y anticipar posibles disrupciones. Pero que no se hable de la logística tiene también un riesgo: es un área fundamental dentro del negocio y si todo funciona corres el riesgo de que se olviden de ti y no te tienen en cuenta para los crecimientos, para los planes estratégicos. Hay que hablar cuando hay que hablar pero, efectivamente, hay que hacer el menor ruido posible para que las cosas discurran normal.
“Que no se hable de la logística tiene también un riesgo: es un área fundamental dentro del negocio y si todo funciona corres el riesgo de que se olviden de ti”
P.: ¿Se tiene en cuenta suficientemente a la logística en los planes de negocio?
R.: Dentro de los planes de negocio de las compañías, la cadena de suministro es tan importante como el plan de ventas, el plan de expansión de tiendas o el plan de fidelización, porque tienes que dar soporte. Si quieres crecer, la logística tiene que estar preparada.
P.: Pero los tiempos de la expansión son unos y la logística debe empezar a prepararse antes, ¿no?
R.: Todo depende un poco de lo que quieras organizar, en función del nivel de servicio que quieras darle al cliente, los costes que quieres tener en tu cuenta de explotación y el producto que vas a vender. A partir de ahí, hay distintos modelos: más automatizado, menos automatizado, hacerlo con un operador logístico, coger algo que ya esté construido, hacer una nave desde cero... En nuestra experiencia con la planta de Illescas, que nos la hicieron a medida, desde que ideamos el plan, con los números de crecimiento de online que teníamos, hasta que esto ha arrancado, hemos tardado entre dos y tres años. Hay soluciones mucho más rápidas, claro, y en ocho o doce meses puedes tener el centro operativo. El riesgo es que, muchas veces, se toman decisiones de crecimiento y se dice: “ahora que venga el de logística y nos acompañe”. Y a veces no podemos, porque necesitamos tiempo.
P.: Tendam acaba de firmar una operación corporativa tras la cual se intuye que vendrá una etapa de crecimiento. Debe estar empezando a temblar…
R.: ¡De emoción! Vienen muy buenas noticias. Lo malo es cuando en logística no tenemos nada que hacer, porque no hay crecimiento ni hay nada. El centro para online lo tenemos preparado para el crecimiento, aunque tenemos contemplada una segunda fase. Ahora estamos revisando el resto de las operaciones, la capacidad de crecimiento que tenemos en el resto de almacenes en función del crecimiento por canales y por geografías que tenemos previsto.
“En todos nuestros centros trabajamos con un operador especializado. La subcontratación te da flexibilidad para mejorar las operaciones”
P.: ¿Cómo es hoy la estructura logística de Tendam?
R.: En España tenemos dos centros logísticos: uno en Illescas (Toledo), para la operación online, y uno en Aranjuez que da soporte a las tiendas propias y las franquicias. Tenemos también dos centros en México y uno en Hong Kong. En todos nuestros centros trabajamos con un operador especializado. La subcontratación te da flexibilidad para mejorar las operaciones.
P.: Si tiene que escoger entre optimizar o flexibilizar, ¿con qué se queda?
R.: Con las dos cosas, porque normalmente cuanto más flexible eres mejor nivel de servicio das, pero también es más caro. Hay que buscar un ten con ten y nosotros somos bastante obsesivos con el coste y con el nivel de servicio. Con todos los conflictos geopolíticos y desastres naturales que tenemos en algunos países donde estamos produciendo, lo que tienes que tener es cintura. Entonces, quizás nos olvidamos un pelín del coste, no demasiado, tratando de ser flexibles. Y eso lo hemos aprendido con el Covid, lo aprendimos con Filomena, lo hemos aprendido cuando se nos atasca un barco ahí en el canal, cuando Ucrania y Rusia entran en conflicto o cuando los hutíes se dedican a atacar barcos.
P.: ¿Cómo se prepara para otro shock?
R.: Revisamos continuamente planes de contingencia. Revisamos nuestros sistemas de información, vemos lo vulnerables que son, buscamos posibilidades de servicio desde otros sitios. Por ejemplo, en el canal online, hay un nivel muy importante de pedidos que ya no preparamos en el almacén, sino que se preparan desde las tiendas. Si mañana colapsáramos el almacén, las tiendas podrían seguir sirviendo pedidos online y eso antes del Covid era impensable.
P.: El centro de Illescas está robotizado. ¿Cuál es el nivel óptimo de robotización de un centro?
R.: Somos de la teoría de que en logística tienes que buscar soluciones a problemas reales que tienes. En Inteligencia Artificial (IA), robotización o automatismos, no todo vale para todos, tienes que buscar la manera de resolver tu problema: si con un automatismo funciona, adelante, sino, sigue de manera manual. Cuando automatizas ganas en productividad, ganas en calidad, evitas riesgos, pero también pierdes flexibilidad y eso es importante. Además, para automatizar necesitas tener unos procesos muy definidos y saber lo que va a pasar. En IA, que hay mucha en el mercado, estamos trabajando en planificación de demanda y estamos probando con gemelo digitales para saber cómo va a reaccionar nuestra red logística.
“Hay que aprender a jugar con este contexto, ser flexible y tratar de incorporarlo dentro de la rutina de trabajo, hacer los números y ver si cuadran las cosas”
P.: ¿Cómo mejorará la logística la IA?
R.: Nos va a ayudar mucho a uno de los graves problemas que tenemos los logísticos y es que no sabemos lo que nos van a pedir y cuando no tienes fiabilidad te tienes que sobredimensionar si no quieres fallar en el servicio. Pero incluso a esa planificación hay que meterle cosas que no son de IA, como las promociones que decides en el último momento. La IA nos va a ayudar mucho a predecir, pero necesitamos comunicación con todas las áreas.
P.: ¿Hay que dejar de depender de Asia y acercar más las producciones?
R.: En realidad, estamos todo el día tratando de buscar nuevas alternativas y que los orígenes sean lo más eficientes posibles en cuanto a tiempos, calidades y costes. A nosotros con los proveedores asiáticos siempre nos ha ido bien, si bien es cierto que ahora buscamos acercar las producciones en la medida que podemos, cumpliendo con la calidad, el servicio y los costes.
P.: Tendam no tiene exposición a Estados Unidos, pero ¿le asustan los aranceles?
R.: Como dice, en Tendam no tenemos presencia en Estados Unidos. Los aranceles hoy son un elemento más a tener en cuenta. Igual que hay guerras, igual que hay temas de coste energético, igual que hay problemas de encontrar recursos para trabajar o que hay legislaciones locales e internacionales, hay un tema más, que son los aranceles. Hay que aprender a jugar con este contexto, ser flexible y tratar de incorporarlo dentro de la rutina de trabajo, hacer los números y ver si cuadran las cosas.