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Kering y Google se alían para desarrollar gafas de lujo con inteligencia artificial

El grupo francés redobla su apuesta por el segmento óptico a través de un acuerdo estratégico con Google para la concepción y comercialización de gafas inteligentes que combinen diseño de alta gama y tecnología inmersiva.

Kering y Google se alían para desarrollar gafas de lujo con inteligencia artificial
Kering y Google se alían para desarrollar gafas de lujo con inteligencia artificial
Kering sigue lo pasos de Ray-Ban con Meta.

Modaes

Kering da el salto a los accesorios tecnológicos y sobrepasa una nueva frontera del lujo. El gigante francés ha sellado una alianza estratégica con Google para el desarrollo de gafas inteligentes, un paso hasta ahora inédito en la diversificación tecnológica del grupo. La iniciativa, liderada desde la división de óptica Kering Eyewear, busca combinar diseño vanguardista, funcionalidad y el sistema operativo Android XR, la nueva plataforma de realidad extendida de Google.

 

El proyecto no tiene aún fecha de lanzamiento, pero sí la ambición afirmada de crear un dispositivo wearable que los consumidores deseen llevar, no sólo por su utilidad, sino también por su valor estético. “Queremos diseñar unas gafas que la gente quiera ponerse: piezas magistrales, elegantes y de gran calidad que reinventen la relación entre los mundos físico y virtual”, ha señalado Roberto Vedovotto, presidente y consejero delegado de Kering Eyewear.

 

Las futuras gafas conectadas se desarrollarán con Android XR, una plataforma de Google para integrar experiencias inmersivas en dispositivos ópticos y de realidad mixta. El sistema permitirá ofrecer funcionalidades personalizadas a través de inteligencia artificial, con una interfaz centrada en el usuario y pensada para explorar el entorno de forma enriquecida.

 

Desde Google, el vicepresidente de la división XR, Shahram Izadi, ha subrayado la relevancia del acuerdo con el gigante francés: “La integración de nuestra plataforma inmersiva en modelos icónicos de Kering Eyewear unirá estética y funcionalidad en un solo producto, y mostrará todo el potencial de Android XR en un accesorio de lujo”.

 

 

 

 

El movimiento posiciona a Kering como uno de los primeros grupos de lujo en abordar con firmeza la convergencia entre moda y tecnología inmersiva, un campo en el que gigantes como Apple o Meta llevan años investigando. En el sector óptico, sin embargo, la incorporación de interfaces digitales ha sido hasta ahora marginal o funcional (lectura de datos, notificaciones), pero no necesariamente deseable como objeto de moda.

 

En paralelo, Google ha anunciado una alianza con otro especialista internacional del sector de la óptica: Gentle Monster, la firma surcoreana de gafas conocida por su estética sofisticada y experimental. Fundada en Seúl en 2011 por Hankook Kim, la marca pertenece al grupo Iicombined y se ha posicionado como un actor singular en la intersección entre diseño, arte y tecnología.

 

Con puntos de venta en capitales como París, Nueva York, Shanghái o Los Ángeles, la compañía ha cultivado un universo visual inmersivo que trasciende el producto. Sus precios se sitúan en la gama alta del segmento (entre 250 y 400 euros), con un posicionamiento aspiracional que le ha permitido colaborar con marcas de diversos ámbitos como Huawei, D’heygere o Maison Margiela. El acuerdo con Google refuerza su evolución como plataforma de innovación estética en el entorno del wearable tech.

 

Aunque el uso de gafas conectadas no ha despegado entre el gran público, grandes tecnológicas y marcas de moda continúan explorando sus posibilidades. Meta, en colaboración con Ray-Ban, ha lanzado varios modelos con cámara y altavoz integrados. Apple, por su parte, ha apostado por los visores con realidad aumentada de alta gama.

 

Desde su creación en 2014, Kering Eyewear ha tratado de transformar el enfoque tradicional de las licencias ópticas en el lujo. A diferencia de grupos como EssilorLuxottica, que gestionan licencias de terceros, la división del grupo galo se fundó para diseñar y distribuir gafas de sus propias marcas, integrando diseño, distribución y posicionamiento.

 

La compañía distribuye actualmente gafas de catorce marcas, entre ellas Gucci, Saint Laurent, Bottega Veneta, Balenciaga, Chloé, Cartier o Alexander McQueen. En 2023, la división generó unos ingresos de 1.600 millones de euros, con un crecimiento del 6 % interanual en términos comparables. La categoría se ha convertido en uno de los motores de diversificación del grupo, especialmente en un contexto de desaceleración del mercado del lujo en Asia y Estados Unidos.

 

El grupo continúa navegando un contexto financiero complejo. En el primer trimestre de 2025, la compañía francesa sufrió una caída del 14 % en sus ventas, hasta 3.885 millones de eurosarrastrada por el retroceso de Gucci, que se desplomó un 24 %. La casa italiana, todavía en fase de reposicionamiento tras el nombramiento de Demna como nuevo director creativo, sigue sin recuperar el ritmo en los principales mercados del lujo.