El textil modera su inflación, pero encoge producción y ventas en el primer trimestre

La industria de la moda arranca el año a doble velocidad. Después de una escalada de precios sin precedentes a lo largo de todo 2022, la inflación ha dado una tregua al sector en el primer trimestre moderando la subida. Con los costes más aliviados, el problema se centra ahora en la primera línea de la cuenta de pérdidas y ganancias, que arroja descensos continuados de ventas y producción.

Entre enero y marzo, el Índice de Precios Industriales (Ipri) del textil moderó la subida, registrando una variación media del 1,2%, muy lejos de los incrementos de 2022, que en algunos meses llegó al 11%.

Sin embargo, la facturación sigue sin recuperarse. Según los últimos datos del Índice de Cifras de Negocios en la Industria (ICN), la facturación textil registró un retroceso medio del 2,5% en los dos primeros meses del año.

La producción también ha evolucionado de forma similar en el sector. El Índice de Producción Industrial revela un retroceso del 4,2% entre enero y febrero, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

La confección y el cuero y el calzado, sin embargo, han registrado una evolución diferente. En el primer caso, la variación media de los precios en el primer trimestre se situó un 2,1%, por encima de los datos anteriores. Este incremento continuado de precios ha permitido un fuerte empuje de la facturación, del 14,8%, a pesar del descenso de la producción del 4,9%.

Por su parte, la industria del cuero y el calzado evolucionó a contracorriente. El Ipri del sector registró la subida más moderada en el primer trimestre, con un alza del 0,7%, mientras que entre enero y febrero, la producción y la facturación se incrementaron un 2,2% y un 9,3%, respectivamente.

Caso paradigmático es el del empleo, que ha reflejado una evolución opuesta a las ventas. En el caso del empleo, la evolución también ha sido desigual. En los tres primeros meses del año, la plantilla de la industria textil ha registrado un incremento del 2,5%, mientras que en la confección y el cuero y el calzado ha retrocedido, con caídas del 3% y del 3,6%, respectivamente.

Un 2022 negro

Aunque los indicadores no son todos positivos, el arranque del primer trimestre arroja unos datos más esperanzadores que los del cierre de 2022, un año marcado en el calendario del sector debido al incremento disparado de precios.

El año pasado, los precios del textil registraron una subida histórica del 11%. Por su parte, la producción del sector cerró el año con un incremento medio del apenas el 0,9%, mientras que la producción aumentó un 9,1% de media, por debajo de los datos del resto del año.

En el caso de la confección, el sector acabó el año con una subida media de la producción del 6,3% y un alza del 17,6% de la facturación, mientras que los precios se incrementaron un 3,8%. En el calzado, por su parte, la inflación se situó en el 3,6% en el cierre de año, mientras que la producción y la facturación registraron una subida media del 12,7% y del 21,9%, respectivamente.