Puma refinancia su deuda con un préstamo puente de 500 euros con Banco Santander
El grupo alemán de moda deportiva encadena varios trimestres con ventas a la baja. En el acumulado de los nueve primeros meses del año, las ventas cayeron un 8,5% y evidenciaron la necesidad de la compañía de obtener liquidez.
Puma recibe una inyección financiera. El grupo alemán de moda deportiva ha anunciado la refinanciación de su deuda a través de un préstamo puente de 500 millones de euros con el Banco Santander, así como líneas adicionales de crédito confirmadas por 108 millones de euros.
Puma adquiere de esta forma 600 millones de euros para refinanciar la línea de crédito revolving que mantiene por 1.200 millones de euros, “aumentando la flexibilidad financiera y el margen de maniobra disponible”, según ha asegurado Puma en un comunicado este viernes. Tanto el préstamo puente como las líneas de crédito adicionales confirmadas tienen un vencimiento de hasta dos años.
El crédito permitirá a la compañía “ejecutar sus prioridades estratégicas” y “avanzar en la ambición de consolidar Puma como una de las tres principales marcas deportivas a nivel mundial”, explica el director financiero del grupo alemán, Markus Neubrand.
Puma adquiere un cantidad total de 600 millones de euros que vence en dos años
Puma cerró los primeros nueve meses del ejercicio con una caída de las ventas del 8,5%, y sumó pérdidas de más de 300 millones de euros. La compañía confirmó de esta manera la tendencia a la baja iniciada en el primer semestre del año. Este mal comportamiento ha tomado forma con el anuncio de los primeros recortes de plantilla.
Más concretamente, la empresa alemana anotó en el acumulado de los nueve meses del ejercicio actual unas ventas de 5.973,9 millones de euros, frente a los 6.527,8 millones de euros que vendió en el mismo periodo del año anterior. El resultado bruto, por su parte, se situó en 2.754,6 millones de euros, con un margen bruto del 46,1%, 1,3 puntos porcentuales menos que el año anterior.
En este sentido, Puma se ha posicionado en los últimos meses en el ojo del huracán de la industria internacional del deporte. El grupo chino Anta estaría estudiando su eventual adquisición, mientras que, a mediados de año, el mercado especuló con la adquisición de Puma por parte de Adidas.