Del ‘shooting’ físico al contenido en minutos: la nueva era visual de la moda
La producción visual generada con inteligencia artificial gana terreno en la moda al permitir a las marcas crear campañas con máxima creatividad, realismo y con bajos costes económicos relacionados.
En el negocio de la moda, la producción de contenidos se ha erigido como uno de los mayores desafíos operativos de las marcas para captar la atención del consumidor en un mercado hípercompetitivo. Cada colección exige multiplicar formatos, desde piezas para ecommerce hasta vídeos editoriales, y adaptarlos a territorios y medios de difusión sin perder coherencia estética. Los equipos, además, deben hacerlo en tiempo récord para responder a las necesidades de los canales digitales.
El modelo tradicional de producción, basado en shootings físicos que requieren semanas de preparación, equipos grandes y cualificados y cuya operativa puede verse afectada por una gran variedad de factores, empieza a sufrir para seguir la velocidad de un mercado con una imperante necesidad de velocidad, reducción de costes y cumplimiento con estándares de sostenibilidad.
La producción visual generada con inteligencia artificial ya se perfila como el gran avance que revoluciona la capacidad de dar respuesta a este complejo contexto. Lejos de ser un sustituto del trabajo creativo, la IA se está consolidando como una herramienta de apoyo que libera a los equipos de procesos tediosos y amplía las posibilidades narrativas de una campaña. También permite generar contenidos al ritmo del mercado con la gran demanda de los medios digitales, formatos, requerimientos infinitos y tiempos ajustados.
No obstante, y según datos recogidos en el Barómetro de Empresas de Moda en España 2025, elaborado por Modaes, sólo un 36% de las compañías consultadas consideran tener un avanzado nivel de desarrollo en la integración de la inteligencia artificial en la empresa. A nivel de diseño de prendas y campañas, la tasa es aún menor: sólo un 20% de las empresas la ha integrado, según datos del informe Global Fashion Drivers 2025.
Aunque parece que este es un mercado donde la aplicación de la inteligencia artificial avanza más lento que en otros, lo cierto es que ya se pueden observar campañas de multitud de grandes marcas elaboradas con esta tecnología. Una gran parte de los operadores, además, ya dispone de departamentos de creativos especializados en la aplicación de la misma.
Esta transformación está impulsada por compañías como Neural Fashion, un operador que combina tecnología propia con un equipo creativo especialista en moda y que ya ha captado a socios de gran relevancia para el sector como Pronovias, Carmen Says, Sepiia o Desigual. Mediante su expertise y su equipo especializado, la compañía ofrece una plataforma única y exclusiva que garantiza los mejores resultados. De este modo, Neural Fashion se ha posicionado como la mejor opción para la implantación de esta tecnología.
La misión de esta nueva manera de producir contenidos es pasar de la prenda a la campaña de forma muy ágil y rápida, con una flexibilidad impensable hasta el momento y con una reducción de costes que, según Neural Fashion, puede alcanzar el 50% al eliminar viajes, sets, re-shoots y buena parte de la logística asociada.
La gran demanda de contenidos en la era digital
Tanto para pequeñas marcas de ámbito local como para auténticos gigantes de la industria global de la moda, existe una necesidad de producción audiovisual constante que supone costes, desajustes operativos y una imposibilidad de satisfacer la demanda. La agilidad es hoy clave y la aplicación de tecnologías como la que ofrece Neural Fashion, adaptadas a todo tipo de escalas y presupuestos, se erige como una alternativa real.
Organizar un shooting requiere coordinar modelos, fotógrafos, estilistas, equipos técnicos, localizaciones y transporte. Su desarrollo, por ende, depende de las condiciones climáticas, de agendas difíciles de alinear y de todo tipo de disrupciones que pueden alterar costes y tiempos.
Además, si la marca necesita compartir diversas versiones de una misma historia (por países, segmentos o canales) debe multiplicar esas sesiones o reutilizar piezas con el riesgo de perder coherencia y frescura en el mensaje.
La inteligencia artificial es hoy un agente capaz de romper estos límites. Proyectos innovadores como el de Neural Fashion permiten generar imágenes con una estética profesional sin necesidad de reunir a un equipo físico, gracias a su equipo especializado y a su plataforma. La producción se traslada a un entorno digital donde iteraciones como cambiar la pose del modelo, probar una nueva localización, adaptar la campaña a otro mercado o añadir nuevas piezas a la sesión se hacen en minutos. Roser Bagó Ribaudí, cofundadora de Neural Fashion AI, destaca que “la IA de Neural Fashion hace realidad cualquier idea creativa, superando lo convencional y haciendo posible una comunicación efectiva y memorable”.
Tecnología, creatividad y control
La compañía opera con un modelo híbrido, a caballo entre una plataforma tecnológica y una agencia creativa especializada en IA. Por un lado, su propuesta integra y unifica todas las tecnologías de inteligencia artificial necesarias para generar imágenes donde las marcas pueden crear, editar, almacenar, buscar y compartir los contenidos y ser self-users. Por otro, su equipo creativo especialista en IA y moda acompaña y desarrolla las campañas completas para las marcas respaldados por un equipo técnico que, junto al creativo, garantizan los mejores resultados.
La vertiginosa velocidad a la que avanza la inteligencia artificial generativa, sin embargo, obliga a los operadores a actualizar sus herramientas constantemente. Neural Fashion resuelve esta complejidad operativa integrando las novedades en una única plataforma, de forma que el cliente no tiene que releer manuales, migrar de sistema cada pocos meses o darse de alta cada semana en herramientas diferentes de generación de imágenes.
Las marcas que ya han trabajado con la compañía destacan la integración de la inteligencia artificial como un cambio estructural en sus operaciones, subrayan la capacidad de generar conceptos nupciales con rapidez y precisión y enfatizan en la posibilidad de ampliar narrativas sin aumentar el presupuesto ni el tiempo de producción.
El control creativo, lejos de diluirse, se amplía. Los equipos pueden explorar variaciones visuales esquivando los límites logísticos de los métodos tradicionales y pueden seleccionar diversos modelos, probar escenarios abstractos o crear versiones específicas para diversos mercados y canales sin abandonar la línea estética de la marca.
Realismo, coherencia y adaptación
La coherencia visual entre modelos, prendas y estilos se ha convertido en una de las principales exigencias del sector. Las marcas necesitan garantizar que cada imagen represente fielmente los tejidos, volúmenes y detalles de diseño, evitando distorsiones que comprometan la percepción del producto. Neural Fashion ha puesto el foco precisamente en este punto, desarrollando tecnología propia que prioriza el realismo y la fidelidad de las prendas incluso en escenarios complejos o narrativas muy elaboradas.
La inteligencia artificial de Neural Fashion es capaz de mantener una estética consistente en todas las piezas generadas, independientemente del número de iteraciones o adaptaciones por mercado, formato o canal. La combinación de técnicas seleccionadas específicamente para moda y un control creativo guiado por especialistas permite que cada imagen mantenga continuidad en modelos, encuadres y lenguaje visual, algo especialmente relevante para campañas globales con múltiples despliegues.
Esta capacidad de generar contenidos coherentes y altamente adaptables facilita a las marcas operar con la flexibilidad que exige el contexto actual. Desde variar un look sin rehacer toda la sesión hasta producir versiones dirigidas a distintos mercados, la tecnología de Neural Fashion permite ajustar y escalar la producción sin comprometer realismo ni identidad estética. De esta forma, la compañía se consolida como un socio estratégico capaz de responder a los retos más críticos de la moda contemporánea: precisión, consistencia y velocidad.
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