Coty entra en pérdidas en el tercer trimestre e introduce un plan de choque

Coty introduce un plan de choque para reconducir su negocio. Con la presentación de resultados del tercer trimestre, que el grupo estadounidense de cosmética ha cerrado en pérdidas y con caída de ventas, el grupo ha anunciado la puesta en marcha de una estrategia para continuar renovando su cartera de productos, al tiempo que reducirá costes fijos y reorganizará su equipo en mercados clave como Estados Unidos.

La compañía, que ha reducido también sus previsiones para el ejercicio 2025, ha concluido el tercer trimestre con ventas de 1.299 millones de dólares, lo que supone un retroceso del 6,21% respecto al mismo periodo e 2024. La empresa ha cerrado el periodo con pérdidas de 405,7 millones de dólares, frente al beneficio de 3,8 millones de dólares del tercer trimestre de 2024.

En el acumulado de los nueve primeros meses, las ventas del grupo han retrocedido un 2,39%, hasta 4,640 millones de dólares. Los números rojos a cierre de los tres primeros trimestres han ascendido a 280,9 millones de dólares, frente al beneficio de 205 millones registrado en2024.

Coty ha concluido el tercer trimestre con ventas de 1.299 millones de dólares

La compañía, que considera 2025 un año de “transición”, está centrada en “limpiar” su oferta para “garantizar que los inventarios de los minoristas se ajusten a las tendencias actuales de la demanda”.

Al mismo tiempo, la empresa tiene previsto introducir un plan de ahorro para reducir costes. “Coty está interviniendo activamente en áreas clave del negocio para situar a la empresa en una posición más sólida de cara al ejercicio fiscal 2026 y más allá -ha señalado la compañía-; esto incluye un aumento de los ahorros en costes fijos y en productividad para proteger la cuenta de resultados e impulsar sus marcas, así como cambios concretos en su estructura organizativa y en el liderazgo en mercados clave como Estados Unidos para mejorar la ejecución y las tendencias de ventas”.

A finales de abril, Coty anunció la activación de una nueva etapa en su plan estratégico All-in to Win, con el objetivo de optimizar recursos, acelerar procesos y reforzar márgenes. La compañía tiene previsto recortar alrededor de 700 puestos de trabajo a lo largo de los próximos dos años como parte de una reorganización interna con la que espera ahorrar 500 millones de dólares antes del cierre del ejercicio 2027.