Salomé Beneyto: “Necesitamos un planteamiento industrial para una relocalización efectiva”

Más ayuda y más conversación. Estos son los dos puntos estratégicos que deberían predominar entre las empresas de la industria de la moda y los ayuntamientos según Salomé Beneyto, secretaria general del Consejo Intertextil Español (CIE). Con la relocalización de la industria en cercanía, la directiva pide a las administraciones más apoyo y estrategias a escala nacional: “sería necesario un planteamiento más industrial para conseguir que la relocalización sea efectiva”, sostiene.

Pregunta: Quedan dos días para las elecciones. ¿Las perspectivas son positivas para el textil?

Respuesta: Lo que notamos es una predisposición a hablar con nosotros por parte de las administraciones. En los últimos años les hemos podido trasmitir nuestras preocupaciones y les hemos hecho ver que nuestro sector es estratégico. A escala autonómica estamos en constante comunicación para trasladarles problemáticas del sector, como la subida de los precios. Sí que la predisposición siempre está, pero depende de qué poder de decisión que tengan los gobiernos. 

P.: En la mayoría de los hubs de producción el textil no está en los programas electorales. ¿El sector no ha hecho bien su función de lobby?

R.: No creo que sea este caso. La industria textil está muy localizada y en muchos municipios lo tienen en cuenta y se han sentado con el sector. A escala local se nos pregunta siempre, pero el poder de decisión no está en los ayuntamientos. 

P.: ¿Qué le pediría a los ayuntamientos?

R.: Comunicación directa y posibilidad de llegar a consensos. En Ontinyent, por ejemplo, el textil es la industria más importante y nos tienen muy en cuenta. Depende de qué sector pesa más en cada territorio, pero hemos estado cada vez más visibles después de la pandemia. 

“Van a tener aterrizar los fondos, pero no son suficientes porque no todas las empresas podrán acceder a estos proyectos”

P.: ¿Deberían establecer un plan estratégico para el textil? 

R.: Sí, más a escala nacional. Deberíamos tener una hoja más marcada, porque a escala autonómica estamos más próximos con la administración, pero a escala  nacional y teniendo en cuenta la posible relocalización, se debería tener una estrategia común. 

P.: ¿Cómo se puede impulsar la transformación sostenible desde las alcaldías?

R.: Es una legislación europea que se traslada a escala nacional y luego autonómico, así que los ayuntamientos lo único que pueden hacer es quizá poner en marcha pruebas piloto. Va a ser necesaria la inversión privada de las empresas. 

P.: ¿Hay apoyo suficiente?

R.: En estos momentos no, porque las inversiones que se tienen que hacer son muy importantes. 

P.: ¿Hay suficientes ayudas? ¿Es bastante con el Perte de la circularidad?

R.: Van a tener aterrizar los fondos, pero no son suficientes porque no todas las empresas podrán acceder a estos proyectos. La reconversión es muy importante y será con tecnología que no está madura. 

“Tenemos un problema importante que es la atracción de talento, y ahí necesitamos apoyo”

P.: ¿Deberían también establecer una estrategia para impulsar la relocalización?

R.: Ahí sí que se podría hacer. Después de la pandemia se nos consideró sector estratégico. Sería necesario un planteamiento más industrial para conseguir que la relocalización sea efectiva. Tenemos un problema importante que es la atracción de talento, y ahí necesitamos apoyo. Que los jóvenes vean el textil como un sector de futuro.

P.: ¿Cuál sería la fórmula para la colaboración entre empresas y administración?

R.: Facilitando el acceso, que los trámites sean menos complejos, potenciando más la producción local, poniendo en marcha cursos y convenios de colaboración. Otro problema que nos encontramos es la contratación pública, que debería ayudar al sector. Que no sólo se comprara por precio, sino también la calidad. 

P.: ¿Falta más unión dentro del sector?

R.: La importancia del Observatorio es que por primera vez se sentaron en la misma mesa la industria de cabecera y los retailers, y fue una manera de dejar por escrito que nos necesitamos unos a otros. Ha sido una posibilidad de conocernos y las exigencias que se nos presentan. El objetivo era poder articular posibles proyectos de cara a captar posibles fondos.