Manteco, lana del lujo ‘made in Italy’ para los abrigos de Zara y H&M

De las perchas de Zara cuelgan este invierno abrigos de lana por cien euros; de las de Mango, por 500 euros, y de las de H&M, por 200. Los precios sin duda asustarán a más de uno, pero será una grata sorpresa para aquel que sepa apreciar el nombre de Manteco. Este histórico tejedor italiano, proveedor habitual de marcas premium y de lujo, se ha colado por primera vez en el fast fashion, ávido por dar con la fórmula para engordar sus márgenes y empezar a tomar distancia respecto al low cost.

La familia Mantellassi continúa al frente de este negocio familiar situado en Prato, una de las cunas italianas del textil. A pesar de que en las últimas décadas los confeccionistas chinos han escrito el último capítulo de la historia textil de esta localidad, todavía permanecen en ella compañías de larga trayectoria que sacan pecho del made in Italy.

Manteco echó a andar en 1943 de la mano de Enzo Mantellassi. A finales de la década de los setenta, le relevó en el cargo su hijo Franco, quien dio volumen al negocio y expandió sus operaciones a mercados internacionales. En la actualidad, la empresa está pilotada por los representantes de la tercera generación de la familia fundadora, Marco y Matteo Mantellassi, quienes han logrado duplicar los ingresos del grupo en los últimos cinco años, pasando de 38 millones de euros en 2012 a 72 millones de euros en 2017.

Manteco cerró 2017 con una cifra de negocio de 72 millones de euros, el doble de cinco años atrás

Pese a su fuerte crecimiento, la compañía guarda aún distancia con los gigantes de la industria italiana del textil, liderada por Marzotto, que cerró 2017 con una cifra de negocio de 455 millones de euros. El top five de los mayores tejedores del made in Italy lo completan Limonta, con ingresos en 2017 de 197 millones de euros; Loro Piana, con ventas de 190 millones de euros; Vitale Barberis Canonico, con una facturación de 163 millones, y Albini, con 149 millones, según un ránking de Pambianconews.

Con una capacidad de producción de más siete millones de metros de tejido al año, Manteco está especializada en tejido lanero. La empresa, que cuenta con un archivo histórico con más de 40.000 muestras, exporta sus artículos a treinta países.

La compañía ha asentado el desarrollo de su negocio en esta última etapa sobre los pilares de la innovación y la sostenibilidad. La familia apostó en su día por mantener la fábrica en Prato, sacrificando mayores márgenes por la búsqueda de nuevos acabados, procesos innovadores y diseños propios.

Ahora, tener la fábrica en casa ha facilitado a Manteco ejecutar la última vuelta de tuerca a su negocio y entrar de lleno en la sostenibilidad. La empresa ha diseñado un sistema para rastrear todo su proceso productivo, incluso la producción de la materia prima en las granjas de origen. En los últimos años, la empresa también ha dado sus primeros pasos en la economía circular con la fabricación de tejidos elaborados a partir de materiales reutilizados.