Entorno

Del Covid al Mar Rojo: un 80% de la cadena de suministro europea sacudida en tres años

En tres años, las empresas europeas se han enfrentado a crisis en sus cadenas de suministro, que más de un 50% han calificado como severo. ¿Cómo ha afectado y cuál ha sido la respuesta ante un cambio del aprovisionamiento mundial?

Del Covid al Mar Rojo: un 80% de la cadena de suministro europea sacudida en tres años
Del Covid al Mar Rojo: un 80% de la cadena de suministro europea sacudida en tres años
Los mayores impactos se han dado en países con un gran peso del sector de las manufacturas, como Portugal o Italia.

Celia Oliveras Castillo

Sacudida geopolítica al sourcing europeo. Antes de que Donald Trump llegara por segunda vez al Despacho Oval de la Casa Blanca con la intención de revolucionar el comercio global con un incremento generalizado de aranceles, las cadenas de suministro acumulaban varios shocks a sus espaldas. Los últimos años han estado marcados por crisis como la del Covid, el estallido del conflicto en Ucrania o los ataques de rebeldes en el Mar Rojo, y que mucho antes de que el presidente estadounidense se lanzara a disrumpir el orden mundial, han sacudido las cadenas de valor en todo el mundo.

 

Casi un 80% de las empresas de la Unión Europea sufrieron algún tipo de shock en su cadena de suministro entre 2021 y 2023, según los últimos datos recopilados por Eurostat, de las cuales hasta un 56,7% califica el impacto como severo. Cinco años de cambios que comenzaron con el estallido de la pandemia, que llegó a reducir casi un 10% las exportaciones comunitarias en 2020, la mayor caída en veinte años.

 

El organismo destaca que los mayores impactos se han dado en países con un gran peso del sector de las manufacturas, como Portugal o Italia, donde hasta un 90,5% y 81,2% de las empresas vieron sus cadenas de suministro afectadas, respectivamente. De manera similar, sin embargo, también ha sido especialmente alto el impacto en las compañías de países como Austria o Países Bajos, muy dependientes de la energía y donde la cifra se eleva a un 88,3% y 84,5%.

 

 

 

 

Entre las principales causas de estas disrupciones, el estallido del Covid se alza todavía como el gran disruptor del momento, con una media de un 56,88% de empresas europeas afectadas por los cortes en los canales de suministro y cierres de fronteras que derivaron de la crisis sanitaria. El impacto de la pandemia fue especialmente elevado entre las empresas austriacas (69,9%), lusas (64,3%) o neerlandesas (60,2%).

 

Las otras dos grandes causas que han afectado al mapa empresarial europeo son las políticas medioambientales de la Unión Europea y las sanciones a Rusia tras su invasión a Ucrania. “Diseñadas para alinear el comercio y producción europeo con los objetivos medioambientales del grupo comunitario, estas políticas han dado una nueva forma a las estrategias y relaciones de suministro”, explica Eurostat, que cifra en un 38,3% las empresas europeas afectadas. Según los datos del estudio, el mayor impacto se dio nuevamente en Portugal, con una media de 49,1%.

 

El menor impacto, de otro 33,13%, corresponde al impacto por las sanciones energéticas a Rusia. La entidad destaca, sin embargo, que estas medidas entraron por primera vez en vigor en marzo de 2022, es decir, apenas durante la mitad del periodo analizado por Eurostat.

 

 

 

 

Consecuencias y soluciones a una crisis constante

Las consecuencias derivadas de las disrupciones de la cadena de suministro varían desde los incrementos del precio de la energía y de materiales vírgenes a problemas con la movilidad de mercancía, en tiempo, capacidad o costes.

 

Según los datos del informe, la volatilidad del precio de la energía, así como el incremento de costes derivado, afectó a una media de 62,8% de empresas europeas, mientras que los cuellos de botella en el transporte y la falta de materiales vírgenes afectó a otro 52,4% y 51,7% de compañías, respectivamente.

 

La escasez de suministro afectó especialmente a las empresas de Austria, con una afectación media del 65,7%, seguidas de Portugal (63,4%) e Italia (55,9%). En el sentido contrario, países como Irlanda, con una economía más orientada a la exportación de servicios, registraron la menor afectación, de un 25%.

 

“La variación entre las economías con un mayor peso de la manufactura y aquellas especializadas en los servicios demuestra como la composición sectorial y dependencia energética marca la vulnerabilidad de las empresas”, añade el texto.

 

 

 

 

Para hacer frente a las disrupciones, la estrategia de las empresas comunitarias se ha basado en una palanca principal: la digitalización. Según los datos de Eurostat, un 34,1% de empresas incrementó el uso de tecnologías en alguno de los procesos de la cadena de valor entre 2021 y 2023.

 

La mayoría del esfuerzo, sin embargo, se ha centrado en las primeras etapas del suministro, y hasta un 33,9% de las compañías ha incrementado su producción de cercanía o nearshoring durante el periodo. En paralelo, otro 33,8% afirma haber priorizado proveedores más confiables, frente a apenas un 20,9% que ha aumentado su red.

 

En todos los países de la Unión Europea, además, el ratio de producción en cercanía superó al  de lejanía, lo que demuestra, asegura la entidad, una tendencia hacia la regionalización de las cadenas de suministro. “La adopción de múltiples estrategias pone de relevancia que ninguna de ellas es suficiente por si misma, y que es la unión entre herramientas digitales, aprovisionamiento regional y una red confiable de proveedores la mejor defensa contra futuros impactos en la cadena”, finaliza Eurostat.