Amazon frente a la justicia europea: el gigante deberá cumplir las reglas digitales de la UE

Amazon no podrá eximir sus obligaciones en la región europea. El Tribunal General de la Unión Europea ha rechazado el recurso del gigante tecnológico dirigido por Jeff Bezos en contra de la decisión de Bruselas de designarle, en 2023, como “plataforma digital de gran tamaño”, por vulnerar la libertad de empresa, el derecho de propiedad y la libertad de expresión. La compañía ha avanzado su intención de recurrir el fallo en un comunicado.

El reglamento de la Unión Europea obliga a las grandes plataformas digitales a retirar contenidos ilegales, almacenar anuncios y dar acceso a los datos a las autoridades. La Ley de Servicios Digitales de la Unión (DSA) europea define que las plataformas con más de 45 millones de usuarios pueden recibir esta clasificación.

El gigante del ecommerce señaló su desacuerdo ante la implantación de estas reglas a su negocio. Según la empresa, la plataforma es un marketplace, no un espacio de contenidos ni una red social con gran riesgo sistemático.

Amazon recurrirá la decisión de designarle como “plataforma digital de gran tamaño”

En su sentencia, ante la que cabe recurso, el Alto Tribunal europeo concede que las obligaciones de la DSA constituyen una “injerencia” en la libertad de empresa protegida por la Carta europea de Derechos Fundamentales, pero avisa de que está “justificada” conforme a lo dispuesto en la legislación europea.

El tribunal defiende que las obligaciones que se imponen a estas plataformas, como las relativas a la opción de recomendación sin elaboración de perfiles, al repositorio público de anuncios publicitarios o al acceso de los investigadores a determinados datos, “pretenden prevenir estos riesgos, aunque supongan cargas económicas notables” para las compañías afectadas.

En un comunicado publicado por la compañía, ha avanzado su intención de recurrir el fallo porque insiste en que Amazon Store no debe ser designada como una “plataforma de muy gran tamaño” (VLPO, por sus siglas en inglés) y recuerda que ha rebatido tal clasificación desde antes incluso de que entrara en vigor la Ley de Servicios Digitales.