Aeffe, propietario de Moschino, entra en preconcurso para aplacar sus números rojos
El grupo italiano, que cerró con números rojos y una caída de las ventas del 27% la primera mitad del año, achaca a la crisis del lujo su situación financiera. Quedan afectadas Aeffe y Pollini, no Alberta Ferretti ni Moschino.
Aeffe entra en los juzgados. El grupo italiano de moda, propietario de Moschino, Alberta Ferreti, Philosophy y Pollini, ha presentado el equivalente a un preconcurso, una composizione negoziata della crisi, a petición del consejo de administración como consecuencia de la crisis que atraviesa la compañía.
Según ha informado Aeffe en un comunicado, el preconcurso solamente afecta a Aeffe y Pollini, mientras que Alberta Ferreti y Moschino quedan fuera. El proceso incluye la petición de nombramiento de un experto independiente y la aplicación de medidas protectoras para blindar la situación financiera de la compañía, que reportó números rojos y una caída del 27% en sus ventas en la primera mitad del año.
La petición y la activación de medidas protectoras “ha sido cuidadosamente evaluada como la solución más adecuada para garantizar la estabilidad durante el periodo necesario para implementar acciones encaminadas a superar las tensiones financieras”, recoge el comunicado, que achaca la situación a la “profunda crisis que implica a todo el sector de la moda y el lujo”.
El consejo de administración de Aeffe expone una “profunda crisis de la moda y el lujo”
El objetivo de la compañía es “preservar el patrimonio” y “salvaguardar la continuidad del negocio”, así como “proteger los intereses de los inversores”. Kpmg ha sido designada como asesora financiera, mientras el despacho Orsingher Ortu Avvocati Associati será el asesor legal de Aeffe y Pollini.
En este contexto, en agosto, el grupo italiano anunció la dimisión de Roberto Lugano como director, sustituido por Marco Gobbetti, director ejecutivo de Moschino a principios de su trayectoria laboral. Gobbetti fue también consejero delegado de Givenchy y Celine del grupo LVMH, y ocupó después el cargo de director ejecutivo de Burberry. Su último puesto fue el de director ejecutivo y director general en Ferragamo.
Aeffe cerró el primer semestre con unas ventas de 102,8 millones de euros, un 27,55% menos que en el mismo periodo de 2024, con unos ingresos de 141,89 millones de euros. Su resultado bruto de explotación (ebitda) también se resintió en el primer semestre, registrando una cifra negativa de 11,24 millones de euros, lejos de los resultados positivos de 419.000 euros de los seis primeros meses de 2024. En la presentación de resultados, la compañía también apuntó hacia la crisis del lujo como la culpable de sus números.