Cosmética

2015, el año de la ofensiva de la cosmética en retail

Franc Marín-Camp

28 dic 2015 - 12:30

 

Los grupos internacionales de cosmética han empezado a maquillar las principales arterias comerciales españolas. A lo largo de 2015, compañías como L’Oréal o Revlon han impulsado su negocio en el país a base de subir la persiana de tiendas monomarca, propias o franquiciadas, en un intento de plantar cara a la expansión de la marca blanca, que irrumpió en el negocio de la distribución en años anteriores.

 

El gigante francés L’Oréal es uno de los protagonistas de esta ofensiva. La compañía ha elegido Madrid como uno de sus principales epicentros en Europa para la apertura de tiendas de varias de sus enseñas. Algunas de ellas, presentes por primera vez en el continente. El grupo ya había mostrado su interés en el retail cuando, en 2014, puso en marcha la primera tienda de su cadena L’Oréal Paris en el mercado español. Aquel establecimiento, que fue el tercero a nivel europeo tras los inaugurados en Oslo y Estocolmo, ha sido completado en 2015 con nuevas tiendas en Madrid y Barcelona. La primera tienda de L’Oréal Paris se instaló en la madrileña calle Fuencarral, una vía comercial convertida en el campo base de la empresa a la hora de traer algunas de sus marcas a España. Las demás tiendas de L’Oréal Paris en el mercado español subieron la persiana en 2015, en el número 9 de la calle Peñálver, en Madrid, y en el centro comercial La Maquinista, en Barcelona.

 

Este año, L’Oréal ha introducido también otras marcas en el país mediante la apertura de tiendas. En la misma calle Fuencarral, la compañía puso en marcha el pasado octubre un pop-up store de YSL Beauté. Tras cerrar las puertas, el local fue ocupado por la estadounidense Urban Decay, también propiedad de L’Oréal, siendo este el primer establecimiento de la cadena en Europa. Pocas semanas antes, el gigante galo había abierto las puertas de otra tienda, esta vez de la marca NYX que, de nuevo, conquistaba por primera vez una calle europea.

 

Todos estos puntos de venta de L’Oréal se completan con los que ya tenían sus cadenas Kiehl’s y The Body Shop. Esta última compañía ha puesto en marcha ocho nuevas tiendas en 2015, al tiempo que ha renovado parte de su red de establecimientos con su nuevo concepto. La empresa ha basado parte de su expansión reciente en el travel retail, con tiendas en estaciones de tren como las de Alicante y Abando, en Bilbao. Pero L’Oréal no es el único grupo extranjero que ha querido plantar la bandera en España con sus tiendas. En el segundo semestre de 2015, la estadounidense Revlon instaló sus primeros puntos de venta propios en el país. Uno de ellos, en formato kiosko, se encuentra en el centro comercial barcelonés Diagonal Mar, mientras que el segundo fue instalado en el centro comercial Xanadú, en Madrid.

 

 

El retail y la cosmética se han aliado también de la mano de pequeños grupos de distribución. En 2015, las perfumerías regionales Primor, Marvimundo y Arenal se han unido para crear el grupo Maremor. La nueva cadena de distribución actúa en todo el país, aunque cada una de las tres empresas sigue operando con su nombre. En los planes del grupo de cara a 2016 está el lanzamiento de una cuarta red de tiendas con el nombre de Maremor. Antes, las enseñas que integran el conglomerado español han elegido 2015 para instalarse en sus primeras localizaciones prime. En 2015, Primor puso en el número 22 de la calle Goya de Madrid su primera tienda a pie de calle en la capital española. En Barcelona, la cadena se ha instalado en una macrotienda en el 10 de la calle Pelayo. Este establecimiento ha sido elegido por el grupo para introducir algunas novedades, como un espacio de belleza explotado por una empresa externa, e incluso una sección donde se distribuyen snacks y bebidas alcohólicas a imagen de los duty free de aeropuertos.

 

El sector ha conectado con el retail en 2015 también a través del lujo. La firma estadounidense Trésor Rare ha inaugurado sus primeros establecimientos en Madrid y Puerto Banús. Precisamente, la perfumería de nicho ha sido el negocio elegido por el gigante catalán Puig para desarrollar el canal de las tiendas propias. El grupo ha empezado a exprimir en 2015 la compra de Penhaligon’s, con la primera tienda estadounidense en el Rockefeller Center de Nueva York y proyecta ahora un segundo establecimiento en el futuro Westfield World Trade Centre de Manhattan.

Propiedad de LVMH, Sephora ha seguido desarrollando su red de tiendas con la introducción de la parafarmacia en La Rambla de Barcelona. El grupo italiano Percassi, por su parte, ha intensificado su presencia en España con una veintena de aperturas de Kiko Milano, mientras Estée Lauder impulsaba su cadena Mac en las principales ciudades del país. Por último, y siguiendo la tónica de años anteriores, la perfumería de equivalencias ha seguido imparable. La catalana Equivalenza, ha superado de largo los 700 puntos de venta en todo el mundo.