Plan de Acción de Economía Circular: ¿cómo bajará España los dictados sostenibles de la UE?

Producción, consumo, residuos, materias primas y agua. Estos son los cinco ejes de actuación que el Gobierno de España, a través del segundo Plan de Acción de Economía Circular, ha establecido para avanzar hacia una economía más sostenible y en línea con las nuevas directrices de la Unión Europea. Calificada como un sector clave para el cambio hacia una economía circular, la moda aparece hasta en treinta ocasiones mencionada en el texto.

“La industria textil y la industria del plástico, ambas con un elevado nivel de madurez e implantación en la economía española, se han identificado como sectores clave del mercado y, por lo tanto, sectores sobre los que resulta de mayor relevancia abordar la transición hacia una economía circular”, reza el documento publicado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Para abordar ambos sectores, de hecho, el Ejecutivo ha puesto en marcha diferentes convocatorias de ayudas específicas a ambos, entre ellas, el Perte de Economía Circular.

El sector textil, junto con el plástico y los bienes de equipo para las energías renovables, cuentan con una línea de ayudas concreta, con una dotación económica de 300 millones de euros. La convocatoria otorga subvenciones para las empresas del sector privado, en su mayoría pymes, que presenten proyectos para mejorar sus procesos productivos y prestación de servicios hacia unos que impulsen la sostenibilidad. La Fundación Biodiversidad será la encargada de gestionar las subvenciones concretas relativas al sector textil.

El Gobierno ha publicado el segundo Plan de Acción de Economía Circular para los años 2024 y 2026

La segunda línea de acción, de carácter transversal para el conjunto de la industria, contempla una dotación de 192 millones de euros. Esta, que no va destinada específicamente para la moda, ya ha sido resuelta en su primera convocatoria de 2022, y empresas del sector textil como Coleo también se han visto beneficiadas por las ayudas.

Dentro del eje de producción, el ministerio también ha incluido el objetivo de aumentar el material reciclado que se incluya en los nuevos productos. Para ello, el plan contempla la creación de un grupo de trabajo, compuesto por el Ministerio de Industria y Turismo, el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 y el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que ha participado en la aprobación del Reglamento de ecodiseño de la Unión Europea.

Este grupo será el encargado, además, de trabajar en la revisión y posterior desarrollo nacional de la normativa europea. Todos los productos que, a partir de entonces, cumplan con el reglamento, obtendrán el sello de verificación CE (marca de la UE conforme a que ciertos productos cumplen con todos los requisitos de seguridad y calidad).

Las empresas podrán acceder a una guía práctica para aplicar las normativas sostenibles

Consumo y residuos

“Las decisiones de las personas consumidoras influyen directamente en la posibilidad de avanzar hacia una economía circular”, cita el texto al inicio del apartado dedicado a promover un consumo más responsable, el segundo del plan. Para ello, el ministerio ha actualizado los criterios y el catálogo de productos que pueden conseguir la Etiqueta Ecológica de la Unión Europea, o Ecolabel. Esta marca todos aquellos que, en base a una evaluación ambiental del ciclo de vida de un producto, cumplen con los estándares ambientales exigidos a nivel internacional.

Con el objetivo, además, de evitar alegaciones medioambientales falsas y garantizar una correcta implementación de las normativas europeas, el ministerio desarrollará un análisis jurídico completo sobre la situación legal en España. En paralelo, la cartera medioambiental elaborará una guía práctica de aplicación de estas normativas, dirigida exclusivamente al tejido empresarial español.

Según los datos del ministerio, el consumo medio de productos textiles en la UE, en su mayoría importados, representa el cuarto mayor impacto sobre el medio ambiente, y el tercero en cuanto al uso del agua. En el caso de España, cada ciudadano desecha anualmente alrededor de veinte kilogramos de ropa al año, lo que supone 900.000 toneladas en total.

Cada español desecha, de media, veinte kilogramos de ropa al año

“Estos impactos negativos tienen su origen en un modelo lineal caracterizado por bajos índices de uso, reutilización, reparación y reciclaje de fibra a fibra de tejidos y que a menudo no prioriza la calidad, la durabilidad y la reciclabilidad desde las fases iniciales de diseño y manufactura”, asegura el texto. Para combatir la situación, el ministerio debe elaborar la normativa que regirá los regímenes de responsabilidad ampliada del productor (RAP). En este sentido, sin embargo, la cartera para la transición ecológica ya ha retrasado a 2026 la publicación del Real Decreto que transpondrá la directiva europea.

Marco general y financiación

El plan se enmarca dentro de la Estrategia Española de Economía Circular (Eeec), aprobado en junio de 2020, que establece la obligatoriedad de aprobar planes de acción trienales. Con la finalización del primero de estos planes, que comprendió el periodo entre 2020 y 2023, y con más del 87% de las medidas planteadas ya finalizadas, el Gobierno ha puesto en marcha los primeros paquetes de ayudas para la segunda edición para 2024 y 2026.

El plan cuenta con un presupuesto de 2.169 millones de euros

El segundo plan trienal cuenta con un presupuesto de 2.169 millones de euros, del que un 19,3% (419,6 millones de euros) irá destinado al eje de producción. Este incluye desde parte de la dotación del Perte de economía circular como el grupo de trabajo que transpondrá las normativas europeas en materia de ecodiseño.

El eje de consumo cuenta con un 0,14% del presupuesto, lo que supone una partida presupuestaria de 3,09 millones de euros, mientras que el de gestión de residuos se llevará otro 14,7%, un total de 319,7 millones de euros.

La mayor partida presupuestaria, sin embargo, irá destinada a los proyectos de sensibilización y participación, con un 61,9% del presupuesto total (1.345 millones de euros).