Empresa

Ditex planta cara a la tormenta gracias al césped y el recreo

Luis Aparicio y su hermana, Ana Eva Aparicio, se han convertido en uno de los principales proveedores textiles del sector deportivo de España. Aunque no puede desvelar los gigantes del sector con los que trabaja, la compañía aragonesa Ditex figura entre los proveedores homologados del grupo alemán Adidas.

Pilar Riaño

Ditex planta cara a la tormenta gracias al césped y el recreo

 

 

Discretamente, desde Zaragoza, se han convertido en uno de los principales proveedores textiles del sector deportivo de España. Aunque no puede desvelar los gigantes del sector con los que trabaja, la compañía aragonesa Ditex figura entre los proveedores homologados del grupo alemán Adidas. El Covid-19 ha hecho que producciones que hubieran viajado a Asia se queden en España, y Ditex ha aprovechado el tirón. Entre enero y julio, la empresa ya había alcanzado la facturación de todo 2019 y prevé un crecimiento a doble dígito para el ejercicio 2020.

 

Los inicios de Ditex se remontan a 1981, cuando María Luisa Benito y Luis Aparicio Vaquero, padres de los actuales propietarios y directores de la empresa, pusieron en marcha una compañía de textil hogar para grandes superficies. Él había sido toda la vida representante de productos textiles y ella, de producto para regalo: él tenía contacto con el cliente y ella, conocimiento técnico.

 

Un buen día, tal y como recuerda Luis Aparicio (director general de la empresa y presidente de la Federación de Industrias Textiles y de la Confección de Aragón, Fitca, desde 2015), su madre llegó a casa con un pedido “del copón” de moda deportiva para Alcampo (en aquel momento la empresa trabajaba con el grupo francés y con Pryca). La compañía cambió su foco y dio respuesta a la petición. “La emprendedora fue ella”, dice orgulloso Aparicio.

 

 

El deporte resultó ser un segmento más interesante que el textil hogar y Ditex se constituyó formalmente en 1988. La empresa comenzó trabajando para grupos de gran consumo (Ditex preparaba sus propias colecciones y las ofrecía a sus clientes), aunque también vendía sus prendas a colectivos, como colegios, empresas o entidades deportivas.

 

Crisis y cambio de modelo

“En 1992 llegó la crisis y empezó la deslocalización –relata Aparicio-; trabajando con grandes grupos nos dimos cuenta de que ellos iban a llevarse la producción fuera, pero nosotros nos quedamos en España”. Ditex tomó entonces la “difícil” decisión de cambiar su modelo de negocio: de trabajar con colecciones propias a producir bajo demanda, sin olvidar a los colectivos.

 

La empresa tardó tres años en recuperarse y volver al volumen anterior, pero logró convertirse en proveedor de ropa deportiva escolar de El Corte Inglés. “Este cambio fue muy importante y acertamos: no hemos necesitado una red comercial al uso para crecer, porque cualquiera de mis clientes es mi comercial”, explica Aparicio.

 

En paralelo, Ditex ha desarrollado su marca propia, Nokam, aunque no se ha desarrollado con fuerza porque sólo trabaja para colectivos a los que sus clientes no llegan. Nokam ofrece producto deportivo multideporte y ha sacado partido de la explosión en España de disciplinas como el pádel.

 

Actualmente, las dos principales líneas de negocio de Ditex son la producción para marcas y los artículos escolares, así como algún colectivo como los scouts. A estas dos se suma una tercera surgida del Covid-19: la producción de batas y mascarillas para protección. Ditex cerró el último ejercicio con una cifra de negocio de 1,2 millones de euros y una producción de 120.000 prendas.

 

 

La empresa centraliza su actividad en una nave en el Polígono Industria Malpica, en Zaragoza, donde se encuentran las áreas de corte, diseño, patronaje, sublimación, plancha, preparación, control de calidad y logística, así como las relacionadas con la gestión del negocio. En total, la empresa cuenta con mil metros cuadrados (“aunque se nos empieza a quedar justo”, reconoce Aparicio) y entre once y trece personas en plantilla, que se refuerza en momentos pico, como el pasado verano, para hacer frente a la demanda.

 

A este equipo hay que sumar la confección, que se encuentra externalizada en talleres de Aragón y Lleida. “Este modelo productivo permite esquivar los picos y valles de demanda y los talleres, por su parte, pueden ir adaptando su actividad y dedicarse a otros sectores con temporadas complementarias”, dice Aparicio. Indirectamente, Ditex da empleo a hasta 25 trabajadores.

 

La internacionalización es, tal y como reconoce Aparicio, la tarea pendiente de Ditex, cuyo gran proyecto en marcha es la introducción de trazabilidad en sus procesos y prendas para dar información a sus clientes.

 

 

Ditex planta cara a la tormenta gracias al césped y el recreo

 

 

Crecimiento

Aunque con la boca pequeña y casi cruzando los dedos, Aparicio admite que la emergencia sanitaria del Covid-19 ha impulsado su actividad. “Estuvimos parados, claro, pero quien más quien menos tiene retrasos en su producción y ahora nos toca correr a nosotros y trabajar a doble turno para recuperar –señalaba Aparicio el pasado agosto, con su planta a pleno rendimiento-; nuestros clientes han aumentado pedidos porque una parte que se iba a desplazar fuera se ha quedado por la crisis en el aprovisionamiento, y la producción para el ámbito escolar no se ha cancelado”.

 

Las previsiones de la compañía, controlada al cincuenta por ciento por Aparicio y su hermana (que se hace cargo de las áreas de control, patronaje, diseño y producción), pasan por alcanzar crecimiento a doble dígito en 2020, pero “todo a la espera de la campaña de primavera del año que viene”. “Estamos trabajando a tope por lo que pueda pasar: el corto plazo puede ser una trampa, hay que pensar ya en 2021”, recomienda el empresario.

 

Sobre Ditex

Ditex viste a federaciones, clubes y agrupaciones deportivas en toda España. Desde el equipaje de competición hasta la bolsa de deporte y en disciplinas que van del fútbol, al balonmano, el baloncesto, la gimnasia rítmica, el atletismo, el vóley y vóley playa o el pádel. En caso de que la entidad deportiva disponga de un diseño propio, Ditex lo produce, pero la compañía también hace esa labor y proporciona el diseño a sus clientes. “El negocio para colectividades sufre por el parón de las competiciones, pero tarde o temprano el deporte volverá a todos los niveles”, sostiene Luis Aparicio. “Los clubes profesionales han vuelto primero a la actividad, después ha regresado el amateur –afirma el director general de Ditex-; aunque se retrase, se tendrán que producir igual los uniformes”.