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Kaotiko, de los ‘teens’ de los noventa a la conquista de los Z

El perfil del consumidor de Kaotiko no ha cambiado mucho desde que en 1999 Katia Vilagines y Ángel Palacios pusieran en marcha un pequeño establecimiento multimarca en la barcelonesa calle Cucurulla.

C. Juárez

16 ene 2020 - 04:45

Kaotiko, de los ‘teens’ de los noventa a la conquista de los Z

 

 

Jóvenes, guays, amantes de las marcas, caprichosos y seguidores de las tendencias. El perfil del consumidor de Kaotiko no ha cambiado mucho desde que en 1999 Katia Vilagines y Ángel Palacios pusieran en marcha un pequeño establecimiento multimarca en la barcelonesa calle Cucurulla.

 

La compañía dio sus primeros pasos especializada en la venta de moda urbana y prendas de denim como Levi’s o Bonaventure. Hoy, veinte años después y tras conquistar a los adolescentes de los noventa e inicios del 2000, la empresa ha alcanzado su mayoría de edad. Trece tiendas, 120 empleados, producción en Mataró (Barcelona) y doce millones de euros en ventas son las cifras que dan forma hoy a Kaotiko, con sede en el distrito del 22@, en Barcelona.

 

Desde sus inicios, Kaotiko se ha especializado en moda urbana. Sudaderas oversize, colores estridentes o zapatillas son sus señas de identidad. Esta filosofía fue la que impulsó a Palacios y Vilagines a crear su propia marca después de varios años, motivada también por las peticiones de sus clientes.

 

 

 

 

La empresa decidió que fueran los consumidores quienes eligieran el nombre de su línea. Para ello, realizaron un concurso encargando a los empleados que encuestaran a quienes pasaban por la tienda sobre qué identidad querían darle a la firma. Y así nació el Kaotiko de hoy.

 

A partir de entonces, la línea de Kaotiko fue ganando peso dentro de las tiendas de la empresa, hasta convertirse en la marca principal del grupo. Actualmente, la línea propia copa el 70% de la facturación de la compañía. Con todo, la empresa continúa distribuyendo terceras firmas, especializadas en moda urbana y athleisure, como Vans, Fila, Carhatt, The North Face, Obey, Kappa, Champion, Nike o Adidas, que continúan siendo su seña de identidad.

 

Palacio y Vilagines controlaban el 100% de Kaotiko hasta que en 2015 abrieron el capital de la empresa a la familia fundadora de la compañía alicantina Estudio 2000, que adquirió en 51% de la empresa. Entonces, Germán Bernad se puso al frente del grupo como director general, tras haber trabajado en otros grupos del sector.

 

 

 

 

Hasta 2018, ambos fundadores de la empresa continuaron en el capital. En 2018, la familia Bernad se hizo con el 91% del capital de la compañía, mientras que Vilagines continúa en la empresa ostentando el 10%. Además, la ejecutiva es la actual directora creativa de Kaotiko y se encuentra al frente del departamento de compras. En julio, German Bernad sumió la dirección general de Kaotiko. 

 

Bajo el mando de los nuevos dueños, Kaotiko decidió abrir sus fronteras más allá de Barcelona e inició la conquista de todo el territorio nacional. Madrid, Platja d’Aro y Mallorca fueron los primeros establecimientos que abrió la empresa fuera de la capital catalana. Actualmente, además de los trece puntos de venta propios, Kaotiko también cuenta con dos corners de El Corte Ingles y presencia en alrededor de treinta puntos de venta multimarca. Fuera de España, el norte de Europa es el principal mercado para Kaotiko.

 

Aunque no tiene tiendas propias en la región, el grupo cuenta con presencia mediante puntos de venta multimarca en el territorio y distribuye sus productos en marketplaces como Zalando o Asos. Además, la compañía ya ha comenzado a testar el terreno con la posibilidad de abrir tiendas físicas en la región a largo plazo.

 

 

 

 

El verano pasado abrió un pop up store en Berlín. Kaotiko ya realizó este movimiento el año anterior en Londres. “Entienden perfectamente nuestro tipo de moda, y el clima acompaña”, señala Germán Bernad.

 

Con motivo de su vigésimo aniversario, Kaotiko ha subido la persiana este año de un flagship store en el número 54 de Rambla Catalunya. “Creíamos que Barcelona se merecía una tienda así, porque es la ciudad que nos vio crecer”, señala Germán Bernad.

 

El made in Barcelona es otra de las señas de identidad de Kaotiko. El grupo apuesta por la producción en cercanía, fabricando el grueso de sus productos en plantas de Mataró. “Llevamos el control , pero de otra manera, y el hecho de haberme podido tomar el café esta mañana con la cortadora, la patronista y tocar el tejido, no lo puedo hacer en otro sitio”, señala Bertrand.

 

 

 

 

Además, el grupo cuenta con proveedores externos para algunas piezas concretas. Por ejemplo, Kaotiko produce el denim de la mano de un fabricante en Granada, el calzado en Elche y el punto en Igualada.

 

Otro de los vectores de la actual estrategia de Kaotiko es su apuesta por la sostenibilidad. “Los chavales lo valoran”, señala Bernad. Hojas de banana para envolver prendas, bolsas de cartón recicladas y contenedores en las tiendas son algunas de las iniciativas que ha puesto en marcha el grupo para acelerar en su estrategia eco.

 

Para continuar en su conquista de los adolescentes y consumidores jóvenes, la empresa ha tenido que virar su estrategia en los últimos años, con el objetivo de pasar de conquistar a un consumidor analógico a intentar enamorar a los nativos digitales. En ese sentido, las redes sociales se han convertido en la clave de Kaotiko para seguir el ritmo de los millennials y la generación Z.