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José Cohen (Canaintex): “México carece de normas para evitar el ingreso de prendas subvaluadas al país”

El presidente de la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex) de México desvela algunos de los detalles que tienen los últimos tratados comerciales firmados por su país y cómo influirán en el sector mexicano de la moda.

Jaime Cevallos

10 oct 2018 - 00:00

José Cohen (Canaintex): “México aún no tiene estado de derecho que evite el ingreso de prendas subvaluadas al país”

 

 

José Cohen es el presidente de Canaintex desde marzo de 2017. El directivo ha seguido de cerca las negociaciones del nuevo Tlcan, bautizado como Usmca, que, a su juicio, beneficiará a la industria mexicana de la moda, ya que cuenta con unas herramientas que permitirán a las autoridades aduaneras frenar el ingreso al país de productos que no cumplen con las reglas comerciales. Sin embargo, los efectos positivos de ese tratado se podrían diluir a mediados de 2019, con la entrada en vigor el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP-11), que generaría la entrada de importaciones de ropa procedentes de Vietnam.

 

Pregunta: ¿Cuál es el estado de salud del textil mexicano?

Respuesta: El sector se encuentra en un periodo de recisión, porque en los últimos años no ha crecido. El Producto Interno Bruto (PIB) de nuestra industria ha sido revisado a la baja y, en los últimos años, ha caído un 2%.

 

P.: En este contexto de contracción de la industria, ¿cómo impactará en el textil mexicano el nuevo tratado de libre comercio entre México, Canadá y Estados Unidos?

R.: De manera positiva, a pesar de que la posición de Estados Unidos era bastante radical al principio, ya que pretendía eliminar todas las flexibilidades arancelarias con las que contábamos. Sin embargo, nuestro equipo negociador realizó una buena labor y alcanzó un acuerdo bastante razonable. Es verdad que el nuevo acuerdo establece algunas restricciones arancelarias para el hilo de coser, al poquetín y los elásticos.

 

P.: ¿Qué pasa con los demás productos?

R.: El resto quedará prácticamente como lo teníamos antes. No obstante, lo que más nos beneficia es que el Usmca incluye un capítulo especial sobre el sistema aduanero y el cumplimiento de regla de origen para el sector del vestido y la confección. Con estas nuevas normativas, las autoridades podrán evitar las triangulaciones y las prácticas irregulares de comercio, además de frenar el ingreso de productos subsidiados o subvaluados.

 

 

 

 

P.: ¿Cuáles son las principales fortalezas del textil mexicano?

R.: Se trata de un sector innovador, que constantemente está realizando inversión en tecnología, lo que le ha permitido mantener la estabilidad de las exportaciones a pesar de la crisis por la que viene atravesando. La industria, además, se está beneficiando de la productividad del campo mexicano, ya que el 50% del algodón que consumimos es cultivado en nuestro país, mientras que el restante lo importamos de Estados Unidos.

 

P: ¿Y cuál es la debilidad del textil mexicano?

R.: Que compite en desigualdad de condiciones, porque el país aún no cuenta con un estado de derecho que evite el ingreso al mercado mexicano de mercancías subvaluadas, que ni siquiera cubren los valores de las materias primas. Lamentablemente, esta realidad ha puesto en jaque a la industria. Esperamos que todo esto cambie con el nuevo tratado.

 

P.: ¿Cómo son las empresas textiles mexicanas?

R.: Contamos con pequeñas y medianas empresas, pero también con grandes compañías que, inclusive, tienen presencia y plantas productivas en Estados Unidos. El sector textil mexicano genera 1,2 millones de empleos directos, lo que representa el 10% del PIB manufacturero. 

 

 

 

 

P.: Este año se firmó el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP11) entre once países, entre los que está México. ¿Qué impacto tendrá este tratado en el sector?

R.: El TPP11 nos está quitando el sueño, porque trae incrustado una lista de escaso abasto, que permite obviar la regla de origen para productos importados, y que afectará a los intereses de la industria. Esta lista impulsará las importaciones de países como Vietnam, con el argumento de que esos productos no hay aquí, y eso no es así.

 

P.: ¿Qué ha hecho el textil mexicano para tratar de revertir esta medida?

R.: Hemos hablado con el Gobierno para pedirle que elimine la lista de escaso abasto del TPP-11, porque cuando el tratado entre en vigencia, a mediados de 2019, hará mucho daño al sector. El problema de la lista de escaso abasto es que se dirige al producto terminado, y eso engloba al 80% de todos los artículos de la tarifa textil-vestido.

 

P.: Las industrias textiles de los países centroamericanos funcionan a base de clústers. ¿México también utiliza el mismo sistema?

R.: No, no tenemos el sistema de clúster como ocurre con la industria textil de los países centroamericanos. Sin embargo, el sector textil mexicano cuenta con empresas que operan en diferentes especialidades y trabajan de manera coordinada, como si fuesen una sola compañía.

 

 

 

 

P.: ¿Trabajan con empresas de Centroamérica?

R.: No exactamente, pero Canaintex tiene entre sus miembros a empresas estadounidenses como el caso de Fruit of de Loom, que cuentan con plantas de producción en Centroamérica. En la región existen empresas transnacionales que tienen huellas en diferentes países.

 

P.: El principal destino de las exportaciones de moda de México es Estados Unidos. ¿Hay otros países en el mapa de la industria mexicana?

R.: Sí, estamos en fase de exploración otros mercados, sobre todo en la Unión Europea. Pero aún estamos trabajando en ello.