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Textil Santanderina vuelve a beneficios, pero frena su recuperación por la escalada de costes

El grupo industrial cántabro, uno de los mayores de la industria textil en España, finalizó el ejercicio 2021 con un beneficio neto de 71.964 euros, frente a las pérdidas de 12.974 euros de 2020. La cifra de negocio de la empresa creció sólo un 0,6%.

Textil Santanderina vuelve a beneficios, pero frena su recuperación por la escalada de costes
Textil Santanderina vuelve a beneficios, pero frena su recuperación por la escalada de costes
Textil Santanderina registró una cifra de negocio de 70,8 millones de euros, apenas un 0,6% más que en 2020.

C. Juárez

17 nov 2022 - 05:00

Textil Santanderina vuelve al negro. El grupo industrial cántabro, uno de los mayores del textil en España, finalizó el ejercicio 2021 con sus ventas en plano, pero de vuelta a beneficios. En 2022, la compañía continúa acusando la escalada de costes, que está ralentizando la recuperación.

 

La vuelta a beneficios se produjo, según subraya Juan Parés, consejero delegado, “gracias a un gran esfuerzo y la estrategia que pusimos en marcha, aunque lo importante es mantener ese resultado a largo plazo”.

 

El beneficio de la empresa en 2021 ascendió a de 71.964 euros, frente a las pérdidas de 12.974 euros de 2020. Parés sostiene que “2022 va a ser complicado, y nos resultará difícil recuperarnos del impacto del incremento de los costes de la energía”. En 2021, la empresa ya reconoció la subida de los precios de las materias primas, como el algodón, la fibra de tencel y colorantes.

 

En el periodo, la empresa registró una cifra de negocio de 70,8 millones de euros, apenas un 0,6% más que en 2020. “El año 2021 ha estado aún marcado profundamente por la pandemia, especialmente en el primer tramo, y por la recuperación de las actividades esenciales como las conocíamos antes”, explica Textil Santanderina en la memoria de las cuentas anuales.

 

En el último año, la empresa ha reducido un 10% su plantilla incluyendo prejubilaciones, bajas y “a la necesidad de reajuste por la reducción de producción y generado por la crisis de la pandemia”. Actualmente cuenta con una plantilla de 251 personas

 

El estancamiento de las ventas se debe a que la unidad de moda, que antes de la pandemia representaba el 75% de los ingresos del grupo, “se vio paralizada de manera directa e indirecta en el primer tramo de la pandemia”. “En este contexto, ya en 2021, nuestros principales clientes vieron limitada la apertura de sus tiendas en la primera mitad del año, condicionado aún por las medidas de contención y prevención frente al Covid”, apunta la compañía.

 

 

 

 

La empresa también señala que el resultado estuvo impactado por la entrada en vigor de medidas arancelarias en Turquía a finales de 2020 y el levantamiento en septiembre de 2021. Debido a estos factores, la división de la unidad de moda perdió cuota sobre las ventas en el ejercicio, hasta el 65%.

 

Por su parte, la unidad techs de la compañía, especializada en tejidos de protección, aumentó su peso hasta el 35% debido a que “se mantuvo en todo momento activa para cumplir con los abastecimientos sanitarios, de alimentación, administración militar, bomberos y resto de productos de seguridad elaborados con materiales textiles, que durante el periodo del estado de alarma, fueron considerados esenciales”.

 

Las ventas internacionales de Textil Santanderina continuaron creciendo en el ejercicio, con un alza del 2,8% y copando la mayor de los ingresos, hasta 45,9 millones de euros. La facturación en España, en cambio, se redujo durante el periodo, con un retroceso del 3,2%, hasta 28,8 millones de euros.

 

Durante el ejercicio, Textil Santanderina avanzó en su apuesta por la sostenibilidad y las energías renovables, elevando su gasto en I+D hasta 1,16 millones de euros, y realizó inversiones por valor de 2,04 millones de euros. La empresa asegura que “se mantiene nuestro avance en dos ejes estratégicos para la sociedad, como son la transición energética y la digitalización, incrementando la eficiencia, trazabilidad y la flexibilidad del negocio”.

 

 

 

 

Algunos proyectos que llevó a cabo la empresa en 2021 fueron la colaboración con Alive Business Consulting y Sage España para la implantación de un nuevo ERP, la definición e implantación del Manufacturing Execution System (MES) en hilatura, tintorería un acabados, y de tecnología Rfid en todos sus almacenes.

 

Además, Textil Santanderina también recibió el apoyo del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para desarrollar un plan de sostenibilidad para la protección del medio ambiente y la mejora de su eficiencia energética, para el que ha recibido una ayuda de 1,2 millones de euros, de los cuales el 12% corresponden a una subvención el resto a un préstamo blando.

 

Para avanzar en sostenibilidad, Textil Santanderina puso en marcha en 2021 S/360º, un proyecto con el objetivo de coordinar a clientes, sistemas de recogida de residuos textiles, su planta de reciclado en Tánger y sus fábricas de hilatura, tejeduría y acabado para el reciclaje de tejidos. En paralelo, la empresa mantiene una participación del 50% en Seaqual, la joint venture con Antex, especializada en producir y comercializar una fibra sintética elaborada a partir de residuos del mar.

 

Fundada en 1923 por los hermanos González Cossío, la compañía fue adquirida en 1943 por la sociedad Cuitó y Cía y a finales de 1959 fue constituida como Textil Santanderina. El grupo tiene su sede en Cabezón de la Sal (Cantabria), donde cuenta con instalaciones de más de 46.000 metros cuadrados de superficie.