‘Brexit’: ¿Qué se juega la moda española?
22 feb 2016 - 04:48
Más de sesenta millones de consumidores potenciales, 1.200 millones de euros en exportaciones e inversores estratégicos para la moda española. Estas son sólo algunas de las magnitudes que demuestran la importancia de Reino Unido para el sector español de la moda, que ahora se mantienen en vilo ante la posibilidad de que el país abandone la Unión Europea. Los efectos del Brexit son todavía difíciles de predecir, pero es inevitable que el sector, que mantiene una estrecha relación con el mercado británico, se juega mucho en el referéndum previsto para el 23 de junio.
La Unión Europa y Reino Unido sellaron un acuerdo el pasado sábado tras más de cuarenta horas de negociación. Finalmente, el primer ministro británico, David Cameron, defenderá el sí en un referéndum para decidir si el país sigue o no en la Unión Europea. Bruselas interpreta estas negociaciones como la última oportunidad para Cameron de lograr un acuerdo antes del referéndum.
Los puntos calientes de las conversaciones son restringir el acceso a las prestaciones sociales de trabajadores comunitarios en Reino Unido, salvaguardas para la City si se modifican tratados o la interpretación de una Unión cada vez más unida. Una de las primeras cuestiones a debate en los encuentros ha sido precisamente la gestión de la crisis de los refugiados. A pesar del impacto económico que podría suponer para el resto de países europeos la marcha de Reino Unido, los expertos consideran que el mayor riesgo es de carácter político y radica en sentar un precedente.
Una eventual salida de Reino Unido de la Unión Europea dejaría en el aire la libre circulación de mercancías que ahora mismo rige en toda la región. Por ello, para la moda española la salida del Reino Unido podría tener amplias consecuencias.
En 2015, España exportó productos de moda a Reino Unido por valor de 1.246 millones de euros, manteniéndose como el quinto mayor cliente para el sector y el primero de fuera de la zona euro. El mercado británico es, de los cinco primeros destinos de las exportaciones española de moda el que más ha incrementado sus compras durante el último año, con un incremento del 9,75% respecto a 2014. En la última década, las exportaciones de moda al país se han elevado un 53,35%, con alzas de hasta el 16,21% interanual en 2013.
Una de próximas operaciones de la moda española en el mercado británico será la apertura de una macrotienda de Stradivarius en Oxford Street, una de las principales arterias comerciales de Londres, prevista para los próximos meses. Será el segundo establecimiento de Stradivarius en el mercado británico, donde abrió su primera tienda en 2014.
En total, Inditex cuenta con una red de distribución formada por 102 establecimientos en Reino Unido. El grupo opera en este mercado con 79 tiendas de Zara y Zara Home, 11 tiendas de Massimo Dutti, siete puntos de venta de Pull&Bear, cinco establecimientos de Bershka y uno de Stradivarius. Por el momento, las únicas cadenas del grupo gallegoque no cuentan con presencia en el país son Oysho y Uterqüe.
También el segundo grupo de distribución de moda de España, Mango, tiene una extensa presencia en el mercado británico. La compañía opera con medio centenar de puntos de venta en el país, ubicados en ciudades como Londres, Birmingham, York, Briston o Manchester. Por su parte, Desigual opera en el mercado británico con dos tiendas, en el centro comercial Westfield y en Regent Street.
Otras compañías más pequeñas también han apostado por Reino Unido para expandir su negocio internacional. Pretty Ballerinas, por ejemplo, eligió el país para iniciar el desarrollo de su red de tiendas con la apertura de su primer establecimiento en Londres en 2007. Actualmente, la compañía, propiedad del grupo Mascaró, suma seis tiendas en el mercado británico. Empresas como Double Agent, Vilagallo, Dolores Promesas, Cuplé o Bimba y Lola, entre otras, también están desarrollando su negocio en el país.
Al margen de la importancia de Reino Unido como mercado para la moda española, el país también es clave por albergar uno de los fondos de inversión que más ha apostado por las empresas de moda, y que, en particular, tiene un papel clave para el sector español.
El fondo de capital riesgo Permira, propietario de compañías como Dr Martens y New Look, controla la española Grupo Cortefiel, junto a los fondos CVC y Pai. Ahora, los grupos, que se hicieron hace diez años con el control de la tercera mayor empresa de distribución de moda en España por facturación, han encargado al banco de inversión Goldman Sachs la venta de la compañía por 1.300 millones de euros.