Puig abre nueva fase en Byredo con la salida de su fundador y creativo
Tras casi dos décadas al frente, Ben Gorham se desvincula definitivamente este mes de junio de la marca sueca que fundó en 2006. Puig, que adquirió la totalidad del capital el año pasado, asume ahora el liderazgo creativo.


Byredo se prepara para una nueva fase. El perfumista y diseñador sueco Ben Gorham, que fundó la marca de culto en 2006 y la convirtió en uno de los referentes del lujo contemporáneo, dejará oficialmente la compañía este mes de junio. Su salida se produce en cumplimiento del acuerdo estratégico firmado en 2022 con Puig, que preveía la continuidad de Gorham como director creativo hasta mediados de este año.
En paralelo al salto al parqué del grupo catalán el año pasado, Puig completó la adquisición del 100% del capital de Byredo, reforzando su posicionamiento en la cosmética de autor y las fragancias de gama alta. El grupo español ha subrayado su intención de preservar la identidad de la firma sueca al tiempo que amplía su potencial de crecimiento.
“Estoy orgulloso de lo que hemos conseguido en estos veinte años y confío plenamente en el futuro de Byredo con Puig”, ha declarado Gorham. “La marca tiene una identidad fuerte que ahora dejo completamente en manos de Puig para poder embarcarme en nuevas oportunidades”.
Marc Puig, presidente y consejero delegado del grupo, también ha reconocido la contribución del fundador. “En Puig tenemos experiencia heredando el legado de las marcas que incorporamos, respetando su esencia y preparándolas para una nueva etapa de crecimiento”, ha asegurado el directivo.
Puig y Byredo acordaron el relevo al frente de la marca, que el grupo controla desde 2022
Byredo encaja en el ecosistema de Puig no sólo por su presencia en perfumería y cosmética, sino también por su apuesta por el diseño como valor diferenciador. Desde sus inicios, la marca sueca se ha caracterizado por una estética vanguardista y minimalista que ha influido tanto en el universo olfativo como en el visual del sector lujo.
La entrada en el portfolio de Puig se produjo en 2022, cuando el grupo adquirió una participación mayoritaria a Manzanita Capital, en una operación que valoró a Byredo en más de 1.000 millones de euros.
Aunque nació como firma de perfumería de autor, Byredo ha ampliado su alcance en los últimos años hacia categorías como maquillaje, moda, marroquinería, joyería y artículos para el hogar. La colección de maquillaje, lanzada en 2020 en colaboración con la artista Isamaya Ffrench, rompió moldes y abrió un nuevo camino para la firma en la cosmética de color de posicionamiento premium. En 2022 se sumó la maquilladora Lucia Pica al desarrollo de la línea.
La estrategia de transición en Byredo forma parte de un pacto entre ambos socios
Con un catálogo de marcas que incluye nombres como Rabanne, Charlotte Tilbury, Dries Van Noten o Jean Paul Gaultier, el grupo busca consolidarse como líder global en el segmento premium. La integración total de Byredo, que refuerza su presencia en los segmentos más creativos de la cosmética y la perfumería, forma parte de esta estrategia.
En el plano del legado, no es la primera transición que aborda el grupo catalán con los fundadores de algunas de las marcas de su catálogo. La compañía, que ya afrontó la jubilación de la diseñadora venezolana Carolina Herrera, también ha construido una nueva etapa con la firma belga de moda de lujo Dries Van Noten. Después de que Puig adquiriera una participación mayoritaria en la firma en 2018, el diseñador del mismo nombre y fundador se mantuvo como director creativo y presidente del consejo. Seis años después del acuerdo, el propio Van Noten anunció su salida progresiva y paulatina, manteniendo el rol de presidente y dejando el diseño en manos del también belga Julian Klausner, quien presentó su primera colección el pasado enero.