La londinense French Connection cede su licencia de calzado a la ‘start up’ Sante+Wade
La compañía ha firmado un acuerdo de licencia a tres años con la start up londinense de calzado. La nueva colección de zapatos de French Connection saldrá a la venta a partir de la próxima temporada primavera-verano.
French Connection externaliza su producción de calzado. La compañía londinense de moda femenina ha cedido su licencia de calzado a Sante+Wade, a través de un acuerdo a tres años vista, según Drapers. El importe de la operación no ha trascendido.
El acuerdo de licencia incluye el desarrollo, la fabricación y la comercialización de la gama de calzado de mujer de French Connection, que se venderá en Reino Unido y Europa a partir de la próxima temporada primavera-verano.
La nueva colección de calzado contará con un precio que oscilará entre 80 libras esterlinas (94,5 euros) y 120 libras esterlinas (141,7 euros). Las tallas en el mercado europeo irán desde la 38 hasta la 46.
Sante+Wade fue fundada por Shola Asante y Agnès Cushnie en 2019. La empresa, que tiene su sede ubicada en Londres, está especializada en la producción y distribución de calzado en Europa. Sante+Wave produce sus artículos en Portugal con materiales procedentes de España e Italia.
French Connection ha cedido el desarrollo, la fabricación y la distribución de su calzado a la empresa británica
Los orígenes de French Connection se remontan a 1972, cuando fue fundada de la mano de Stephen Marks en Londres. La empresa cuenta con más de sesenta establecimientos ubicados entre Reino Unido y otros países de Europa y su equipo está formado por más de 750 trabajadores.
A finales de 2020, justo después del estallido de la pandemia, la empresa, que encadenaba más de un lustro de pérdidas, canceló su proceso de compra para poner el foco en su plataforma online, reorganizar sus ventas y fijar una nueva estrategia de negocio.
Hasta entonces, el mayor accionista de la empresa era su fundador, que contaba con un 40% del capital. El segundo mayor accionista en la empresa era Mike Ashley, que vendió su participación del 24,93% en French Connection a principios del año pasado a empresario británico Apinder Singh Ghura.
Según los últimos datos disponibles, French Connection crerró el primer semestre del ejercicio fiscal 2021, finalizado el 31 de julio del año pasado, con unas ventas de 40,2 millones de libras, lo que supuso un descenso en su facturación del 21,2% frente al mismo periodo prepandemia. En los seis primeros meses del ejercicio, la empresa situó su beneficio bruto en 12,7 millones de libras esterlinas un 41,7% menos que en el primer semestre del ejercicio prepandemia.