Venus acelera en el extranjero para crecer un 10% en 2023

Venus amplía sus puntos de venta para seguir creciendo. La centenaria compañía española de moda de baño ha trazado nuevos objetivos para este año y para 2024. La empresa ha puesto el punto de mira en ampliar su oferta y en su expansión en el extranjero con su desembarco en Francia y los países del este para 2024, según describe Marcos Pizarro, director general, a Modaes.

Venus está presente en el marketplace de El Corte Inglés, y de cara a 2024 pretende entrar en otro marketplace internacional de la mano de Icex para su expansión internacional en Francia y en los países del este.

Uno de los objetivos este año es duplicar el número de puntos de venta en grandes almacenes, que actualmente ascienden a cerca de 62. La marca concentra su distribución en el canal multimarca.

Venus prevé estar en Francia y Europa del Este

La empresa ha finalizado el primer trimestre del año con un crecimiento del 20%, y pretende crecer más de un 10% en el ejercicio completo. Venus finalizó el ejercicio 2022 con un alza en sus ventas de alrededor del 15% y apunta a aumentar sus ingresos gradualmente este año, hasta cerca de 1,7 millones de euros.

La compañía opera en España, Portugal, Italia y Alemania. La empresa fundada en la década de los treinta, emprendió la internacionalización en la década de los ochenta, desembarcando inicialmente en el mercado latinoamericano, y pone ahora el foco en Europa.

Además, la histórica compañía, está en proceso de lanzar una nueva línea que se componga en un 80% de materias primas reciclables. Venus está llevando a cabo un relanzamiento de su línea más joven, Golden Beach, una marca que lanzó en los años ochenta para acercarse a las nuevas generaciones. El relanzamiento se ha realizado a través de una agencia externa de comunicación e incluye una ofensiva en redes sociales. Venus opera con cuatro talleres en Túnez, además de uno propio en Alcorcón.

Venus nació en Madrid en 1932 de la mano de Policarpio Domínguez García y su esposa Soledad Molina. La empresa tiene sus inicios en la industria de la moda como fabricante de fajas y corsetería. A partir de los años sesenta, la empresa se especializó en moda de baño y, en 1978, Policarpio Domínguez Molina, hijo del matrimonio, tomó las riendas de la compañía.

En la década de los ochenta, Domínguez Molina falleció sin descendencia y dejó la compañía en manos de dos trabajadores en herencia. Emilio Flores y Esperanza Garbajosa se pusieron al frente hasta principios de los 2000. Marcos Pizarro, hijo de Flores y Garbajosa, se incorporó a la empresa en 2005 y en 2011 asumió el cargo de director general de la compañía.