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Mango gana peso en Latinoamérica: casi 200 tiendas tras reordenarse en Colombia

En el último año, el grupo español cambió dos veces de socio en el mercado cafetero, donde puso en marcha siete establecimientos a lo largo de su ejercicio 2016. La compañía también desembarcó en Surinam, ganó posiciones en Chile y Panamá pero canceló sus operaciones en Honduras. 

María Bertero

25 ago 2017 - 00:00

Mango gana peso en Latinoamérica: casi doscientas tiendas tras reordenarse en Colombia

 

Mango, a una tienda de romper la barrera de los 200 establecimientos en Latinoamérica. El grupo español, que entró en números rojos en 2016, ha cerrado el ejercicio pasado con 199 puntos de venta en el mercado latinoamericano, nueve más que en 2015.

 

El crecimiento está impulsado por la entrada en nuevos mercados y en el cambio de rumbo en Colombia. El pasado diciembre, Mango puso en marcha su primer establecimiento en Surinam, que representó también la llegada del grupo español a 110 mercados en todo el mundo.

 

A su vez, la compañía retomó sus operaciones en Colombia de la mano de Mercadeo y Moda (Grupo Uribe). A principios de 2016, Mango rompió con la empresa colombiana, debido a un caso de “competencia desleal” para seguir operando con Grupo Wisa, Falabella y Dafiti. La cancelación del acuerdo entre el grupo español y Mercadeo y Moda supuso el cierre de doce tiendas en el mercado colombiano.

 

 

Sin embargo, tras volver a operar con el distribuidor colombiano, Mango retomó su ofensiva en el país cafetero. De hecho fue el mercado latinoamericano donde la compañía más creció en el último ejercicio, ya que subió la persiana de siete establecimientos, sumando un total de 46 puntos de venta.

 

Colombia se encuentra sólo dos tiendas por debajo de Chile, principal mercado del grupo español en Latinoamérica por número de establecimientos. En los últimos meses, Mango abrió tres puntos de venta en el país andino, donde cuenta actualmente con 48 puntos de venta.

 

La compañía prepara la apertura de su primera macrotienda en Chile, que se encontrará en el centro comercial Mall Plaza Los Dominicos en Santiago. Los planes de la empresa pasan por seguir creciendo en el mercado chileno de la mano de Falabella.

 

 

El grupo chileno de tiendas por departamento es también socio de Mango en Argentina, donde suma tres puntos de venta; Perú con 37 establecimientos y Colombia. En México, en cambio, la compañía española opera de la mano de El Palacio de Hierro.

 

Otros de los países en donde el grupo europeo extendió su red de tiendas en el último ejercicio fueron El Salvador, Guatemala y Nicaragua, sumando un punto de venta nuevo en cada país.

 

A pesar del crecimiento en varios mercados, Mango también se retiró de dos países latinoamericanos. La compañía dio marcha atrás en Honduras, cerrando las dos tiendas con las que operaba en el país.

 

 

En el último ejercicio, Mango retrocedió en el mercado mexicano. El grupo, que actualmente cuenta con treinta puntos de venta en el país, bajó la persiana de cinco establecimientos en los últimos doce meses.

 

En términos generales, la compañía española cerró su ejercicio 2016 con un total de 2.217 puntos de venta y 191 macrotiendas, 24 de ellas abiertas en el último año. Respecto a 2015, la red mundial de establecimientos de Mango se contrajo un 6,5%.

 

El grupo obtuvo una deuda neta de 682,39 millones de euros (805,2 millones de dólares), un 29% más respecto al año anterior. La compañía española también mantuvo a la baja sus ventas, con un descenso interanual del 2,9%, hasta 2.260 millones de euros (2.666,7 millones de dólares). Las pérdidas se situaron en 61 millones de euros (71,9 millones de dólares), frente al resultado positivo de 11,8 millones de euros (13,9 millones de dólares) del ejercicio precedente.