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Édgar Vásquez Vela (Mincetur): “La demanda de alpaca peruana está creciendo más rápido que la capacidad de producción”

De acuerdo con el ministro de Comercio Exterior y Turismo de Perú, la fibra estrella del país ha sufrido una crisis de éxito, debido a que por su reputación global Asia ha comenzado a comprar sólo el material.

María Bertero

26 jun 2019 - 00:00

Édgar Vásquez Vela (Mincetur): “La demanda de alpaca peruana está creciendo más rápido que la capacidad de producción”

 

 

Édgar Vásquez Vela es el Ministro de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) de Perú. Graduado en economía, el político destaca la importancia del sector textil para el país y qué papel juegan materias primas como la alpaca o el algodón en el extranjero. Vásquez insiste también que la integración global de la economía seguirá siendo fundamental para Perú, uno de los países de Latinoamérica con mayor número de acuerdos de libre comercio internacional. El sector de la confección ha logrado exportar cerca de 2.200 millones de dólares en una época, pero la crisis de Venezuela se comió unos 700 millones de dólares. Los retos del país pasan por seguir fortaleciendo sus vínculos con los mercados estadounidenses y asiático, principalmente.

 

Pregunta: ¿La moda es un sector estratégico para el Gobierno peruano?

Respuesta: Totalmente, estamos buscando salir al mundo, apostando por exportar sectores de calidad y la moda es sin duda uno de ellos, tanto por las fibras, como por los diseños y la sostenibilidad. La industria peruana de la confección ha ido evolucionando de manera positiva en los últimos años y hemos logrado diferenciarnos por la calidad de las fibras que hay en Perú. Además hay un segmento de moda peruana o diseñadores peruanos que viven en el extranjero y que se han desarrollado de una manera muy interesante, introduciendo elementos de la parte creativa y mezclando las fibras peruanas con otros elementos.

 

P.: ¿Qué medidas se están destinando a impulsar el sector?

R.: Desde la parte industrial tenemos una legislación favorable para el sector y queremos mantenerlo, a pesar las turbulencias internacionales. Queremos apuntar a nuestras estrategias de promoción, teniendo como ancla la feria Perú Moda, con la que buscamos atraer a grandes compradores y poder poner en exposición a los diseñadores peruanos en desfiles y exposición. Por eso también decidimos internacionalizar el formato de feria, la llevamos a Berlín y ahora haremos un certamen itinerante entre China, Corea del Sur y Japón. En Latinoamérica también estamos buscando llevarla a Brasil.

 

 

 

 

P.: La guerra comercial entre EEEUU y China, el nuevo Tlcan que no termina de resolverse, ¿Puede Perú capitalizar este contexto internacional?

R.: Hay que saber diferenciar los momentos, porque en el corto plazo puede haber oportunidades, ya que en ambos mercados están saliendo proveedores que están buscando alternativas en otros países. Pero lo cierto es que nadie sale de una guerra comercial, sobre todo si tenemos en cuenta que estamos hablando de las principales economías del mundo, que son también los principales socios internacionales de Perú. Si esta situación se sigue extiendo va a generar una mayor desaceleración de la economía global. Hay que ser cuidadosos a la hora de pensar que esta es una oportunidad, a no ser que se tenga una visión a corto plazo y de cuidar la caja de la empresa. Perú ya está resintiendo esta situación, con un primer impacto en los precios de los minerales, que provocó un descenso de nuestras exportaciones totales. Sin embargo, es interesante como se han incrementado las exportaciones de moda y se mantuvo Estados Unidos como socio comercial principal.

 

P.: El año pasado entró en vigor el nuevo TPP11, ¿se necesitan más acuerdos para que la industria de la moda crezca?

R.: La integración global ha favorecido a la estabilidad económica de Perú de los últimos años. Aún falta que el tratado entre en vigencia para Perú, ya para el sector de prendas de vestir no quedan muchos mercados a los que no nos hayamos abierto. El país tiene tratados de libre comercio con casi toda Latinoamérica, Estados Unidos, con la Unión Europea, con Japón o Corea. La integración global va a ser el camino que siga Perú siempre.

 

P.: ¿Cómo de estratégica es la alpaca en el conjunto de la industria textil y de la moda en Perú? ¿Qué recorrido tiene?

R.: En los últimos años ha ganado mucha relevancia. Hace poco abrimos una tienda multimarca de alpaca en China, que es un país con mucha aceptación a prendas de este tipo de fibras, que son prendas con alto valor agregado. Sin embargo, tenemos la limitante de que la demanda está creciendo relativamente más rápido de lo que puede crecer la producción de la fibra. La alpaca se desarrolla en espacios superiores a los 4.000 metros de altura sobre el nivel del mar y el cambio climático no ha afectado el año pasado, con unas heladas muy fuertes que elevaron la tasa de mortalidad de los animales. El ministerio de agricultura y ganadería está invirtiendo en lograr los espacios de refugio adecuados en las zonas andinas para las crías de alpaca. La fibra ha sufrido una crisis de éxito por la reputación que ha ganado a escala global, ahora cada vez hay más compradores asiáticos que adquieren la fibra y no el producto terminado, lo que genera una presión sobre el precio.

 

 

 

 

P.: ¿Qué otros desafíos presenta la alpaca?

R.: Hay que ver cómo organizar a los empresarios con los productores para que puedan tener la posibilidad de trabajar en la fibra de una manera más inteligente. En términos de la promoción estamos siendo más agresivos en la difusión en ciertos mercados, especialmente en aquellos de climas más fríos. El año pasado lanzamos la marca Alpaca Perú, para dar a conocer a manera global la producción peruana de prendas de alpaca.

 

P.: ¿Busca Perú afianzarse como un mercado productor o generador de marcas de moda?

R.: Tenemos espacio para que sucedan las dos cosas. Hay empresas que lograron imponer marcas muy buenas, pero no podemos negar que el diferencial de la moda peruana son las fibras textiles, caso que Colombia, por ejemplo, no lo tiene y sí se ha vuelto un país generador de marcas. Pero finalmente, la marca es la que da el diferencial mayor, una misma prenda puede costar más con una marca bien posicionada, pero aprovechando la ventaja comparativa de nuestras materias primas.

 

P.: El ecommerce está despegando en Perú, pero aún no hay medidas que regulen su actividad, ¿hace falta más control?

R.: Hay un doble panorama. Por un lado, el mundo está caminando hacia una digitalización de todos los procesos y el comercio exterior e interno han cambiado también sus estructuras. Sin embargo, por otra parte, hay una sensación de competencia desleal de ciertas empresas contra las extranjeras, tanto de bienes como de servicios. Hay que encontrar un balance entre el ecommerce y generar un panorama competitivo para los mercados, aprovechando las experiencias internacionales para sacar el mayor provecho, especialmente para las pymes que son las más beneficiadas con el ecommerce.

 

P.: ¿Qué otros retos tiene por delante la moda en Perú?

R.: El principal reto es poder recuperar una industria que fue muy afectada por el cierre del mercado venezolano. Hay una nueva orientación desde el sector empresarial, que está invirtiendo en tecnología para un mejor manejo de las fibras, los hilados y poder adecuarse a las nuevas tendencias. También es importante seguir apuntalando la diferenciación del sector, sustentado en nuestras propias fibras textiles.