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Los relojes de lujo de Greubel Forsey entran en España de la mano de Rabat

La compañía liderada por Antonio Calce busca acercarse al turista de lujo y distribuirá sus piezas en los establecimientos de Rabat en Madrid y Barcelona. “Al producto de nicho no lo toca la crisis”, asegura el ejecutivo.

Los relojes de lujo de Greubel Forsey entran en España de la mano de Rabat
Los relojes de lujo de Greubel Forsey entran en España de la mano de Rabat
“No hay operadores en España especializados en relojería de alta gama a nuestro nivel”, opina el consejero delegado de la compañía suiza.

I. Carmona

24 oct 2022 - 05:00

Greubel Forsey ve oportunidad en tiempos de crisis. La compañía suiza de relojería de alta gama ha entrado en el mercado español de la mano del grupo joyero Rabat y distribuirá sus piezas en sus tiendas en Madrid y Barcelona, según ha adelantado Antonio Calce, consejero delegado de la empresa, a Modaes.

 

El objetivo de la compañía es perseguir al turista de lujo y al coleccionista, un cliente “más abundante de lo que parece” en el mercado español, en palabras de Calce. “Al producto de nicho no lo toca la crisis, es un muy buen año para la expansión”, declara el ejecutivo.

 

Greubel Forsey no da detalles sobre su rendimiento económico, pero sólo fabricará doscientos relojes para el mercado español en su primer año de actividad en el país, con unos precios que van desde 100.000 euros hasta 800.000 euros por colecciones limitadas.

 

 

 

 

De momento, la empresa no prevé instalar equipo en España y continuará dirigiendo su negocio en el país desde su sede en Suiza. La compañía trabaja con una red de sólo siete distribuidores en Europa: Arije en Francia, Art in Time en Monaco, Les Ambassadeurs en Suiza, Marcus Watches, Swiss Gallery y Pragnell en Reino Unido y Pisa Orologeria en Italia.

 

Además, Greubel Forsey está presente en Estados Unidos, México, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Estambul, Omán, Catar, Hong Kong, Australia, Taiwán, Macao, Tailandia, Singapur, Kuala Lumpur, Japón y Corea del Sur. En los próximos meses, la compañía comenzará a operar en un nuevo punto de venta en Ginza (Japón).  

 

La empresa suiza no tiene planes de asociarse con un distribuidor en Portugal de momento. “Los portugueses viajarán a España, el objetivo es atraer al turista”, explica Calce. Aun así, el ejecutivo destaca la abundancia del cliente coleccionista viviendo en España, sin necesidad de recurrir al viajero: “en los eventos de inauguración no había ni un extranjero”.

 

Además, Greubel Forsey se enfrenta a un mercado despejado. “No hay operadores en España especializados en relojería de alta gama a nuestro nivel”, opina el consejero delegado de la compañía suiza. La empresa nació en 2004 de la mano de Robert Greubel y Stephen Forsey y tiene sede en La Chaux-de-Fonds.

 

Los orígenes de la empresa de lujo se remontan a 1992, cuando los ejecutivos comenzaron a trabajar juntos en la compañía industrial fabricante de piezas para relojes Renaud&Papi. En 2006, Richemont se hizo con una participación minoritaria de Greubel Forsey, pero la vendió en mayo de 2021 y los cofundadores de la empresa recuperaron el total de su propiedad.

 

Por su parte, Rabat nació en 1977 como un pequeño taller joyero en Badalona de la mano de Esteban y Cuca Rabat. En sus establecimientos, la empresa distribuye otras firmas de relojería de alta gama como Blancpain, Panerai, Zenith, Tudor y Chopard. Rabat está actualmente liderada por la segunda generación de la familia fundadora y opera a través del hólding Grupo Flash Rabat, del que dependen ocho filiales.