Entorno

El lujo pone fin a su ‘traspié’ en China y vuelve a ‘sacar brillo’ a su negocio en el país

Prada, Richemont, Hermès o Louis Vuitton han retomado su expansión en la China continental tras un periodo de parón por los cambios en los hábito de consumo, la política anticorrupción y las compras fuera del país.

S. Riera

12 sep 2017 - 04:25

El lujo pone fin a su ‘traspié’ en China y vuelve a ‘sacar brillo’ a su negocio en el país

 

El lujo saca de nuevo brillo a China. Los gigantes mundiales del lujo redoblan su apuesta por país impulsadas por una reactivación de su negocio tras un periodo de parón. El mercado chino vuelve a ser uno de los motores globales del sector del lujo después de moderar la brecha que había entre los precios en Europa y China. Prada, Richemont, Hermès o Louis Vuitton vuelven a poner al país en su punto de mira.

 

En el último año, la diferencia entre el importe de bienes de lujo en el gigante asiático y en el Viejo Continente se ha reducido. Según un sondeo de casi 2.000 precios de artículos de lujo elaborado por la consultora Deloitte, los bienes de gama alta son ahora un 32% más caros en China que en Francia, frente a la diferencia del 41% que marcaban en 2016. En el caso de la moda y el calzado, los productos pasaron de ser un 50% más caros el año pasado a un tercio en 2017. 

 

La tendencia responde a la depreciación de la moneda local, el yen, el auge del ecommerce y el crecimiento exponencial del turismo internacional, que han motivado a algunas empresas de lujo a equiparar sus precios. El mercado de consumo chino representa un tercio de las ventas globales del sector del lujo. No obstante, la mayoría de habitantes del país realizaba sus compras durante estancias en Europa, sobre todo Francia. El fenómeno respondía a los elevados precios que los mismos bienes marcaban en China fruto de los aranceles.

 

 

De hecho, China, junto a Europa, tirarán en 2017 de las ventas mundiales del lujo, que se prevé que crezcan entre un 2% y un 4%, según el último estudio sobre el sector publicado por la consultora Bain&Co en colaboración con Altagamma, la patronal italiana del lujo. En el caso concreto del mercado chino, el informe contempla un ascenso de las ventas de entre el 6% y el 8% respecto al año anterior.

 

Las previsiones del informe de Bain&Co sostienen también que en 2020, el mercado mundial del lujo se situará entre 280 millones de euros y 290 millones de euros gracias al crecimiento de la clase media china junto con la recuperación de los mercados más maduros. De hecho, según The Boston Consulting Group, los ciudadanos chinos son, con un 46%, los más predispuestos del mundo en gastar más en lujo en 2017.

 

Prada, que en la primera mitad del año ha visto contraer sus ventas en Europa y Japón, las ha elevado de nuevo en la China continental con un alza del 4,5%, hasta 302 millones de euros. La también italiana Furla, a las puertas de dar el salto a bolsa, disparó su facturación un 63% en el primer semestre gracias principalmente a la buena evolución del negocio en China, donde el grupo opera con 43 tiendas.

 

 

Roberto Cavalli, que encara ahora una nueva etapa de crecimiento tras poner fin a su reestructuración, ha colocado de nuevo a China en su punto de mira para abrir varias de sus nuevas aperturas. Brunello Cucinelli, por su parte, incrementó sus ventas un 10,7% entre enero y junio registrando una evolución favorable en todas las regiones en las que opera, pero en especial, en China, donde creció un 34,6%.

 

En el caso de Tod’s, la empresa redujo sus ventas en el primer trimestre de 2017 en todos los mercados que opera, excepto en China, donde las elevó un 3,6%. La estadounidense Brooks Brothers ha relanzado este año su expansión en el país, donde prevé crecer a doble dígito, con la apertura de un flagship en Pekín.

 

El hólding suizo de lujo Richemont, que también ha atravesado en los últimos años un proceso de reestructuración de su red de tiendas, anunció para este año redoblar su apuesta en China, su segundo mayor mercado. Otro pilar del lujo, la francesa Hermès, impulsó asimismo sus ventas en la primera mitad del año aupadas sobre todo por Asia y, en particular China, que tiró del crecimiento, con un alza del 14%.

 

 

Louis Vuitton, por su parte, también retoma su apuesta por el mercado chino con el lanzamiento de su propia plataforma de ecommerce en el país. Bulgari, Cartier, Coach o Gucci son otras de las marcas occidentales de gama alta que tienen su propia plataforma y que compiten por el 7% del mercado de lujo que se mueve en la Red.

 

Según se desprende del estudio Luxury China 2017, de la consultora L2, el mercado del lujo en China total creció en 2016 un 4%, después de dos años a la baja. Las principales causas de este ascenso son las políticas del Gobierno en contra de las falsificaciones y el impulso al consumo interno. En esta coyuntura, y tras años de expansión galopante con retail, las compañías occidentales apuestan ahora por el canal online como vehículo de crecimiento.