Born Living Yoga sigue cabalgando la ola del ‘wellness’ y apunta a 20 millones en 2023

Born Living Yoga sigue creciendo. La compañía madrileña de moda ha terminado 2022 con una facturación de 14,5 millones de euros. Para 2023, la empresa planea llegar a veinte millones de euros. “Tenemos muchos retos por delante, pero estamos muy contentos con el resultado”, resume Álvaro Roca, uno de los fundadores de Born Living Yoga, a Modaes.

A lo largo de 2022, la compañía ha reforzado su presencia en Europa. La empresa, que concentra su distribución en el canal online y en el multimarca desde su fundación, ha aterrizado en el mercado francés y, desde julio, opera en la planta dedicada a wellness de Galeries Lafayette ubicadas en bulevar Haussmann, en París.

Actualmente, la empresa cuenta con 250 puntos de venta en Europa en mercados como Alemania, Andorra, Francia o Portugal, aunque España continúa siendo su mayor mercado. Para 2023 la compañía prevé sumar 100 puntos de venta físicos en Europa y llegar a estar presente en 45 marketplaces. “Desembarcaremos en Reino Unido con la colección primavera-verano y planeamos llegar también a Bélgica, Luxemburgo y Países Bajos”, explica el fundador.

La compañía de moda deportiva ha aterrizado también en el mercado americano en 2022 y ha desembarcado en México donde está presente en 42 puntos de venta. Para 2023, la compañía quiere llegar a setenta establecimientos multimarca en el país, así como consolidar su presencia en tres o cinco marketplaces.

Born Living Yoga obtiene el 50% de sus ventas del mercado internacional

La empresa madrileña también ha diversificado su oferta en 2022. En septiembre, la compañía lanzó una colección masculina de yoga con el objetivo de “desvincular la idea de que el yoga es un deporte exclusivamente femenino”. Además, la compañía ha sacado colecciones especializadas en otras prácticas deportivas como fitness o paddle. “A lo largo de este año queremos seguir reforzando esta diversificación”, avanza Roca.

Born Living Yoga, que se fundó en 2017 de la mano de Álvaro Roca y su madre, Arianne Puig no cuenta con establecimientos propios, aunque sí que es una idea que contempla en el futuro. “No sabemos cuándo pasará, pero abrir una tienda propia es algo que sabemos que llegará en algún momento”, señala el fundador.

Born Living Yoga emplea a 34 personas y está controlada al 85% por sus fundadores. El resto del capital está en manos de siete accionistas que participaron en una ronda de financiación de 200.000 euros en 2018.