Barneys New York esquiva la quiebra y pasa a manos de Perry Capital

Los grandes almacenes estadounidenses Barneys, uno de los símbolos del lujo de Nueva York, cambia de propietarios. La compañía ha logrado esquivar la quiebra al firmar un acuerdo para reestructurar su deuda y pasar a manos de sus acreedores Perry Capital y The Yucaica Cos (propiedad de Ronald Burkle).

El acuerdo, que se dio a conocer ayer por la tarde, supone reducir el pasivo a largo plazo de Barneys desde 590 millones de dólares hasta cincuenta millones de dólares, mediante la conversión de la deuda de Perry y Yucaipa. Tras la operación, Perry Capital, liderada por Richard Perry, se convierte en el primer accionista de Barneys.

Mark Lee, consejero delegado de Barneys, y Richard Perry, su nuevo presidente, aseguraron que el acuerdo dota al gran almacén de flexibilidad y nuevos recursos para hacer crecer el negocio.

Barneys New York estaba hasta ahora controlado por Istithmar World, que lo compró en 2007 a The Jones Group (dueño, por ejemplo, de Stuart Weitzman) por 942 millones de dólares. El grupo de inversión Istithmar World, con inversiones en negocios como el Circo del Sol, ha atravesado dificultades económicas y ha puesto en marcha un proceso de desinversión.

El grupo de grandes almacenes, fundado en 1923, cuenta con establecimientos en Nueva York, Beverly Hills, Chicago, Seattle, Boston, Dallas, San Francisco o Las Vegas.