Mango, menos aventurero: concentra en Europa el 83% de las aperturas

Después de años de explorar el mundo, Mango regresa a casa. La compañía de distribución de moda, cuya expansión se había caracterizado históricamente por la apertura de numerosos mercados lejanos a través de franquicias, se refugia ahora en territorios maduros. En 2022, el 83% de las aperturas se concentraron en Europa, mientras que antes de la pandemia el grueso de la expansión se concentraba en África y América.

En un contexto marcado por la incertidumbre geopolítica, acelerada tras el estallido de la guerra en Ucrania, y los riesgos en mercados de alto crecimiento como China, Mango ha apostado por quedarse cerca de casa.

El grupo cerró el ejercicio 2022 con una red total de 2.566 tiendas, de las cuales 1.810 eran franquicias, incluyendo las tiendas que cedió en Rusia a sus socios locales. La empresa sumó 119 establecimientos respecto al año anterior, 99 de ellos en Europa, según la última memoria anual publicada por la compañía.

Alemania fue el país que lideró globalmente las aperturas, con 56 nuevos puntos de venta, si bien la mayoría son corners en grandes almacenes como Galeria o Modehaus. El tercer y cuarto mercados con más aperturas fueron también europeos: Suiza, con 21 tiendas más, y Bélgica, con 20 aperturas netas.

En el top 10 se cuela también España, con diez aperturas netas. Durante el último año, Mango ha insistido en su margen de crecimiento en su mercado local, donde está apostando por conquistar localidades más pequeñas donde hasta ahora no tenía presencia.

Francia (con diez), Italia (5), Reino Unido (4) o Austria y Países Bajos (con tres aperturas netas cada uno) son otros de los mercados europeos donde Mango ha aumentado su red de retail en el último año.

Alemania fue el país que lideró globalmente las aperturas, con 56 nuevos puntos de venta

A esta apuesta por el continente europeo se suma la renovada ofensiva en Estados Unidos, que emprendió a principios de 2022 con la apertura de un flagship en la Quinta Avenida de Nueva York. El objetivo de la cadena es que el país se convierta en uno de sus cinco mayores mercados a escala internacional.

En 2022, la empresa también sumó 28 establecimientos en Asia, mientras que redujo en cuatro puntos de venta su red en América y realizó otros cuatro cierres netos en el continente africano.

Antes de la pandemia, el mapa de expansión de Mango era el inverso: en 2019, la compañía abrió once tiendas en África y 24 en América, mientras que cerró 21 en Asia y mantuvo estable su red en Europa.

De hecho, la conquista de mercados emergentes, y a menudo pequeños, fue una de las características de la expansión de Mango, que le han llevado a estar presente en más de 115 mercados de todo el mundo, incluyendo territorios como Surinam, Maldivas o Burkina Faso. De ellos, en 54 mercados tiene menos de cinco tiendas, en contraste con la apuesta de otros grupos del sector, que pasa por concentrar la red en menos mercados, pero con mayor penetración.

En los últimos años, sin embargo, la compañía ha trazado un nuevo plan que identifica varios mercados estratégicos en los que abrirá decenas de tiendas en los próximos años, incluyendo Estados Unidos, Canadá e India.

Mango cerró el ejercicio 2022 con una facturación de 2.688 millones de euros, un 20,3% más que el año anterior y su máximo histórico, y un resultado neto de 82 millones de euros, el mayor en casi una década.