Neiman Marcus da un marcha atrás y rechaza la OPA de Saks

Neiman Marcus da un paso atrás en su fusión con Saks. El grupo estadounidense de grandes almacenes, que llevaba varias semanas en conversaciones con su principal competidor, Saks Fifth Avenue, para su fusión, ha rechazado finalmente su adquisición por considerarla “inadecuada”, según ha adelantado Reuters.

El grupo Saks lanzó una oferta pública de adquisición (OPA) a Neiman Marcus que valoraba la empresa en 3.000 millones de dólares, aunque según el mismo medio, Neiman Marcus esperaba recibir una cantidad más elevada, lo que habría hecho que el grupo diera un paso atrás en la operación.

Las compañías, gestionadas por grupos de inversión, siguen en conversaciones, con el objetivo de llegar a un acuerdo para los primeros meses de 2024. La posible fusión de los dos grupos de grandes almacenes supondría la creación de un gigante de la distribución del lujo en Estados Unidos, con una red de más de 75 establecimientos.

Neiman Marcus recibió una oferta de compra de Saks valorada en 3.000 millones de dólares

Neiman Marcus, que salió de concurso en 2020, se encuentra inmerso en la estrategia Revolutionize Luxury Experiences con el objetivo de reforzar su modelo operativo y recuperar el crecimiento, lo que ha hecho que en los últimos meses la compañía haya ajustado su plantilla y recortando empleos.

De cara a los próximos tres años, el grupo ha establecido un presupuesto de doscientos millones de dólares para invertir en su retail. “Esta transformación creará experiencias únicas de marca en tiendas, añadiendo nuevos espacios y servicios y elevando la experiencia digital”, explicó la compañía en el momento.

Con sede en Dalas, Neiman Marcus es uno de los mayores grupos de grandes almacenes de lujo de Estados Unidos. La compañía está liderada por el consejero delegado Geoffroy Van Raemdonck desde 2018. El presidente de la empresa, Ryan Ross, se unió a la compañía en agosto de 2022 para potenciar su avance en omnicanalidad.

Saks Fifth Avenue, por su parte, está controlada por el grupo Hudson Bay (HBC), que también controla otros grupos de grandes almacenes. La empresa ha visto su rentabilidad afectada en los últimos meses y ha ido retrasando algunos de los pagos a sus proveedores con el objetivo de retener su liquidez.

Saks también ha ajustado su personal este año con el objetivo de ahorrar costes, reduciendo su plantilla tanto en tienda como en oficinas. A lo largo del ejercicio, la compañía ha hecho referencia en distintas ocasiones a un receso de las ventas de lujo, afectadas por el contexto macroeconómico. Para 2024, el grupo prepara nuevas aperturas y algunas renovaciones.