Cristina Ródenas (Page Group): “En esta crisis quedará reflejado quién es un buen CEO y quién no”

Multidisciplinar, flexible, ágil y algo más jerarquizado. Así serán los perfiles y las organizaciones como consecuencia del coronavirus, según Cristina Ródenas, senior partner en Page Executive, la filial de puestos directivos de la consultora de recursos humanos Page Group. Ródenas cree que “en esta crisis quedará reflejado quién es un buen consejero delegado y quién no” y que, más que nunca, lo importante en un primer ejecutivo es que tenga una capacidad de comunicación “extraordinaria y recurrente”. 

Pregunta: Muchas empresas han congelado su política de contratación. ¿Cuánto cree que tardará en volver la actividad?

Respuesta: La actividad se ha ralentizado pero de forma desigual. Todos los perfiles de back office y soporte, como finanzas, logística y recursos humanos siguen contratándose ante la necesidad. Al menos los perfiles directivos. Es curioso porque en los momentos de no crisis los perfiles de back office son más estables y tienen menos cambios, mientras que los de retail, márketing o comercial son los más dinámicos. Ahora, los perfiles de front office han quedado en stand by. En cualquier caso, la actividad no se ha parado, aunque algunos procesos han quedado detenidos. Se han contenido, pero no hay cancelación.

P.: ¿En la crisis de 2008 también ocurrió lo mismo?

R.: No. En la anterior crisis fue más homogéneo y las necesidades eran precisamente más comerciales, de desarrollo de negocio… Se buscaban nuevas perspectivas y estrategias. Se movían las piezas para intentar redinamizar la actividad y el front office estaba muy en auge Ahora ha llegado todo de golpe: hay que hacer Ertes, un análisis de costes muy importante, intensificar el ecommerce, preparar la empresa para el trabajo en remoto… Y eso exige nuevos perfiles.

P.: ¿Qué habilidades hacen falta para gestionar durante una crisis?

R.: Sobre todo, tener una visión estratégica a corto y medio plazo, porque a largo es imposible. Y saber gestionar los equipos sen remoto con un mensaje super positivo. Esto es fundamental. Por otro lado, saber anticiparse y poner a disposición las herramientas digitales para que todos los equipos trabajen en remoto de la mejor manera posible.

“Las estructuras deberán ser un poco más jerarquizadas, porque el propio consejero delegado tiene mayores preocupaciones”

P.: ¿Contrataría a un directivo durante la crisis?

R.: Ahora generaría mayor incertidumbre. Tenemos que explotar lo mejor que tienen nuestros consejeros delegados en este momento, porque son los que generan la confianza en la gente. Quizás sí tendría sentido mover alguna pieza en el comité de dirección, un experto en una materia concreta vinculada a la situación actual. Pero cambiar un consejero delegado ahora destruye la confianza. Más que nunca, lo más importante que el consejero delegado tiene que tener es una capacidad de comunicación extraordinaria.

P.: ¿Cambiarán los perfiles de directivos después de la crisis?

R.: Sí, como en todas las crisis. Y durante esta crisis se quedarán reflejado quién es un buen consejero delegado y quien no lo es tanto.

P.: ¿Cómo serán?

P.: Con una capacidad de anticipación enorme y con capacidad de reinvención y adaptación.

P.: El dependiente cobrará más importancia. ¿Cambiará el perfil?

R.: Se van a acelerar tendencias de customer experience, porque la afluencia no será la misma y la atención tiene que ser muy especial. Las medidas necesarias supondrá una reducción del personal de tienda y una mayor calidad, algo que veíamos ya en los últimos años

“Estamos siendo multidisciplinares y después de esta crisis lo seremos más”

P.: ¿Habrá consolidación en los organigramas?

R.: Los organigramas son fruto de las personas que lideran los departamentos. Se crean departamentos en función de las capacidades y el potencial del que la dirige. Se han creado nuevas estructuras súper diferentes de las que teníamos hace diez años y departamentos como el ecommerce, por ejemplo, ganarán peso.

P.: ¿Habrá más especialización?

R.: Todo lo contrario. Y después de esta crisis, más. Ahora estamos siendo multidisciplinares y aprendemos que cuanto más sepamos hacer de todo, mejor, porque así podemos optimizar los puestos de trabajo.

P.: ¿Se volverá a estructuras más jerárquicas?

R.: Totalmente. Una de las habilidades más importantes es la capacidad de gestión de equipos. Porque desde casa te puedes sentir muy solo y muy perdido. Quizás es cuando más tiene sentido trabajar en equipo con un responsable y poner objetivos comunes. Las estructuras deberán ser un poco más jerarquizadas, porque el propio consejero delegado tiene mayores preocupaciones y tiene que tener una visión y trabajar sobre el futuro, así que tiene que delegar en grupos con distintos responsables.

P.: ¿Cómo se ficha a un directivo en remoto?

R.: La gente ha ido tomando mas confianza con la reunión virtual y eso nos ha permitido abrir y cerrar un proceso completamente digital. En lugar de hacer tres entrevistas se hacen siete, y la toma de referencias es mucho más exhaustiva: si antes pedíamos tres, ahora pedimos diez.