Claves para un nuevo liderazgo empresarial

En un mundo empresarial que evoluciona a una velocidad de vértigo, marcado por la globalización, la digitalización y una conciencia social en ascenso, el concepto de compliance ha trascendido su definición básica de cumplimiento normativo para convertirse en un elemento crucial que define el éxito y la sostenibilidad de las empresas.

Revista Modaes

Especial número 50

El compliance, entendido como el cumplimiento de las leyes, regulaciones, estándares y políticas, es hoy una piedra angular en la construcción de la confianza del cliente, la eficiencia operativa y el acceso a nuevas oportunidades de negocio.Antes de reflexionar sobre ello, hay que tener en cuenta la importancia de cumplir con estas regulaciones y políticas para evitar sanciones y multas por incumplimiento de esas normas. Sanciones que, en muchos casos, pueden ser financieras, pero también penales y que pueden afectar a la reputación y a la estabilidad financiera de la empresa. En el mundo de la moda, el compliance es especialmente crítico por diversas razones: la preocupación por la sostenibilidad, los derechos laborales y la necesidad de ética en la cadena de suministro.

En este sentido, en la industria de la moda hay diferentes áreas clave en las que el compliance juega un papel significativo. El primero es la sostenibilidad: el cumplimiento normativo en la moda incluye cada vez más regulaciones relacionadas con la sostenibilidad ambiental. Esto puede abarcar desde el uso de materiales orgánicos y reciclados hasta prácticas de fabricación que minimizan el impacto ambiental. Los derechos laborales: la industria de la moda ha sido históricamente criticada por las condiciones laborales en fábricas textiles y de confección en países en desarrollo.

El compliance implica asegurar que se respeten los derechos laborales, incluyendo salarios justos, condiciones seguras de trabajo y prohibición del trabajo infantil. La ética en la cadena de suministro: las marcas de este sector debengarantizar que sus proveedores cumplan con estándares éticos en toda la cadena de suministro. Esto implica auditar y monitorear regularmente a los proveedores para prevenir el uso de mano de obra esclava, prácticas corruptas o cualquier otra actividad ilegal o antiética.

La propiedad intelectual: el cumplimiento en la moda también incluye proteger los derechos de propiedad intelectual, como marcas registradas, diseños y patentes. Esto implica respetar precisamente esas leyes de propiedad intelectual y evitar la falsificación y la infracción de derechos de autor. Las normativas de etiquetado y publicidad: las marcas de moda deben cumplir con las regulaciones relacionadas con el etiquetado de prendas de vestir, incluyendo la divulgación de materiales utilizados, instrucciones de cuidado y origen del producto. Además, deben ser precisas y éticas en su publicidad, evitando la publicidad engañosa o la promoción de estándares poco realistas de belleza.

“Los CEO modernos deben ser líderes éticos que fomenten una cultura de integridad en toda la empresa”

La privacidad y protección de datos: con el aumento del comercio electrónico y el marketing digital en esta industria, el compliance también abarca la protección de la privacidad y los datos de los consumidores. Esto implica cumplir con las leyes de privacidad de datos, obtener el consentimiento adecuado y proteger la información personal de los clientes.A raíz de todo ello, el papel que juega el CEO en este nuevo contexto ha experimentado una transformación: debe asumir la responsabilidad de garantizar el cumplimiento normativo y fomentar una cultura ética y transparente dentro de la organización. Este cambio no es sólo una respuesta a un entorno regulatorio más estricto, sino también a un cambio en las expectativas de los stakeholders, quienes demandan una mayor transparencia, mayor responsabilidad, así como mayor compromiso ético por parte de las empresas.

Por otro lado, los CEO modernos deben ser líderes éticos que fomenten una cultura de integridad en toda la empresa. Y, relacionado con esto, deben tomar decisiones éticas difíciles en nombre de la compañía relacionadas con prácticas de márketing, relaciones con proveedores, manejo de datos de clientes y resolución de conflictos de interés. Este perfil debe combinar características personales con habilidades profesionales y tener un conocimiento sólido de las regulaciones de su industria, comprendiendo su impacto en la organización. Debe anticipar y planificar estratégicamente para cumplir y aprovechar oportunidades dentro del marco regulatorio.

Es crucial, por otro lado, que se comunique efectivamente con autoridades, empleados y stakeholders para resolver problemas. Además, inspirar y motivar al equipo para cumplir proactivamente con las regulaciones, impulsando la innovación y el cambio. También es importante que sepa identificar y gestionar riesgos de incumplimiento normativo, implementando medidas para mitigarlos. El CEO necesita adaptarse rápidamente a cambios regulatorios y manejar la presión e incertidumbre eficazmente.Establecer una cultura organizacional que valore y priorice el cumplimiento normativo.

Proporcionar recursos y apoyo adecuados para garantizar que los empleados tengan las habilidades y el conocimiento necesarios para cumplir con las regulaciones. Fomentar la transparencia y la responsabilidad en todos los niveles de la organización en relación con el cumplimiento normativo. Invertir en tecnología y sistemas que faciliten el cumplimiento normativo y mejoren la eficiencia en este aspecto. Promover la colaboración y el trabajo en equipo entre diferentes departamentos para abordar los desafíos de cumplimiento normativo de manera integral.

Establecer métricas y objetivos claros relacionados con el cumplimiento normativo y medir el desempeño de la empresa en este aspecto de manera regular. Hay que tener en cuenta que un liderazgo ético y transparente en el mundo empresarial no sólo impacta positivamente en la cultura corporativa, sino que también mejora el desempeño empresarial.

Asimismo, contribuye a la confianza entre los empleados, clientes, proveedores e inversores, lo que a su vez conduce a una mayor lealtad, compromiso y estabilidad a largo plazo. En momentos de crisis, este tipo de liderazgo puede ser un factor diferencial, permitiendo a la empresa navegar con mayor eficacia y recuperarse más rápidamente. En resumen, el CEO ideal en la era del compliance es aquel que logra una sinergia entre el cumplimiento normativo, la ética empresarial y el rendimiento organizacional. Este líder no sólo asegura la sostenibilidad a largo plazo de la empresa, sino que también construye una marca respetada y valorada por clientes, empleados y la sociedad en general.