Entorno

Moody’s empeora su previsión para la moda en Europa y alerta de más presión a los márgenes

La agencia de calificación rebaja por primera vez desde 2013 de estable a negativa el rating de las empresas del retail por la bajada de los márgenes operativos.

Javier Cumellas

18 jun 2019 - 04:49

Moody’s empeora su previsión para la moda en Europa y alerta de más presión a los márgenes

 

 

Moody’s empeora sus previsiones para el sector de la moda. La agencia de calificación rebaja por primera vez desde 2013 de estable a negativa el rating de las empresas del retail por la bajada de los márgenes operativos. En la moda, prevé una ralentización de las ventas, motivada por el cambio de hábitos de consumo y la fuerte competencia de los operadores del comercio online.

 

Para este año y el siguiente, la agencia pronostica un aumento moderado para las ventas del retail y una mayor presión sobre los márgenes del sector, algo que vendrá motivado por el cambio de la demanda hacia el canal online, con márgenes más pequeños. En consecuencia, la rentabilidad de muchos retailers se verá afectada por la bajada de precios que aplican las tiendas para hacer frente a la caída en las ventas.  

 

En cuanto a las empresas de moda, Moody’s calcula que el crecimiento en la facturación de las empresas permanecerá débil hasta 2021 por la presión sobre el precio, la alta competencia online y los cambios de hábitos del consumidor.

 

 

 

 

De hecho, es una tendencia que se está dando ya en la actualidad, ya que las ventas minoristas en su conjunto han decaído en los últimos años. Por ejemplo, las ventas del retail han pasado de 42.000 millones de euros en Reino Unido y Alemania en 2004 a los 34.000 millones y 29.000 millones en 2018, respectivamente, según Euromonitor. En el caso de España, en el mismo perdido, la facturación ha pasado de 23.000 millones en 2014 a 19.000 millones de euros del año pasado.


Este contexto ha venido marcado por el auge de la fuerte competencia que existe entre las plataformas de comercio online a la hora de aplicar su política de precios, así como los cambios en los hábitos de consumo. En este sentido, el gasto de los consumidores en ropa bajará en relación al consumo total al mismo tiempo que los ingresos disponibles de los usuarios se desplazará a otros componentes como los servicios, la recreación, la vivienda o la salud. Esta tendencia se continuará desarrollando en los próximos dos años.

 

Por países, Francia ha sido uno de los grandes mercados de la Unión Europea que más ha rebajado el consumo en ropa en las últimas tres décadas. Entre 1995 y 2017, el peso de la moda en el consumo ha caído dos puntos pasando de 5,75% a 3,75%, algo que se explica por el aumento de la competitividad y la fragmentación en el mercado francés. Moody’s, citando un informe de Kantar, señala que las ventas realizadas con descuentos en el país han pasado del 30% al 47% en tan solo una década.

 

 

 

 

 

La mayoría de retailers han tenido que ampliar los descuentos por la caída en el número de clientes durante la temporada de verano de 2018, que fue larga y seca. Esto ha provocado que los márgenes de muchas empresas se hayan reducido, algo que se reproducirá en los próximos años, según Moody’s. 

 

El informe de la agencia también pone el foco en analizar la competencia de los ecomerce como un factor que amenaza a las empresas de moda. Moody’s alerta que los pequeños retailers no tienen las capacidades operativas suficientes o los recursos financieros para competir con las plataformas del comercio online, algo que solo queda en manos de las grandes empresas. No obstante, las diez compañías de ropa más grandes pese haber ganado cuota de mercado en los últimos años por su expansión en tiendas, lo han hecho mucho menos rápido que los competidores online, según Euromonitor.

 

Moody’s prevé que las empresas inviertan más en la experiencia online de compra y en conocer más las demandas del consumidor como los gastos gratuitos de envío o de devolución.