¿Qué pasa con la moda cuando los precios se disparan? Hemeroteca para tiempos convulsos

Cuaderno de bitácora para afrontar el oleaje. La guerra en Ucrania ha alentado aún más la subida del precio de la energía, una problemática que Europa arrastraba desde hacía meses y ahora parece irrefrenable. Con ello se encarecen las materias primas y el transporte, y llenar la cesta de la compra cada vez cuesta un poco más. Según el dato adelantado del Índice de Precio de Consumo (IPC) publicado el pasado miércoles, la tasa anual se ha situado en el 9,8% en marzo, el dato más alto desde 1985.

En términos intermensuales el récord se agranda: respecto a febrero el IPC interanual se ha incrementado en 2,2 puntos, la mayor subida desde 1977. Según el Ministerio de Economía, el 73% de esta alza se debe al impacto de la invasión de Ucrania y el Gobierno ya ha preparado un plan de choque para contrarrestarlo. La Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) considera que las medidas de choque del Gobierno harán que la inflación anual se sitúe en el 5,8%, y no en el 6,8% como calculaba. En cualquier caso, la moda se está enfrentando a una inflación nunca vista desde inicio del siglo, pero no es la primera vez que se vive un contexto semejante.

En 2007, a las puertas de la caída de Lehman Brothers que dio el pistoletazo de salida a la Gran Recesión, la economía española cerró el año con un encarecimiento del 4,2% en la lista de la compra. Entonces, el incremento se debió, en gran medida, a la subida de precios del carburante y los lubricantes, lo que encareció el transporte. También incrementaron los precios los alimentos y bebidas no alcohólicas como los aceites, la lecho o la fruta. ¿Qué pasaba entonces con la moda?  

El sector subió los precios en 2007, pero poco más de la media de los últimos años. En concreto, registró una subida interanual del 1,2% a cierre de año. Entonces, el sector iba a contracorriente y ralentizaba su encarecimiento. En 2006 anotó una inflación mayor, del 1,3% y en 2005 del 1,4%. De hecho, el sector fue encadenando caídas de precios a partir de 2002 el año en que llegó a un pico de 5,3% de inflación, el mayor hasta la fecha desde inicio de siglo.

En 2007, la facturación del comercio textil en España caía por primera vez en la década, situándose en 22.083 millones de euros, con un descenso anual del 1,68%, según datos de Acotex. Borja Oria, por aquel entonces presidente de la patronal, achacó la caída a la deflación estructural del sector y el aumento del consumo en campaña de rebajas, que suponía el 28% del total.

En el tercer puesto del ránking español de subida de precios se encuentra precisamente ese año, 2002. La moda se vio arrastrada en una subida de precios generalizada que acabó firmando el año con un incremento del 4%. La llegada del euro revolucionó la cesta de la compra y los redondeos, la subida de impuestos y los aumentos del servicio público hicieron disparar la inflación.

Para la moda, 2002 es el año donde los precios se dispararon incluso por encima de la inflación general. De hecho, los titulares de entonces rezaban sentencias como que “el aumento de precios vestido y calzado dispara el IPC”. En concreto, el precio de los artículos aumentó un 5,3% el año de la entrada del euro y en 2003 se moderó hasta el 2,5% y en 2004 al 2,1%. Como ahora, la inflación se contagió por todo el continente y la zona euro registró una subida de precios del 2,3%. Para el consumo, 2002 fue un año de crecimiento tras registrar un alza del 3,7%, hasta 20.347 millones de euros, el mayor pirco de la década.

Más allá del periodo entre 2002 y 2007, el mayor aumento de precios del sector de la moda fue en 2021, tras la crisis del Covid-19, cuando el IPC del sector se incrementó un 1%, muy por debajo de la media general, que se situó en el 6,5%. En el otro lado de la balanza, en los últimos 22 años, sólo ha caído el precio de la moda en 2009, cuando el IPC registró una rebaja del 0,8%. En plena crisis, el sector abarató el producto a pesar de que el IPC general se situaba en el 0,8%. Más tarde, cuando el IPC general se hundió en 2014, la moda aguantó en positivo con un pequeño rebote del 0,2%.

Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), los precios de la moda volvieron a subir un 3,6% en febrero ante un índice general que marcaba cifras de récord.