Entorno

El textil sella la paz social para dos años y firma con CCOO el nuevo convenio

Hoy a las 12 del mediodía en la sede de UGT en Madrid, los representantes de las diferentes patronales del textil y la confección y los portavoces de los dos grupos sindicales mayoritarios tienen previsto poner fin a siete meses de tensión.

S. Riera

19 feb 2019 - 04:57

El textil sella la paz social para dos años y firma con CCOO el nuevo convenio

 

 

Este mediodía, en la sede de UGT en Madrid, el textil sella dos años de paz social. Los representantes de las diferentes patronales del textil y la confección y los portavoces de los dos grupos sindicales mayoritarios tienen previsto poner fin a siete meses de tensión con la firma del nuevo convenio. Ahora sólo queda por terminar de consensuar el plazo para abonar los atrasos.

 

Con la rúbrica de este pacto, patronal y sindicatos ponen fin a siete meses de tensión y se evita judicializar su aprobación. El acuerdo se selló in extremis a principios de febrero, a las puertas de abrirse el juicio en la Audiencia Nacional. Al final, representantes de la patronal y de los trabajadores alcanzaron un pacto sobre el cómputo para alcanzar los 14.000 euros de salario mínimo anual, que había sido el último escollo de la negociación.

 

CCOO se suma así al pacto sobre el marco legal de las relaciones laborales en la industria textil y de la confección después de desmarcarse el pasado julio de la negociación. Este sindicato reclamó a última hora la incorporación en el acuerdo del compromiso a alcanzar el listón de los 14.000 euros para los salarios más bajos, tal y como se había acordado en el último Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva, que pactaron en junio las patronales Ceoe y Cepyme con los secretarios generales de UGT y CCOO.

 

 

 

 

El principio de acuerdo que por aquellas fechas ya se había producido entre las diferentes organizaciones empresariales y UGT rozaba ya esta meta. Se contemplaban desde un inicio alzas salariales del 3% anual para los sueldos más bajos entre 2018 y 2020. No obstante, CCOO exigió llegar a los 14.000 euros, llegando a convocar, en primer lugar, una huelga general; desmarcándose, después, de la firma del primer convenio, e impugnándolo, por último, ante la Audiencia Nacional.

 

Ante la presión de CCOO, que en octubre organizó una manifestación en Ontinyent (Valencia) durante la cumbre de la patronal europea del textil Euratex, UGT pidió a la comisión paritaria de la mesa de negociación del convenio que se pronunciara sobre esta cuestión. Se determinó entonces que era de carácter obligatorio para todas las empresas del sector situar el listón de los salarios mínimos en 14.000 euros a partir del 1 de enero de 2021.

 

 

 

 

En la recta final de la negociación, la tensión se centró en el cómputo para determinar cómo se alcanzaría este mínimo. De hecho, la última reunión en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (Sima), días antes de que empezara el juicio en la Audiencia Nacional, terminó sin acuerdo.

 

De no haberse alcanzado ningún pacto, el convenio hubiera entrado en un proceso judicial complejo. Además del juicio en la Audiencia Nacional, en el que se hubiera determinado su viabilidad, CCOO hubiera exigido un arbitraje obligatorio y, de no alcanzarse un acuerdo en este sentido, se hubiera abierto un segundo proceso judicial en la Audiencia Nacional.

 

Sin embargo, después de haberse sellado el acuerdo el pasado 5 de febrero, se garantiza la paz social en el sector para los próximos dos años. Ahora, queda por abonar los atrasos a los trabajadores que quedaron fuera del convenio.