Adolfo Domínguez pierde 3,9 millones pese al plan de reestructuración
18 ene 2010 - 00:00
El modisto gallego Adolfo Domínguez sigue sin corregir su rumbo. El pasado viernes, la firma de moda comunicó a la CNMV los resultados correspondientes al tercer trimestre de su ejercicio fiscal 2009-2010, cerrado el pasado 30 de noviembre. La compañía, con sede en Ourense, ha registrado unas pérdidas netas de 3,88 millones de euros, frente al beneficio de 2,2 millones del mismo periodo del ejercicio precedente.Estos números rojos se suman a los registrados en el primer semestre del año, cuando la compañía perdió 2,49 millones de euros, frente al beneficio de 2,6 millones de euros obtenido en el mismo periodo del ejercicio anterior. El plan de reestructuración de costes implementado por la empresa durante la primera mitad de 2009 todavía no ha surtido efecto.
"El tercer trimestre del ejercicio ha mantenido la tendencia marcada por los dos trimestres anteriores, los indicadores de consumo privado, así como el de confianza de los consumidores se mantienen en niveles negativos", señaló la empresa en un comunicado. Según el grupo gallego, "todavía no se percibe una mejoría en el consumo y, consecuentemente, en las ventas del sector".
Así, el negocio de Adolfo Domínguez ha continuado cayendo. La empresa ha cerrado el tercer trimestre del ejercicio con unas ventas de 118,4 millones de euros, frente a los 131,5 millones del mismo periodo del año anterior, lo que representa un retroceso del 10,01%. Este porcentaje de caída se mantiene en los niveles del ejercicio anterior.
La compañía, que ha logrado incrementar un 5,69% sus ingresos por royalties (procedentes de las licencias), ha visto como la crisis del consumo y la estrategia de reducción de precios ha impactado nuevamente en su resultado bruto de explotación (ebitda), que se ha situado en 9,6 millones de euros, frente a los 16,3 millones del mismo periodo del ejercicio anterior. Uno de los principales puntos que atacó el plan de reestructuración de Adolfo Domínguez fue la red de tiendas, ya que el grupo comenzó a cerrar los establecimientos sin rentabilidad. Desde el 1 de marzo, la compañía ha cerrado 59 puntos de venta y ha abierto otros 53, de manera que el saldo total se sitúa en 597 establecimientos, frente a los 603 que la empresa poseía en febrero de 2009. Un 72% de los puntos de venta son propios y el resto, franquicias.
Desde el pasado 1 de marzo, la compañía ha puesto en marcha 27 tiendas en España y cuatro en el extranjero y seis franquicias en España y dieciséis en el exterior, y ha cerrado 30 tiendas en España y nueve en el exterior y catorce franquicias en España y 6 en el exterior. De este modo, Adolfo Domínguez centra sus esfuerzos en los mercados internacionales, mientras reduce su implantación en España.
La empresa advirtió de que continuará "analizando todos los puntos de venta cuyo contrato de arrendamiento vence en los próximos meses, estudiando su evolución y analizando las previsiones de rentabilidad estimadas, para decidir la renovación o abandono de los mismos".
Con una capitalización bursátil de 10 millones de euros, los títulos de la empresa cerraron el viernes a 12,05 euros, con un aumento del 0,25% respecto a la sesión del jueves. El modisto Adolfo Domínguez es el primer accionista del grupo, con un 31,95% del capital, seguido por Puig (15,01%) y Libertas 7 (10,4%).