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David René (Magtech): “La industria de la moda no tenía ni idea de lo que pasaba en el campo”

El algodón cultivado sin suelo es una alternativa sostenible para la industria textil, que además puede contribuir a la calidad en las fibras “que ha ido cayendo en los últimos años”, según el fundador de Magtech, David René.

David René (Magtech): “La industria de la moda no tenía ni idea de lo que pasaba en el campo”
David René (Magtech): “La industria de la moda no tenía ni idea de lo que pasaba en el campo”
“Hay empresas que quieren cambiar por ‘motu proprio’ y otras que hacen ‘greenwashing’”.

Modaes

26 ene 2024 - 05:00

Fashion Sustainability Shot lanza una nueva serie multimedia de entrevistas con las voces más acreditadas sobre la sostenibilidad. Impulsada por Modaes y patrocinada por Tendam, la serie comenzó a emitirse en 2021 y mensualmente contribuye a generar conocimiento sobre sostenibilidad en la industria española de la moda. En 2024, Fashion Sustainability Shot se adentra en la trayectoria y los objetivos de algunas de las principales start ups españolas del ámbito de la sostenibilidad.

 

Sigue las entrevistas de Fashion Sustainability Shot

 

 

Maximizar el rendimiento por metro cuadrado y mejorar la calidad de la fibra son los objetivos de Magtech, empresa especializada en el cultivo de algodón sin suelo, como una alternativa sostenible para la industria de la moda. Su fundador, David René, visualiza un futuro en el que la biología cuántica dé “respuestas a una serie de incógnitas en la industria del algodón en particular”, donde la ciencia y la tecnología jugarán papeles clave, sobre todo en la supply chain.

 

 

 

 

 

 

Pregunta: Cuéntenos su historia, ¿cómo surge el proyecto?

 

Respuesta: El proyecto se inició 2021. Antes pasé diez años en la industria textil. Sobre todo, en los últimos cuatro años en Bangladesh, donde compraba hilo. La cadena de suministro desde el hilo hasta el embarque de la prenda la conocía bastante bien. Cuando regresé de Bangladesh, empecé a hacer un poco de investigación y a ver quién estaba trabajando en algodón y la sorpresa que me llevé fue que en 2021 en España se cultivaban en torno a 45.000 hectáreas de algodón. Y luego la siguiente sorpresa fue que más del 40% del algodón que se cultiva en España se exporta a Bangladesh. No sabía que se cultivaba algodón en España y mucho menos sabía que se exportaba a Bangladesh. Pero ya mi sorpresa fue mayor cuando me puse en contacto con todos los grupos de moda grandes, que tienen oficina en Daca, en Bangladesh, y ninguna sabía que ese algodón acababa en Bangladesh, con lo cual me di cuenta de que la industria de la moda no tenía ni idea de lo que pasaba en el campo.

 

 

Pregunta: ¿Es a partir de ahí cuando surgió la idea?

 

R: Fui a Andalucía una semana a conocer a los agricultores de la industria desmotadora y me di cuenta de que desde el momento que sale el camión de algodón de las instalaciones en España, las empresas no saben dónde va a acabar ese algodón. Entonces vi una desconexión y, hablando con los agricultores, me di cuenta de que todos tienen los mismos problemas. Además, se están transformando los campos en centros generadores de energía. No vamos a tener materia prima o fibras naturales en este caso. En el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (Csic) me hablaron de cultivos sin suelo, que es donde empieza todo el proyecto que es cultivar sin suelo que es lo que yo quería probar con el algodón. Me puse en contacto con el Centro de Edafología y Biología Aplicada Segura (Cebas) en Murcia y ahí es donde empezó todo.

 

 

P: ¿Cuál es el reto sostenible que ataca Magtech?

 

R: Hay un factor muy importante y ese es la sostenibilidad, que está en el orden del día. Pero para nosotros hay otro factor tan relevante que es el factor de la calidad de la fibra. Es decir, cuando tú hablas de fibras sintéticas, consigues una uniformidad de fibra muy constante, porque cuando le metes química al proceso de producción de fibras sintéticas consigues una uniformidad bastante alta. En el caso de las fibras naturales todavía hay una parte muy grande de artesanía, de eventualidad o dependencia, porque hay factores externos que no se controlan. Hemos visto que la calidad de la fibra, sobre todo las fibras más premium, ha ido cayendo en los últimos años, y hace falta mantener la calidad y, obviamente, la parte de la sostenibilidad. El algodón es un cultivo que, primero, demanda mucha superficie agraria (estamos hablando de 33 millones de hectáreas de algodón al año), y es una variedad que demanda mucha agua. Aparte, más del 20% de los pesticidas que se utilizan en toda la industria agrícola se dedican al cultivo del algodón. Entonces, donde atacamos, sobre todo, es en el factor de la sostenibilidad. Y para nosotros es tan importante o más el punto de vista de la calidad. 

 

 

 

 

P: ¿Cuál es su perspectiva acerca de la sostenibilidad en la industria de la moda?

 

R.: Hay una intención de cambiar las cosas. Hay empresas que quieren cambiar por motu proprio, y otras que hacen greenwashing, que tampoco lo veo tan mal si detrás hay acción. En general todo el mundo quiere cambiar cosas. A veces hablo con consultoras estratégicas y me doy cuenta de que hay un desconocimiento muy grande. En este último año hemos empezado a ver a ingenieros agrónomos a trabajar con departamentos de sostenibilidad. En 2022 y 2023 en el segmento de lujo están haciendo más hincapié en meter científicos e ingenieros a dirigir un departamento de sostenibilidad. La tendencia es empezar a meter en los equipos de sostenibilidad gente con un perfil más técnico. Falta mucho por hacer. Creo que en el caso de los cultivos sin suelo la inversión es grande, y aunque vayamos un poco atrasados empezamos a ver perfiles técnicos en las empresas y yo soy bastante optimista.

 

 

P: ¿Cuáles son los objetivos que plantea abordar Magtech en un futuro?

 

R: Los retos de futuro son muchos y a la vez son bastante divertidos. Lo que perseguimos son dos cosas fundamentalmente: una, maximizar el rendimiento por metro cuadrado y otra mejorar la calidad de la fibra que producimos. En estos últimos años se está invirtiendo mucho en cultivos sin suelo. Están apareciendo empresas en España en los últimos dos años, Madrid cultivo del lúpulo, Barcelona cultivo de fresas o lechugas. Vamos a poner el foco en el break even y luego empecemos a escalar, abrir mercados etc. Para aumentar el rendimiento por metro cuadrado eso se consigue con ciencia. En Estados Unidos el rendimiento medio por metro cuadrado es de 12 kilogramos de tomate por metro cuadrado, en países de África no llegan a los 2 kilogramos. En Países Bajos el rendimiento medio está por encima de 47 kg por mero cuadrado. En las pruebas de concepto estamos un 50% por encima del rendimiento medio de una hectárea de algodón en campo. Este año estaremos aumentando por diez los rendimientos de la India.

 

 

P: ¿Cómo se imagina el sector de la moda en treinta años?

 

R: Si hablamos del sector de la moda desde el punto de vista de supply chain veo claro que el futuro de la industria pasa por las fibras naturales. El 65% de la moda está hecha de fibras sintéticas, que proceden del petróleo. El 10% del barril de petróleo, que son combustibles residuales, es lo que se utiliza para hacer nylon y poliésteres que son derivados del petróleo. Tenemos una oportunidad muy grande de recuperar el protagonismo de las fibras naturales. La biología cuántica va a venir a dar respuesta a una serie de incógnitas en la industria, y en la industria del algodón en particular. Veo un futuro muy científico y tecnológico, sobre todo en el supply chain de la industria textil.