Eduardo Zamácola (Acotex): “Si no hay nada extraordinario, el sector ha tocado fondo”

La moda sigue esperando el rebote. Después de 2020 para olvidar, el comercio minorista de ropa y complementos ha cerrado 2021 con un nuevo descenso, marcando su mínimo de ventas desde que hay registros, según los datos presentados ayer por la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex). Su presidente, Eduardo Zamácola, cree que “si no hay nada extraordinario, el sector ha tocado fondo”, aunque descarta una recuperación plena al menos hasta 2023.

Pregunta: ¿Cómo es posible que las ventas hayan vuelto a caer si la base comparable era tan baja?

Respuesta: El primer trimestre de 2021 ha lastrado todo el año. En enero caímos un 53%, y en febrero, un 41%. Después hubo meses en los que subíamos un 1% o bajábamos un 1%. El segundo semestre y los primeros meses del año hemos ido mucho mejor, y como es lo último que hemos vivido nos da la sensación de que el año ha ido bien, pero no.

P.: ¿Ha tocado suelo el sector?

R.: Después de 2020 decíamos que en 2021 íbamos a crecer a doble dígito, pero lo que hemos hecho ha sido caer. Ahora entiendo que sí hemos tocado fondo. Si no pasa nada extraordinario, por supuesto.

P.: ¿Todo es culpa del Covid-19?

R.: Del Covid-19 y de las consecuencias del Covid-19. Filomena también afectó: fueron diez días sin ventas. El resto es consecuencia de confinamientos, de nuevos rebotes de la pandemia y que después de un año y pico en esa situación la gente es muy cautelosa a la hora de gastar. Además, han cambiado las preferencias. La moda ha pasado a los escalafones más bajos: la gente quiere salir a cenar, viajar… Sale a cenar y tomarse una copa en pareja y se gasta 200 euros sin pestañear, pero como vea un jersey de treinta euros quiere un descuento.

“La gente sale a cenar y se gasta 200 euros sin pestañear; pero con un jersey de 30 euros quiere un descuento”

P.: Los españoles destinan sólo el 4,6% de su presupuesto a la moda. ¿Qué ha hecho mal el sector?

R.: No somos ágiles. Los cambios nos cuestan mucho y cuando tomamos una decisión hoy la vemos reflejada en la colección de dentro de un año. También estamos muy expuestos a elementos materiales: tienda física, ropa… Si yo vendo servicios de consultoría o periodismo es diferente. Cuando cerró todo en 2020, los restaurantes tenían una semana de stock; nosotros teníamos seis meses. Se habla mucho de relocalizar la producción, pero eso llevará años. Además, hemos acostumbrado al cliente a los descuentos y a comprar a precios de derribo. Hemos quitado el valor a lo que significa una prenda, al trabajo que hay detrás.

P.: Pero ahora están subiendo los precios.

R.: Porque no queda otra, pero a ver quién puede subirlos y cómo. Subir precios y luego hacer descuentos no tiene sentido, y tampoco puedes hacer una subida lineal del 10%, porque te comerás los básicos. Pero los costes se han incrementado de una manera brutal y es inasumible.

P.: El sector de la moda es hoy más pequeño. ¿También es menos rentable?

R.: Sin lugar a dudas. Como sector, hemos hecho absolutamente de todo para quitarnos el stock, y eso hace mella en el margen.

P.: Después del Covid, la guerra. ¿La nueva normalidad es la incertidumbre?

R.: Sin lugar a dudas La incertidumbre y la capacidad que tengas para gestionarla. Como no seas capaz de gestionarlo de manera efectiva y ágil estás muerto. 

“Las cadenas seguirán manteniendo el liderazgo, pero no se van a comer todo el mercado”

P.: ¿Recuperar las ventas de 2019 es una utopía?

R.: Absolutamente. Es cierto que a algunos operadores les está yendo fenomenal con el buen tiempo, el regreso de los turistas y la vuelta de los eventos, pero el sector en su conjunto ha vendido en 2021 la mitad que en 2019. ¿Nos recuperaremos de eso este año? Obviamente no. ¿Cuándo lo haremos? Creo que en el segundo semestre de 2023, pero es una moneda al aire.

P.: Las cadenas copan ya un 38,1% de las ventas. ¿Han tocado techo?

R.: El boom de expansión de las cadenas va a frenar un poco, porque todas están revisando sus redes de tiendas. Seguirán manteniendo el liderazgo, pero no se van a comer todo el mercado y no creo que lleguen al 50% que tuvo una vez el multimarca.

P.: ¿Qué perspectivas hay para 2022?

R.: Si no pasa nada raro, tiene que haber crecimientos a doble dígito. Por ahora llevamos un acumulado del 19%, sería esperable y positivo cerrar entre un 30% y un 35% por encima de 2021.