Entorno

Del poliéster a la logística: cómo la crisis del petróleo impacta en la moda

Los precios del barril de Brent han descendido un 31%, hasta 33 dólares en la jornada de ayer. Sin embargo, anteriores fluctuaciones no han tenido un impacto significativo en la moda.

C. Juárez

10 mar 2020 - 04:58

Del poliéster a la logística cómo la crisis del petróleo impacta en la moda

 

 

El oro negro se desploma y asusta a la moda. En la jornada de ayer, el precio del barril de Brent ha descendido un 31%, hasta 33 dólares, la mayor caída de los últimos veintinueve años. Actualmente, el precio del crudo está a un 50% por debajo del nivel que tenía a principios de enero y afecta a varios eslabones de la cadena de valor de la moda: las fibras, el transporte y el consumo.

 

De prolongarse la guerra de precios del petróleo, una de las repercusiones directas será en el precio de las fibras textiles que se derivan de él, como el poliéster, una de las principales materias primas de la moda, o del nylon, también derivado del oro negro.

 

La producción de poliéster ha ido incrementándose en los últimos años. Entre 2000 y 2017 se triplicó su producción, según datos de Statista. Para 2020 se estima que la producción mundial de poliéster alcance 18,1 millones de toneladas. La producción de nylon, por su parte, se incrementó desde los 2,4 millones de toneladas en 1975 hasta los 5,7 millones de toneladas en 2017, aunque su empleo en moda es más residual.

 

Sin embargo, aunque es derivado del petróleo, el poliéster también se elabora con otros componentes químicos, y fluctuaciones anteriores no han tenido un impacto significativo en producción ni en los precios de esta materia prima, ya que la depende más del resto de materias primas, como el algodón. En 2011, por ejemplo, la demanda de poliéster en la industria textil se disparó en 2011 a raíz de la escalada de los precios del algodón.

 

 

 

 

La logística sería otro de los puntos de la cadena de valor de la moda dependiente del petróleo. La globalización de la moda, tanto en su aprovisionamiento como en su distribución, obliga al sector a tejer una red de transporte tanto por tierra, como mar y aire.

 

De hecho, la mayoría de las exportaciones mundiales de moda se transportan a través de vía marítima, donde el petróleo es el principal carburante. En España, las ventas de moda al exterior a través de transporte por carretera copa el 60% del total, mientras que el transporte marítimo y aéreo el 14,1% y el 23,3%, respectivamente.

 

Además, la guerra de precios del petróleo también impactará en los bolsillos de los consumidores. Aunque no tendrá un efecto inmediato, el presupuesto de los consumidores se repartirá entre otros gastos.

 

 

La Opep vs Rusia

La razón del desplome del petróleo es la decisión de Arabia Saudí, mayor productor de crudo del mundo, de ofrecer su petróleo a masivos descuentos después del fracaso el pasado viernes del acuerdo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep) y Rusia para recortar la producción. El país aspiraba a un acuerdo que blindara los precios del crudo ante la caída de la demanda asociada con el coronavirus.  

 

El sábado, Arabia Saudí comenzó a aplicar fuertes descuentos en las ventas en los mercados internacionales con el fin de atraer a los principales compradores y decidió aumentar su producción de 9,7 millones de barriles a once millones.

 

 

 

 

Los analistas explican que el hundimiento del petróleo suma más inestabilidad en un momento en que los mercados están considerando la posibilidad de una recesión mundial debido a la crisis del coronavirus. De hecho, Wall Street detuvo ayer la cotización durante quince minutos por las caídas del 7% de Dow Jones y el S&P 500 arrastrada por la situación del petróleo y el coronavirus.

 

Goldman Sachs, por su parte, ha alertado que la guerra de precios del petróleo entre la Opep y Rusia podría arrastrarse hasta que el barril de Brent alcance los veinte dólares. La entidad ha recortado sus pronósticos para el segundo y tercer trimestre de 2019, situando el precio del crudo en los treinta euros.

 

“El pronóstico para el mercado petrolero es aún más pesimista que en noviembre de 2014, cuando comenzó una guerra de precios similar, ya que se suma al colapso significativo de la demanda de petróleo debido al coronavirus”, ha señalado el banco en un comunicado.