Nestlé inicia la cuenta atrás en el proceso de compra de L'Oréal

La multinacional suiza Nestlé está dudando sobre si aumentar su participación en la multinacional de cosmética L’Oréal, donde tiene un 30% de las acciones, según señalan diversas fuentes financieras. El consenso de mercado esperaba que Nestlé se hiciese con L’Oréal, pero a medida que la crisis impacta de manera negativa en el consumo hay más reservas al respecto, tanto dentro como fuera del grupo helvético. Según fuentes del mercado, son los propios directivos de L’Oréal los que desean que Nestlé tome el control de la compañía a partir de este mes de abril, temerosos de caer en manos de un oligarca ruso o de algunos de los grupos chinos que se encuentran en busca de oportunidades en Europa.L’Oréal tiene dos accionistas de referencia: la familia Bettencourt, con el 31% del capital, y Nestlé, que ostenta el 30%. Ambos mantienen un acuerdo de sindicación de las acciones que expira el próximo abril y que da libertad a ambas partes a poder vender libremente. La previsión era que Nestlé comprase la mayor parte de las acciones de Liliane Bettencourt (de 86 años de edad) y su hija, Françoise Bettencourt Meyers, para hacerse como mínimo con el 51% de los títulos. El problema es que L’Oréal está viendo como se resienten sus resultados. El beneficio del grupo de cosmética ha caído un 26% en 2008 y el consejero delegado Jean-Paul Agon ha evitado por primera vez en muchos años dar una previsión de ventas para 2009, limitándose a señalar que será un “año difícil”. En los últimos seis meses, las acciones de L’Oreal han caído un 27% y pueden perder el soporte de los 50 euros. Si Nestlé descarta la compra, los titulos de L’Oréal bajarán en bolsa todavía más. Pero, según fuentes financieras, precisamente en Nestlé se está imponiendo la idea de que es mejor no cambiar nada y seguir con sólo el 30% de L’Oreal para no asumir un endeudamiento que acabaría perjudicando a todo el grupo.Nestlé entró oficialmente en el capital de L'Oréal en 1974, ya que la familia Bettencourt pretendía frenar una posible nacionalización si ganaba el candidato socialista François Miterrand. En la práctica, la alianza se basa en complejas medidas de blindaje, entre ellas que Nestlé no puede comprar más acciones hasta seis meses después de la muerte de la Liliane Bettencourt. Si los mercados estaban especulando hasta ahora con la posibilidad de un acuerdo en vida de Liliane, esta esperanza se ha ido desvaneciendo a medida que L’Oréal ha incumplido sus objetivos de ventas. La cifra de negocio de L’Oréal fue 17.541 millones de euros en 2008, con un crecimiento del 2,8% respecto al ejercicio anterior. En el último trimestre del año, todas las divisiones cayeron en picado, en especial las de lujo, lo que hace augurar un año difícil para el gigante francés.