Óptica: cinco modelos disruptivos para cambiar la moda
De la eliminación de los intermediarios a la unión entre el alquiler y la suscripción, cinco compañías del sector de la óptica han ensayado con modelos de negocio que ya está adaptando el resto de la industria de la moda.
20 jul 2017 - 04:44
Eliminar intermediarios, la personalización o subirse a la ola de hype. En los últimos años, las start ups de óptica han liderado la creación de modelos disruptivos en el negocio de la moda, rompiendo las normas y revolucionando los canales tradicionales del sector. Compañías como Warby Parker, EyeDesired o, en España, Hawkers y Uniqbrow, han irrumpido en un negocio con modelos que ya empiezan a contagiarse al a moda.
El fin del intermediario
Si, en moda, grupos como Inditex han impuesto el formato de tiendas monomarca, la óptica continuaba dominada por el canal tradicional. Ninguna marca podía escapar a las ópticas, controladas en muchos casos por algunos de los gigantes del sector como Luxottica o De Rigo.
Sin embargo, en los últimos años compañías como la estadounidense Warby Parker han desafiado este modelo, saltándose al intermediario para distribuir directamente a través de la Red.
El reto pasa por lograr distribuir gafas graduadas (que requieren de un especialista) a un canal en el que ni si quiera hay contacto físico. Warby Parker lo logró ofreciendo devoluciones gratuitas y un precio que, al prescindir del intermediario, es mucho menor que en el canal óptico.
Crecer al calor del ‘hype’
Otra variante de este modelo consiste en la distribución directa de gafas de sol. El modelo, que en España ha liderado el grupo Hawkers, se apoya en el uso intensivo de redes sociales y en el hype para crear marca y plantar así cara a las imbatibles Ray-Ban.
Precios accesibles, pocos modelos y publicidad a través de Facebook e influencers son tres de las claves de este modelo. Para ahorrar costes, la distribución se realiza también a través de Internet, aunque las empresas con algo de recorrido han terminado dando también el salto a la calle con tiendas propias.
El modelo ‘low cost’ en el canal tradicional
Un tercer modelo pasa por combinar algunos aspectos de la distribución tradicional con las herramientas de comunicación de las nuevas generaciones y una marca independiente. Con este formato, las compañías se apoyan en las redes sociales y los influencers para crear imagen de marca, pero luego recurren a las ópticas para la distribución.
Este ha sido el caso de la española Mr Boho, que ha apostado por la distribución en ópticas porque “da más confianza a los clientes al tratarse de un producto médico”, según explicó Eduardo Jones a Modase.es, pero que mantiene unos precios muy inferiores a los de la mayoría de marcas tradicionales.
Personalización en un producto estándar
Un cuarto modelo de negocio se basa en la customización total del producto. Ofrecer al cliente la posibilidad de poder comprar las diferentes partes de un artículo y crear el modelo que prefiera en cada momento es dar un paso adelante frente a la personalización tradicional. Esta se basaba, hasta ahora, en ofrecer al consumidor la posibilidad de elegir qué características prefería del producto, como el color.
Uniqbrow, por ejemplo, es una de las que está apostando por la nueva estrategia, a través de un sistema que permite extraer la lente de la montura de una gafa y volver a insertarla en otra montura.
La unión del alquiler con la suscripción
Si bien el alquiler de moda ya es un modelo de negocio que ya se encuentra en la industria, con empresas como Rent-The-Runway, así como el de suscripción, con compañías como la start up de camisería White T Supply, la unión entre ambos es dar un paso más, tal como hace EyeDesired.
Por una cuota mensual, las empresas que se acogen a esta estrategia envían a su cliente el producto acordado que, o bien pueden devolver al mes siguiente y recibir otra novedad, o bien tienen la posibilidad de adquirirlo a un precio muy inferior.