Back Stage

Los robots, a la caza del trabajo: 20 millones de puestos en riesgo en 2030

Los robots tendrán serán clave en la producción y se convertirán en el 8,5% de la fuerza manufacturera global, según un estudio de Oxford Economics.

Arturo Juárez

9 jul 2019 - 04:49

Los robots, a la caza del trabajo: 20 millones de puestos en riesgo en 2030

 

Los robots, a la caza del trabajo. En 2030, la robótica podría sustituir al hombre en 20 millones de puestos de trabajo, lo que supondría que los robots se convertirían en el 8,5% de la fuerza productiva global, según el estudio How robots change the world, elaborado por Oxford Economics. Gran parte de ese impacto de los robots en los puestos de trabajo se centraría en China, donde se prevé que catorce millones de esos robots desarrollen su trabajo.

 

Actualmente, gran parte de los robots disponibles se concentra en China, casi un 20% del total. En concreto, esto hace que uno de cada tres de los 2,25 millones de robots que hay actualmente en el mundo esté instalado en el país chino. Le siguen, aunque con mucha distancia, otros países como Japón, Alemania, Estados Unidos o Corea del Sur.

 

El impacto en la industria ha ido en aumento desde 2004. Desde ese año, cada robot instalado en una planta productiva ha desplazado a una media de 1,6 trabajadores. En total, alrededor de 1,7 millones de puestos de trabajo productivos han desaparecido debido a la implementación de robots en la industria.

 

 

 

 

China ha sido la economía en la que sus trabajadores se han visto más perjudicados por el arraigo de los robots. Desde el año 2000, 550.000 trabajos han sido eliminados a causa de la robotización, lo que equivale a un 1% la fuerza productiva actual.

 

En paralelo, Estados Unidos ha retirado del mercado laboral 260.000 trabajos debido a la robotización, un 2% del tejido productivo actual. La Unión Europea, por su parte, también ha sufrido el impacto de la robotización en su mercado laboral, dado que 400.000 trabajos han desaparecido por este motivo, un 1,5% del tejido productivo.

 

La proyección hacia 2030 de las pérdidas de trabajos por robotización impacta de pleno sobre China, que eliminaría unos trece millones de puestos de trabajo, muy por encima de otros países que también perderían puestos para sus trabajadores, como Estados Unidos, Corea del Sur o la Unión Europea.

 

 

 

 

El estudio de Oxford Economics también ha puesto el foco en la desigualdad entre regiones a la hora de que se elimine un trabajo a causa de la automatización. En concreto, la instalación de un robot industrial extra en una región con habitantes de bajo poder adquisitivo provoca la eliminación del doble de puestos de trabajos que provocaría si el robot fuera instalado en una región con altos ingresos y cualificación.

 

En el sector de la moda, que requiere de una intensa mano de obra, la robótica se ha introducido progresivamente en la confección de camisetas. Cada pieza manufacturada supone un coste de personal de 33 centavos de dólar, mientras que con una máquina es de cinco centavos. La estadounidense Softwear Automation ha diseñado el sistema Sewbot, que se sirve de cámaras y brazos robóticos que confeccionan una pieza en apenas cuatro minutos, desde el corte y el cosido hasta el producto final.

 

Gigantes confeccionistas, sobretodo chinos, como Tianyuan Garments o Li&Fung han optado por instalar líneas productivas robotizadas siguiendo el modelo Sewbot. Tianyuan optó por montar una en 2017, con capacidad de fabricar una camiseta cada 22 segundos y produciendo 800.000 prendas al día. Li&Fung, por su parte, cerró el año pasado un acuerdo con Softwear Automation para instalar líneas productivas automatizadas con robots. Por otro lado, los robots también han ayudado a abrir paso a otros puestos de trabajo que se han concebido a partir del arraigo de los robots.