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Andrew Olah (Kingpins): “¿Si no estamos todos juntos, cómo es posible que avance el sector?”

M. Bertero

11 may 2016 - 00:00

Andrew Olah

 

Andrew Olah, fundador de Kingpins Show, se adentra en el mercado latinoamericano en la previa de la próxima edición de la feria en Miami. “Elegimos esta ciudad para atraer al público latinoamericano”, explica el fundador a Modaes. El evento, que se celebrará el 11 y 12 de enero de 2017, tendrá a la ciudad estadounidense como sede por primera vez.

 

Con origen en 2004, Kingpins se ha convertido en una de las principales ferias del denim mundial. La primera edición tuvo lugar en Nueva York, para luego mudarse a otras ciudades como Hong Kong, Los Ángeles y Ámsterdam.

 

“Si bien la mayoría de nuestros visitantes provienen de Estados Unidos, también asisten muchos visitantes latinoamericanos de países como Ecuador, Colombia, Brasil”, afirma Olah. La feria, que no cuenta con una sede en particular sino que se traslada por el mundo, reúne a más de cuarenta expositores por edición.

 

 

En cuanto a este punto, Olah asegura que “no creemos en la idea de que la feria tiene que ser en una sola ciudad; cada evento tiene su particularidad”, afirma el fundador que explica que “con Kingpins queremos llevar el denim al mundo, reunir a gente de la misma industria en dos jornadas, ¿si no estamos todos juntos, cómo es posible que progrese el sector?”.

 

La edición de Kingpins en Miami promete atraer a un gran número de expositores y visitantes de países latinoamericanos. “Sin dudas que Latinoamérica es un mercado en crecimiento con muchísima potencia; Colombia, por ejemplo, es excelente en jeans”, afirma Olah.

 

Para las compañías latinoamericanas de denim, el reto para lograr mayor competitividad está en poder desarrollar marcas globales de denim a nivel internacional. “El mercado brasileño, es el segundo consumidor mundial, y pese a la situación económica que atraviesa, siempre ha sido un gran exportador de trajes de baño, ¿por qué no podrá hacerlo con el denim?” sentencia Olah.

 

A su vez, el fundador de Kingpins añade que “lo que necesitan las empresas es imaginación, no sólo en el diseño, sino ser creativos con el márketing, con la historia que cuenta la marca, la historia detrás del branding”.