Opinión

¿Dónde ubicar el headquarter de una empresa de moda?

Alfredo Martín

7 oct 2014

Headquarter

 

 

Entre las diferentes definiciones y sinónimos existentes he encontrado los siguientes: central office,  home basehome office, HQ,  main office y obviando las de carácter militar,  la que me gusta más es: “The office that serves as the administrative center of an Enterprise”, aunque personalmente para este caso concreto, cambiaría  administrative por strategic.

 

Recientemente recibí un e-mail de una persona que trabajaba en una de las más importantes multinacionales de moda de España. Su consolidado puesto de trabajo sin ninguna duda  podría considerarse como la  envidia de multitud de jóvenes y menos jóvenes. Vive en una gran ciudad española. El problema radicaba en el largo desplazamiento diario que debía realizar, impidiéndole disponer de  un “work life balance”. La situación se agravaba por la  reciente llegada  a su hogar de un nuevo habitante que precisaba una  atención personalizada que no podía proporcionar desde su Tablet.  Entiendo que Tous disponga de una completísima guardería en su sede central de Manresa.

 

Atención a las empresas cuya fuerza laboral se nutra mayoritariamente de mujeres, según Ranstad,  la buena localización del lugar de trabajo figura como su principal preferencia a la hora de elegir una empresa.

 

Por otro lado, está constatada la dificultad de atraer talento a algunas latitudes y  localidades alejadas de los núcleos metropolitanos consolidados y en el supuesto de aceptar el reto,  en muchos casos,  su permanencia suele ser muy limitada en el tiempo y  casi siempre,  con la mera intención de obtener experiencia y currículo para salir disparados en un par de años con un buen dossier bajo el brazo.

 

No hace mucho leía en este mismo medio que Adolfo Domínguez abría oficinas en Madrid trasladando los departamentos de e commerce y marketing al centro de la capital, sumándose al departamento comercial que ya se había adelantado. Aplaudo la decisión de mi ex empresa que  encuentro muy acertada, tan acertada como la ubicación de la sede de Desigual en el centro de Barcelona, a escasos metros de la playa que, según su  equipo directivo, se basa en la aplicación de los valores de la compañía como el positivismo, compromiso, respeto, innovación y creatividad, que se resumen en el lema 'fun and profit' ('diversión y beneficio'). No me imagino lo de “La Vida es Chula” de otra manera.

 

¿Necesitamos un Business Case para demostrar los efectos que tienen sobre la eficiencia, la motivación, la creatividad y la identificación?. Puede ser un buen argumento, en mi opinión  ofrecer condiciones de trabajo significativas y motivadoras es algo totalmente natural, ya que, en última instancia, resulta determinante para  el éxito de la propia empresa.

 

Obviamente se trataría de ubicar adecuadamente solamente los departamentos estratégicos y creativos de toda empresa que contenga esos atributos en su ADN y no tanto de aquellos de carácter meramente administrativo y logístico.  Si no fuera así despoblaríamos de manera egoísta muchas regiones y comarcas de España polarizando toda la actividad en sus dos principales ciudades y eso no sería ni justo ni apropiado para nuestro débil ecosistema económico.

 

Pero… ¿Por qué tienen que estar las oficinas corporativas, de diseño, marketing, etc.  junto a los almacenes?

 

En mi opinión, el motivo principal de una correcta ubicación de los departamentos estratégicos de una empresa de moda, no debería  radicar exclusivamente en una cuestión laboral o de imagen de cara a proveedores, master franquicias, etc.,  que suelen visitar las sedes centrales, y que además de abreviarles el viaje (ahora que vienen de muy lejos) , se deben llevar una buena impresión, sino como apunta la dirección de Desigual en la promoción de la innovación y la creatividad, algo difícil de conseguir en un polígono industrial carente del ambiente y espíritu cosmopolita, diverso e intercultural necesario,  no es suficiente enviar al responsable del departamento correspondiente un par de veces al año a NY, Tokyo o Hong Kong, ni estar suscrito a carísimos portales de pago de información de tendencias, éstas además, en una empresa de moda hay que vivirlas en directo todos los días, o como mínimo en el camino hacia o desde el trabajo, al fin y al cabo la moda es una disciplina eminentemente creativa que requiere de dosis abundantes de conocimiento del mercado, tal como indica Ana Balda en su post sobre Christopher Bailey.

 

Desde mi experiencia puedo asegurar que tener la oficina en pleno Paseo de Gracia me permitió observar y disfrutar de cada detalle  en primicia  como por ejemplo de la celebrada campaña “Be Stupid” de Diesel, o ser de los primeros en conocer nuevos conceptos retail como Cos, Other Stories, etc.  Siempre me pareció un privilegio disponer diariamente de una silla en primera fila de la pasarela y fuente de tendencias en la que se ha convertido la propia calle de una  ciudad de referencia. Algo que no sucedía durante los 3 años en los que la sede de la empresa en la que trabajé estaba en un polígono industrial en Sant Joan Despí.

 

“A la vez que vivimos gracias a las nuevas tecnologías en un planeta más global que nunca –casi sin límites– parece que el mundo es cada vez más pequeño, en el que las  barreras se difuminan y, en algunos casos, incluso desaparecen”.

 

¿Pero sirven igual para los estímulos sensoriales?

 

“Las personas traen diariamente a su lugar de trabajo no solo la información de su grupo o comunidad a la que pertenece, sino que también aportan conocimiento relevante e importante, formas distintas de interpretar las mismas realidades; un enfoque diferente para diseñar procesos, alcanzar objetivos, afrontar tareas, trabajar en equipo, comunicar, etc”.

 

¿Dónde  pueden encontrar su mejor fuente de inspiración?

 

Cómo es lógico sobre todo lo expuesto aquí habrán otras opiniones, las cuales estaría encantado de conocer, este post no pretende ser un monólogo, simplemente es un punto de vista abierto a otras opiniones.

 

Quiero mencionar a Montse Ventosa por su trabajo para la Fundación Bertelsmann “Gestión de la Diversidad Cultural en las empresas” del cual he extraído algunos conceptos para este post.

Alfredo Martín

Alfredo Martín

A partir del negocio de su familia, donde vivió entre telas y patrones, Alfredo Martín se incorporó muy joven a Adolfo Domínguez, abriendo en aquel entonces 1984 lo que fue la segunda tienda de la compañía. En ella desarrolló casi toda su carrera profesional casi siempre en el área del Mediterráneo abriendo y gestionando más 150 tiendas y franquicias. Aunque ahora desvinculado de la misma, siempre se ha considerado parte de ella. Desde 2007 preside la  asociación Amicca, lo que le permite tener una visión transversal de todo el sector retail. Colabora con empresas como profesional independiente ayudándoles a su crecimiento y desarrollo y en el tiempo que le queda, imparte clases en escuelas de retail y realiza algunas ponencias, ya que está comprometido en la formación de los futuros profesionales del retail. Es máster en Gestión de Empresas de Moda y Retail por la Universitat de Barcelona.