Hermès transforma Manhattan en un juego de pistas para celebrar su herencia ecuestre

Hermès recupera su herencia ecuestre en formato lúdico. La casa francesa ha estrenado una instalación inmersiva gratuita titulada Mystery at the Grooms, donde los visitantes deben resolver un enigma: ayudar a los cuidadores a encontrar los caballos que han desaparecido de la residencia de los novios. Ubicado en el Pier 36 de Manhattan, en Nueva York, la experiencia ya ha sumado más de 25.000 participantes y estará activa hasta el 29 de junio con registro previo.

El recorrido transcurre por seis habitaciones tematizadas en las que los jugadores disponen de siete minutos para encontrar cinco caballos ocultos por el espacio. Cada habitación contiene pistas y elementos sorpresa, como caballos escondidos en cajas fuertes, detrás de paneles o impresos en prendas de ropa en movimiento.

Pero los caballos no son el único elemento en el juego: los participantes cuentan con la ayuda de personajes ficticios como Maeleine Galop, la jefa de cuadra o el detective Mr. Honore, cuya voz guía la historia de la marca y apela a la primera calle de París que se instauró la primera tienda de Hermès.

Hermès traslada su universo creativo a Nueva York con una experiencia inmersiva y gratuita

Más allá del componente lúdico, la instalación actúa como escaparate creativo de los dieciséis metiers, las categorías de producto de la firma. Desde marroquinería y prendas hasta porcelana o artículos ecuestres, cada habitación también oculta piezas reales del universo Hermès, muchas de ellas poco accesibles para la comercialización.

La experiencia, que debutó a finales del año pasado en Shanghái, recorrerá otras ciudades clave como Tokio, Singapur y París tras su paso por Nueva York. Los participantes que logran encontrar todos los caballos son premiados con un cuaderno y un libro para colorear, a modo de recuerdo de su paso por el universo de la marca.

Con una elevada inversión publicitaria, Hermès ha posicionado el evento cultural entre el gran público. Para Pierre-Alexis Dumas, director artístico de la casa, el juego simboliza el movimiento, imaginación y libertad, siendo el caballo la insignia de la marca desde la creación.