
La historia de los maniquís se remonta al antiguo Egipto, pero no fue hasta la Revolución Industrial que encontraron el hueco que hoy ocupan en los escaparates.
Los probadores virtuales, los escaparates interactivos o el Rfid se han convertido en elementos habituales en las tiendas, que recurren a la tecnología para mejorar su eficiencia y darle otra vuelta de tuerca a la experiencia de compra.
Zara, Benetton, Armani, Guess o Dior han apostado en los últimos años por tiendas ecoeficientes, con la mirada puesta en el ahorro energético y la sostenibilidad.
Con el fin de las dos temporadas clásicas y el aumento de la competencia, las tiendas deben cambiar casi tan rápido como la oferta para seducir al cliente.