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Marcolin crece en Asia y abre una nueva filial en Shanghái

La empresa lleva en el mercado asiático desde hace siete años de la mano de Ginko Group, un operador de larga trayectoria en el mercado local de las gafas.

Modaes

12 jul 2021 - 13:46

Marcolin crece en Asia y abre una nueva filial en Shanghái

 

 

Marcolin se expande. El tercer mayor grupo óptico del mundo, por detrás de Luxottica y Safilo, ha abierto una nueva filial propia en Shanghái para reforzar el crecimiento orgánico en el mercado chino.

 

La apertura de la nueva sucursal está ubicada estratégicamente en Plaza 66 en el distrito de Jing’an, un importante foco comercial en el centro de Shanghái. En ella se establecerán los departamentos corporativos de recursos humanos, finanzas, diseño, ventas, atención al cliente, márketing y cadena de suministro, hospedando así todas las funciones propias de cada sección.


 

“Es probable que China sea una de las pocas economías importantes que se expandirá en un futuro próximo. La nueva sucursal cubrirá toda la China continental, junto con las demás filiales de la región de Asia-Pacífico: Hong Kong, Singapur y Sídney”, comenta Kevin Cheung, director de Marcolin en los mercados de Asia-Pacífico.

 

La empresa tiene una estrecha relación con clientes chinos con los que trabaja en diseño y adaptación de productos. La nueva sucursal favorecerá el desarrollo de la cadena de suministro y ayudará a cubrir la demanda de los consumidores.


Marcolin fue fundada en 1961 en Véneto, Italia. Marcolin gestiona las licencias ópticas de marcas como Tom Ford, Moncler, Ermenegildo Zegna, Swarovski, Emilio Pucci, Sportmax, Max Mara o Tod’s. A través de socios globales y de su propia red de distribución, Marcolin vende sus productos en más de 125 países.

 

En 2017, el grupo LVMH entró en el capital de Marcolin a través de una ampliación de capital de 21,9 millones de euros. En el año 2020, Marcolín descendió sus ventas y retrocedió en todos los mercados, viéndose afectada por la pandemia del Covid-19. La compañía empezó a recuperarse gradualmente entre mayo y junio del año pasado, mejorando su resultado de manera notoria en el tercer trimestre de 2020. La compañía cerró el ejercicio 2020 con una facturación de 340 millones de euros, lo que supuso un descenso del 30,1% respecto al año anterior.