Equipamiento

El interproveedor Happy Punt gana cuerpo con una nueva sede de 8.500 metros cuadrados

La compañía, liderada por Diego Ódena, cuenta con una plantilla de 117 trabajadores y cerró 2015 con una cifra de negocio de 52 millones de euros.

S. Riera/ P. Riaño

9 nov 2016 - 04:44

 

Happy Punt engrosa su tamaño. El interproveedor textil, que cuenta con Inditex entre sus principales clientes, se ha trasladado a unas nuevas instalaciones en Mataró (Barcelona). La nueva sede del grupo cuenta con una superficie de 8.500 metros cuadrados repartidos en dos plantas, además del almacén.

 

Fundada en el año 2000, Happy Punt está especializado en el diseño y la gestión de la producción de colecciones de moda. La empresa cuenta en la actualidad con una plantilla de 117 personas, 65 de las cuales se concentran en los departamentos de diseño y desarrollo de producto. La compañía concluyó 2015 con una cifra de negocio de 52 millones de euros y espera cerrar 2016 con un crecimiento de cerca del 8%. Happy Punt gestiona la producción de las colecciones en Portugal, Marruecos, Vietnam, Camboya y Turquía.  

 

El fundador de la empresa, Diego Ódena, ha explicado a Modaes.es que su antigua sede, también en la localidad de Mataró, se había quedado pequeña ante el crecimiento de su estructura en los últimos años. Según el empresario, la compañía había ido resolviendo sus problemas de espacio tomando la superficie de las naves colindantes. La nueva sede es de reciente construcción y está realizada según las necesidades del grupo.

 

 

En madera, hormigón y metacrilato, el epicentro del edificio es el espacio abierto para los equipos de diseño, grafismo, operaciones, comercial y compras. En las salas adyacentes se encuentran los equipos de patronaje, corte y confección de muestras. La empresa mantiene en plantilla a nueve patronistas, doce cosedoras y cuatro cortadoras sólo para la confección de muestras.

 

Happy Punt también ha trasladado a sus nuevas instalaciones otros procesos industriales, como estampación, y de tintura y lavado. “No todas las empresas tienen estos procesos integrados, pero pensamos que nos ayudan para tener un mayor control con las muestras y nos da mucha rapidez”, explica Ódena. En 2015, Happy Punt elaboró más de 11.000 muestras, de las cuales 8.000 eran diseños nuevos y, de éstos, se llegaron a elaborar un millar.

 

La empresa también ha replicado en su nueva sede su biblioteca de fornituras, inspirado en el laboratorio de especias del cocinero Juan Mari Arzak; la biblioteca de shoppings, con las prendas que traen los diseñadores de todo el mundo, y, en el almacén, la de muestras de tejido.

 

 

En sus nuevas instalaciones, Happy Punt ha dejado libre un espacio para el desarrollo de wereables. “Es nuestra próxima apuesta”, ha explicado Ódena, quien considera que es factible el desarrollo de prendas con aplicaciones funcionales con los márgenes en el que se mueve el fast fashion. Por el momento, la empresa ha empezado a trabajar con expertos para sentar las bases de este nuevo proyecto.

 

Por último, la nueva sede está equipada con showrooms para las presentaciones de muestrario y diferentes salas de reuniones, y cuenta con un restaurante para la plantilla con cocina propia.