Entorno

Rumanía: elecciones, inflación y bajo crecimiento en un cliente en alza para la moda

Con una economía en auge, aunque no tanto como sus países vecinos, y unas elecciones presidenciales con una primera vuelta sorprendente, Rumanía se abre un hueco poco a poco como un cliente potencial para la moda extranjera.

Rumanía: elecciones, inflación y bajo crecimiento en un cliente en alza para la moda
Rumanía: elecciones, inflación y bajo crecimiento en un cliente en alza para la moda
El país se alza como el sexto mayor miembro de la UE por población, la economía rumana desaceleró hasta un 2,1% en 2023.

Celia Oliveras

26 nov 2024 - 05:00

En un año marcado por procesos electorales en todo el mundo, conflictos geopolíticos y la persistente incertidumbre macroeconómica, ¿a qué retos se enfrentan las principales economías del mundo? La serie Mercados estratégicos hace una radiografía de las principales potencias mundiales y analiza cuál es su relación con España, así como los principales desafíos a los que se enfrentan en los próximos años.

 

Mercados estratégicos

Radiografía de un mundo global

 

 

Con más de 650 kilómetros de frontera compartida, Rumanía se ha alzado desde el inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania como el gran aliado del país candidato a unirse a la Unión Europea. Desde el inicio del conflicto hace ahora casi tres años, la frontera entre ambos países ha permitido la entrada a la UE de millones de toneladas de cereales y grano provenientes de Ucrania, uno de los principales exportadores de este material al conjunto de los Veintisiete.

 

La política fronteriza del país, sin embargo, podría estar a punto de cambiar, después de que el candidato de extrema derecha y mucho más afín al gigante exsoviético, Calin Georgescu, se haya impuesto por sorpresa en la primera ronda de las elecciones presidenciales del país celebradas el domingo.

 

Con más de 2,11 millones de votos, en un país con 19 millones de habitantes, Georgescu se ha hecho con el 23,94% del recuento final, por delante de Elena Lasconi, candidata del partido de centro derecha Unión Salva Rumanía y que se ha situado en segunda posición con el 19,7% de los votos. Georgescu y Lasconi se enfrentarán en la segunda vuelta electoral el 8 de diciembre, de la que ha quedado oficialmente excluido el actual primer ministro del país y miembro del partido socialdemócrata, Marcel Ciolacu.

 

El rol de presidencia al que aspiran ambos candidatos supone el control durante cinco años en ámbitos como la seguridad nacional, la política exterior o cualquier relación con la Otan y la propia Unión Europea, de la que Rumanía es miembro desde 2007. En pleno conflicto abierto entre Rusia y Ucrania, la reciente victoria de Donald Trump en Estados Unidos y la posible entrada del país en el espacio Schengen (que lleva posponiéndose más de una década por la oposición de algunos países), una posible victoria de Georgescu haría temblar todavía más la crisis de identidad de la UE ante el auge de partidos de extrema derecha entre sus miembros.

 

 

 

 

El país se alza como el sexto mayor miembro de la UE por población y la economía rumana desaceleró hasta un 2,1% en 2023, según datos del Banco Mundial, especialmente lastrada por la inflación y la mayor demanda externa. De cara a 2024, las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) pasan porque el Producto Interior Bruto (PIB) del país crezca ligeramente, hasta un 1,9%, seguido de otro 3,3% en 2025. Esta recuperación de la economía del país, sin embargo, no alcanza la media de la región de los países emergente europeos, que en su conjunto está previsto que crezcan un 3,2% a cierre del año.

 

Rumanía va de la mano, de hecho, de países del este del continente europeo como Polonia o Bulgaria, que cerrarán 2024 con alzas previstas del PIB del 3% y 2,3%, respectivamente. Según datos de Eurostat, el PIB per cápita del país se sitúa actualmente en 30.000 euros, por debajo de los 37.600 euros de media de la UE.  La economía rumana, además, supone un 1,9% del PIB total de todos los países.

 

 

 

 

El campo europeo

Rumanía no ha permitido únicamente, a través del puerto del Mar Negro, la entrada del grano y cereal ruso, sino que se alza también como uno de los grandes exportadores de este material a Europa. De cara a este año, el país prevé producir entre 60 millones y 61 millones de toneladas, ligeramente por debajo de los 63 millones de toneladas que recolectó en 2023.

 

A pesar del peso de este sector entre la población, la explotación agrícola se articula principalmente a través de pequeños propietarios que gestionan sus propios terrenos, lo que reduce notablemente el rendimiento de estos territorios. En 2023, y con una superficie explotable de 12,8 millones de hectáreas, el sector aportó un 4,5% del PIB del país, según datos de la Oficina Económica y Comercial de España en Bucarest.

 

Es igual de importante la industria del automovilismo. El país cuenta a día de hoy con las fábricas de Renault y Ford, así como toda una red de fabricantes que suministran componentes a otras compañías establecidas en otros países. “Por Rumanía pasan tres corredores europeos de transporte y dispone de acceso a más de 200 millones de consumidores en un radio de 1.000 kilómetros, con salida al Mar Negro y privilegiada posición para abastecer a los mercados de Europa Central y Oriental”, aseguran desde la oficina española en el país.

 

 

 

 

El auge de la moda

La moda se ha alzado como uno de los sectores en auge en los últimos años. Según datos de Icex España Exportaciones e Inversiones, las importaciones de moda en Rumanía alcanzaron un total de 3.270 millones de euros, un alza del 25 % respecto al año anterior. Los principales proveedores de moda al país son Polonia, con un 18% de la cuota de mercado, o Italia y Alemania, con un 16% y 12% de la cuota de mercado, respectivamente.

 

Con una renta media mensual de alrededor de 1.476 euros, el gasto medio en ropa alcanzó los 650 euros en 2023, es decir, un 44% del presupuesto total, por encima de la media en el resto de la región. España se sitúa como el cuarto gran proveedor de moda a Rumanía, con un 7% del total de las importaciones de moda del país, donde operan compañías como Inditex, Mango o Cortefiel.

 

 

 

 

A cierre de 2023, únicamente Inditex contaba con 144 establecimientos en el país: 26 tiendas de Zara, 27 tiendas de Pull&Bear, 25 y 23 establecimientos de Stradivarius y Oysho, respectivamente, junto con 13 tiendas de Massimo Dutti. La cadena de moda más joven, Bershka, es la que cuenta con mayor presencia, e Inditex opera un total de 30 establecimientos en el país. Según datos de Icex, el grupo facturó en 2023 más de 445 millones de euros en el país.

 

En el último informe de Icex del país, además, el organismo asegura que, según el store-check de Zara (un proceso de investigación para analizar tanto el desempeño propio como el de los consumidores en un país) revela que los precios en Rumanía son entre 1 % y 14 % más altos que en España, “principalmente por costos adicionales de transporte, aunque la demanda en moda sigue estable, especialmente en el comercio electrónico”. El ecommerce es, de hecho, el gran impulsor de la moda en el país, y se prevé que alcance los 2.000 millones de euros en 2024, algo más del 40% de las ventas de moda en el país.