Entorno

¿Qué le espera a Latinoamérica en la era Trump?

Desde suspender el Tclan hasta construir un muro, el magnate neoyorkino asume hoy su cargo como presidente de Estados Unidos, con México como su “peor enemigo”. 

María Bertero

19 ene 2017 - 00:00

 

 

Estados Unidos abre hoy la nueva era Trump mientras el resto del mundo atiende expectante al devenir de las acciones del nuevo Gobierno. El nuevo presidente electo de la Casa Blanca, el republicano Donald Trump, tomará hoy posesión de su cargo y todo indica que desplegará un programa económico de tinte proteccionista que puede tener un impacto directo en las economías latinoamericanas.

 

En su revisión de perspectivas de crecimiento de las economías mundiales de enero, el Fondo Monetario Internacional (FMI), elevó sus previsiones para Estados Unidos, a las puertas del ascenso de Trump a la Casa Blanca. El organismo pronostica un crecimiento del 2,3% de la economía estadounidense para este año y del 2,5% en 2018.

 

En contraste, esta semana, el FMI rebajó sus previsiones en torno a la economía mexicana. ¿El principal factor?, la llegada de Trump al poder. En sus discursos de campaña, el magnate neoyorkino recalcó su poco interés en mantener la relación comercial entre Estados Unidos y México, acusó a los mexicanos de robar puestos de trabajo en el país vecino y hasta amenazó con construir un muro. A la espera de cuál de todas estas medidas podrá llevar a cabo Trump, el FMI redujo seis décimas la previsión de crecimiento de la economía mexicana para los próximos dos años.

 

 

El Tratado de Libre Comercio de América del Norte (Tclan), que data de 1988, genera un intercambio comercial entre México y Estados Unidos de 532.000 millones de dólares cada año.  Según Trump, la alianza entre ambos países (que incluye también a Canadá) ha provocado que millones de fuentes de trabajo hayan desaparecido de la economía estadounidense. Desde su victoria el pasado 8 de noviembre, la industria automotriz ha sido una de las más afectadas en México. El futuro presidente ha instado a empresas como Ford, General Motors y Toyota, entre

otras, a cancelar sus operaciones en el país.

 

En cuanto a la industria de la moda, el ascenso de Trump tuvo un fuerte impacto en la compra de Ripley por parte de Liverpool. La debilidad de la moneda mexicana frente al dólar ha encarecido un 10% la operación. Uno de los escenarios posibles es que la transacción se llegue a cancelar, debido también a otros factores, como el no de los socios minoritarios de Ripley.

 

Además, de suspenderse el Tclan, la industria textil mexicana se vería altamente afectada. El país exporta 2.300 millones de dólares a Estados Unidos en prendas confeccionadas, según los últimos datos disponibles en el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de México. 

 

Sin embargo, en medio de este escenario, la industria mexicana de la confección podría centrar sus esfuerzos en la venta de prendas a otros países de Latinoamérica, con los que también comparte políticas de libre comercio, aunque en menor medida que con Estados Unidos.  

 

 

Colombia también ha seguido de cerca las decisiones de Trump. Estados Unidos es el principal socio comercial del país cafetero, que realiza uno de cada tres envíos al extranjero al mercado estadounidense, por un total de 8.800 millones de dólares al año. El Tratado de Libre Comercio entre ambos países rige desde 2012.

 

Al cerrarse el intercambio comercial con México, muchas empresas internacionales podrían virar su estrategia a Colombia, ya que se posiciona como el segundo mercado más fuerte de Latinoamérica debido a la debilidad de la economía brasileña. A su vez, muchas empresas colombianas han volcado su producción a Estados Unidos en los últimos años. No así las compañías de moda, que concentran el grueso de sus operaciones en otros países de Latinoamérica.

 

En el mercado de divisas de Chile, el discurso de Trump también tuvo sus repercusiones. El martes pasado, el dólar cayó casi cinco pesos chilenos, tras las declaraciones del magnate de que “el dólar está demasiado alto”. La moneda chilena se ha fortalecido respecto a la divisa estadounidense, cerrando el mercado a 657,2 pesos chilenos el dólar.

 

 

Chile destina el 13% de sus exportaciones al país norteamericano y cuenta con múltiples acuerdos comerciales con Estados Unidos. La economía chilena es altamente dependiente del comercio exterior, por lo que el país andino se podría ver directamente afectado si el Tclan llega a su fin.

 

En cuanto al negocio de la moda, los tres gigantes del retail de Chile no tienen operaciones en Estados Unidos. Cencosud concentra su distribución en Sudamérica, aunque Falabella, que prevé este año comenzar a operar en el mercado mexicano, podría demorar su desembarco a la espera de una mayor estabilidad de la economía azteca. Ripley, por su parte, seguirá en vilo ante la posible compra de Liverpool y la incertidumbre que atraviesa México.